Articulos

Descifrando las Claves del Siervo de Cristo Actitud, Fe y Servicio

El médico Lucas presenta tres condiciones poco atractivas, para el cristiano moderno de hoy; pero para todo seguidor de Jesucristo es un privilegio y muy atractivo para Dios. Para nostros esto viene hacer consejos prácticos de gran valor y de vida para cumplir nuestro cometido. Estas son tres palabras poderosas e importantes y son: Actitud, Fe y Servicio.

Es la capacidad de una persona para realizar adecuadamente una función o servicio. Manera de estar alguien dispuesto a comportarse u a obrar. Es aquella actitud optimista y positiva ante las situaciones que se presentan en el momento de emprender un servicio a Cristo.

Es la primera condición del discípulo (versos. 7-8) Alguien dijo: “La actitud es una pequeña cosa que marca una gran diferencia”. Otro dijo: “Tu actitud puede llevarte hacia delante o tu actitud puede llevarte hacia abajo”. Jesucristo es el modelo de siervo, Él dijo: “No he venido a que me sirvan sino que vine a servir” (Marcos 10:45). Y Pablo aconseja, en (Filipenses 2:5-11) Haya en vosotros este sentir. De él viene esa buena actitud para hacer lo que nos pide Dios.

LA FE DEL SIERVO
Esa fe debería ser como un grano de mostaza. Es una fe pequeña pero en un Dios muy grande. La fe se relaciona con lo imposible, la fe es para agradar a Dios (Hebreos 11:6). Hay un desafío y es que el justo por su fe vivirá (Romanos 1:17). La fe desarraiga y mueve montana es decir lo que estorba en nuestro camino con Cristo.

Fe para hacer morir lo malo. Debemos llenarnos de fe como Siervos de Dios. La preocupación termina cuando comienza la fe en Dios. Donde veas 1% de posibilidades tienes 99% de fe y verás los resultados. Los demonios tienen más fe que nosotros (Santiago 2:19), porque creen y tiemblan; nosotros ni creemos ni temblamos ante Dios ni en su palabra.

EL SERVICIO DEL SIERVO.
Hemos sido salvos para realizar un servicio. El verdadero discípulo no se siente superior a los demás. El verdadero discípulo ni se queja ni hace demandas, ni hace exigencias.

El verdadero siervo no presume de lo que hace ni de lo que hará, ni mucho menos se siente superior a otros. El verdadero discípulo hace su trabajo aunque esté cansado cumple con su parte ver (Mateo 24:45-51). Hay un pensamiento que dice: “Lo que haces tiene mucho mayor impacto que lo que dices”. Martin Luther King dijo: “Todos pueden ser grandes porque todos pueden servir”.

Aplicación Personal: ¿Quieres ser un buen siervo y fiel? Dile al señor de todo corazón si decide seguirlo y obedecerlo en todo lo que te pida? ¿Qué me enseña Dios por medio de este mensaje? ¿Qué espera Dios que yo haga en esta Iglesia y con este mensaje?

¿Qué Decisión va a tomar? Sea el siervo o sierva que Dios quiere, para que haga lo que Dios le manda hacer.

Oración Final: Señor ayúdame a hacer el siervo que tú quieres.

Fuente:
Pastora Neptaly Molina

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba