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¡¡¡Gacias a Dios por los pastores!!!

1 PEDRO 5 : 1 – 4
Quiero aconsejar ahora a los ancianos de las congregaciones de ustedes, yo que soy anciano como ellos y testigo de los sufrimientos de Cristo, y que, lo mismo que ellos, voy a tener parte en la gloria que ha de manifestarse. Cuiden de las ovejas de Dios que han sido puestas a su cargo ; háganlo de buena voluntad, como Dios quiere, y no por obligación ni por Ambición de dinero. Realicen su trabajo de buena gana, no como si ustedes fueran los dueños de los que están a su cuidado, sino procurando ser un ejemplo para ellos. Así, cuando aparezca el Pastor principal, ustedes recibirán la corona de la gloria, una corona que jamás se marchitara.

Todas las veces que realizo mis contactos de evangelización personal, tengo en mi mente las palabras del Salmista de David : » El Señor es mi Pastor», yo también las hago mías también. Jesús dijo: » Yo soy el buen Pastor, el buen Pastor su vida da por las ovejas». Jn. 10 : 11.

Todo creyente podría dar esta misma respuesta, incluso los propios pastores. ( 1 Sam. 17: 34-37).

Jesús es el Pastor de nuestras almas, pero esta afirmación no niega el hecho de que Cristo » Constituyó a unos apóstoles, a otros, profetas, a otros, evangelistas, a otros, pastores y maestros» ( Ef. 4:11).

¿Quién es un Pastor?
Todo aquel que supervisa y cuida de las necesidades de una congregación local. También se les llama Ancianos ( Hch 20:17, Tito 1:5) y Obispos ( 1 Ti 3:1, Tito 1:7).

El Apóstol Pablo nombró a personas idóneas para que cuidarán el rebaño de Dios, dándoles la siguiente recomendación : » Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por Obispos, para apacentar la iglesia del Señor él cuál el ganó por su propia Sangre» ( Hch 20:28).

El Apóstol Pedro ( 1P 5: 1-4) hace la siguiente recomendación a los pastores ( ministros responsables) : » Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros : No por fuerza, sino voluntariamente ;… El versículo 4 se refiere al » Supremo Pastor «, cuyas ovejas no son solamente las del rebaño, sino también los pastores responsables. ( Hch 13:20).

Nadie puede negar esta verdad : » Dios llama a determinadas personas para que cuiden su rebaño».
Anhelar el ministerio es un gran privilegio y buena obra se desea ( 1 Ti 3:1).
Pablo recomienda que el ministro sea : ( 1 Ti 3: 2-7) irreprensibles, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso… no avaro; que gobierne bien su casa… También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera.

¿ Es o no necesario un Pastor?
La recomendación que nos da ( Heb. 13 : 7, 17) es la siguiente : » Acordaos de vuestros pastores ( guías ) que os hablaron la palabra de Dios ; considerad cuál haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe. Obedeced a vuestros pastores ( guías) y sujetaos a ellos ; porque ellos velan por vuestras almas; como quienes han de dar cuenta ; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, por que esto no os es provechoso «.

Por tanto los pastores debemos :
a) Predicar la palabra de Dios ( no herejías de perdición). Tito 1: 9-11.

b) Enseñar la palabra. ( 1 Ti 3: 2).
c) Ejercer el liderazgo de la Iglesia. ( 1 Tes 5: 12)

d) Ser ejemplo de pureza y sana doctrina. ( Tito 2: 7 – 8)

e) Ser obedecidos ( porque velan por las almas). Heb 12: 15, 13:17).

El pastor es necesario, si, repito es necesario, y no lo digo solamente porque soy uno de ellos, sino porque hoy recuerdo con gratitud aquellos días en que yo también tuve pastores que, con sus consejos y exhortaciones, cuidaban de mi vida espiritual ( mi agradecimiento para el Rev. Stanley P. Storey ( QDDG), Rev. Danilo Solis, Rev. Humberto R. Mena).

El pastor es necesario porque forma parte del plan divino de la Salvación – Hombres llamados por Dios para que cuiden su rebaño.

Pablo le dice a Timoteo : » Serás buen ministro de Jesucristo, nutrido con las palabras de la fe y de la buena doctrina que has seguido». ( Ti 4:6).

Gracias a Dios por los pastores que, después de un tiempo de observación, pueden ser imitados y obedecidos, apoyados y sostenidos por las oraciones, amados y defendidos.

¡¡¡ FELIZ LA IGLESIA QUE TIENE TAL PASTOR !!

Fuente: Adolfo Lemus / Honduras

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