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Como debemos orar

Mateo 6:9-10 «Ustedes deben orar así:» “Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.»

Como dije en nuestra primera parte de este tema de la oración que, a veces parece ser redundante por la cantidad de veces que escuchamos sobre el tema. Pero por mucho que uno hable de la oración, nunca es lo suficiente, ya que es un tema primordial en la vida Cristiana. Quien nos enseña como orar es el mismo SEÑOR JESUCRISTO. Que DIOS bendiga Su Palabra predicada en esta mañana.

Trasfondo. Esta oración del PADRE NUESTRO también la encontramos en el Texto Paralelo de Lucas 11:1-4.

Como estuve diciendo en la primera parte de este tema, algunos han querido probar que el Padre Nuestro de Mateo y Lucas es la misma enseñanza, en realidad no lo es. De hecho, no hay duda de que el SEÑOR JESÚS tuvo que enseñar a Sus discípulos en diferentes lugares en más de una ocasión sobre el mismo tema para que pudieran aprender lo que había enseñado en otro lugar.

El relato de Lucas sobre esta oración modelo es una versión abreviada de la que encontramos en Mateo, aunque las dos oraciones fueron enseñadas en diferentes ocasiones. El relato del Evangelio de Mateo fue en Galilea; la que Lucas nos relata ocurrió varios meses después en Judea.i

En el relato de Mateo, la Oración Modelo está incorporada al Sermón del Monte. Después de haber aprendido las enseñanzas del Reino, ahora continúa sobre cómo debemos orar.

En este relato de Mateo, el SEÑOR JESÚS comienza diciendo: «Ustedes deben orar así:»

En el relato de Lucas, fue uno de Sus discípulos quien le pidió que los enseñara a orar.

(Lucas 11:1) «Un día estaba Jesús orando en cierto lugar. Cuando terminó, le dijo uno de sus discípulos: Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó a sus discípulos.»

 Así que quien mejor que el mismo HIJO DE DIOS, totalmente DIOS y totalmente HOMBRE, quien sabe muy bien la necesidad del ser humano, para enseñarnos como es que debemos orar.

PADRE NUESTRO QUE ESTÁS EN LOS CIELOS. (Mateo 6:9) «Ustedes deben orar así:» “Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre.»

Debemos notar que no dice MI PADRE, sino PADRE NUESTRO. En realidad, en esta corta oración, los pronombres personales no existen, sino que se habla de NUESTRO en plural.

Cuando uno recibe a JESUCRISTO como Salvador, uno entra en la FAMILIA DE DIOS.

Así cuando oramos, el SEÑOR JESÚS nos enseña que ya no es solamente de aquello que se refiere a lo que es mío, sino a NOSOTROS.

Hace ya más de 20 años desde que escuché por primera vez el anuncio para los jóvenes unirse al ejército de los Estados Unidos como el «ejército de una persona» («an army of one»).

Siempre he considerado eso como solamente una manera de atraer a individuos para apreciar el valor individual de cada soldado, pero en realidad, eso no es otra cosa que una contradicción, ya que, en el ejército, o cualquier otro cuerpo militar, es de mucha importancia la unidad del cuerpo en la batalla o en la lucha, ya que el uno depende del otro.

Así también en la HERMANDAD Cristiana, el valor individual tiene que menguar, ya que nuestra misión es de PROCLAMAR el Evangelio a todo el mundo, dando a ver que todos somos necesarios, y que es esencial que aquellos que no conocen a JESUCRISTO lo puedan conocer.

Otra razón para entender que aquellos que no quieren congregarse y piensan que pueden alimentarse en casa por medio de la radio, televisión o internet viendo o escuchando a predicadores, no es otra cosa que una iglesia INDIVIDUAL, cuando en realidad eso no puede ser, ya que hemos aclarado que necesitamos la ayuda de los demás para llevar a cabo la Obra del Evangelio.

DIOS ES PADRE. (Juan 1:11-13) «Vino a lo que era suyo, pero los suyos no lo recibieron. Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. Estos no nacen de la sangre, ni por deseos naturales, ni por voluntad humana, sino que nacen de Dios.» 

Debemos recordar cómo hemos leído en nuestro Texto, que nadie puede llamar a DIOS PADRE, a no ser que haya llegado a Su Familia por medio de Su Hijo, JESUCRISTO.

NOTA: Debemos notar que es JESUCRISTO quien nos enseña a orar, no como nosotros queramos hacerlo, sino como Él quiere que lo hagamos, y esto lo hacemos porque tenemos una RELACIÓN con el Salvador del mundo. Es por medio de la Obra Redentora en la Cruz del Calvario que podemos llamar a DIOS: PADRE.

En este tiempo de feminismo moderno y de la confusión de género en algunos que no quieren ser como nacieron, sino como se sienten que son, es fácil perder de vista lo que la Biblia enseña sobre quien es DIOS.

Pero, aunque DIOS no es como nosotros, la Biblia lo presenta como PADRE, y a la Segunda Persona de la Santísima Trinidad como Su Hijo Unigénito.

DIOS es un Padre que Ama. (Juan 3:16) «Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.»

 Noten que el deseo de DIOS es que el que cree en Él no se pierda, sino que tanga vida eterna.

Y en Romanos 5:8 dice: «Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.»

DIOS es un Padre que PROVEE. (Mateo 6:32-33) «Los paganos andan tras todas estas cosas, pero el Padre celestial sabe que ustedes las necesitan. 33 Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.»

SANTIFICADO SEA TU NOMBRE. (Mateo 6:9) «Ustedes deben orar así:» “Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre.»

Nótese que es común en el mundo blasfemar y tomar el Nombre de DIOS en vano.

De hecho, los ateos cometen una contradicción cuando blasfeman y toman en vano el Nombre de DIOS, ya que supuestamente para ellos Dios no existe.

Sin embargo, nosotros los que somos parte de Su Familia, REVERENCIAMOS el NOMBRE de DIOS.

Pero ¿Qué significa SANTIFICADO SEA TU NOMBRE? El Dr. Albert Mohler lo explica así:

Cuando JESÚS le pide a Dios que Su Nombre sea Santificado, le está pidiendo que Dios actúe de una manera que demuestra visiblemente Su Santidad y Su Gloria.

Al pedirle que el Nombre de Dios sea SANTIFICADO, JESÚS le pide a Dios que se mueva y actúe en el mundo, que la gente valore Su Gloria y Su Santidad y que atesore Su Carácter sobre todo lo demás.

Cuando le pedimos a Dios que Su Nombre sea Santificado, estamos pidiendo que la iglesia sea santificada. La iglesia es quien administra el Nombre de DIOS.

Esa es la responsabilidad de todo el que ha NACIDO DE NUEVO y es parte de la Familia de DIOS.

Nótese que pedir que el Nombre de DIOS sea SANTIFICADO, también es una petición Evangelística, ya que mientras más personas conocen a JESUCRISTO como Salvador, más personas REVERENCIARÁN Su Nombre.

Recordemos lo que ya hemos mencionado y es que es la Iglesia quien REVERENCIA EL NOMBRE DE DIOS.

Algo más sobre pedir que el NOMBRE DE DIOS sea SANTIFICADO es entender que cuando mencionamos el Nombre de DIOS, estamos mencionado quien es DIOS. Dice William Barclay:

«En hebreo, el nombre quiere decir la naturaleza, el carácter, la personalidad de la persona en tanto en cuanto nos es conocida o revelada. Esto resulta claro cuando vemos cómo usan la expresión los autores bíblicos.»v

Ejemplos del NOMBRE:

(Salmo 20:7) «Unos confían en carros, y otros en caballos; Mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios nos acordamos.» RVR 1977 

(Salmo 9:10) «En ti confiarán los que conocen tu nombre, Por cuanto tú, oh Jehová, no desamparas a los que te buscan.» RVR 1977

(Mateo 10:22) «Por causa de mi nombre todo el mundo los odiará, pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.» 

(Salmo 79:9) «Ayúdanos, oh Dios de nuestra salvación, por la gloria de tu nombre; Y líbranos, y perdona nuestros pecados por amor de tu nombre.» RVR 1977

VENGA TU REINO. (Mateo 6:10) «venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.» 

Al entrar en esta Segunda Petición, el creyente debe notar que esta oración muestra que hay UN SÓLO DIOS, y que ese Reino ha llegado solamente por medio de la Obra Redentora de JESUCRISTO en la Cruz del Calvario, y Su RESURRECCIÓN de entre los muertos.

Así que dirigirse a DIOS como PADRE y orar que Su Nombre sea SANTIFICADO, muestra una vez más que esta no es una oración cualquiera, es una oración que HONRA AL ÚNICO Y VERDADERO DIOS.

Cuando hablamos del REINO DE DIOS, hablamos del PRESENTE y del FUTURO. O sea, el SEÑOR JESUCRISTO enseñó que el REINO de DIOS ya estaba aquí.

(Marcos 1:14) «Después de que encarcelaron a Juan, Jesús se fue a Galilea a anunciar las buenas nuevas de Dios. 15 «Se ha cumplido el tiempo —decía—. El reino de Dios está cerca. ¡Arrepiéntanse y crean las buenas nuevas!»

(Lucas 11:20) «Pero, si expulso a los demonios con el poder[h] de Dios, eso significa que ha llegado a ustedes el reino de Dios.»

El Reino de DIOS ha llegado con la llegada de JESUCRISTO quien como hemos leído en estos Textos, anunció que debían arrepentirse porque el Reino de los Cielos estaba cerca.

Así la Palabra de DIOS dice que nosotros antes estábamos en el dominio de la obscuridad, pero hemos sido transferidos al REINO de nuestro SEÑOR JESUCRISTO.

(Colosenses 1:13) «Él nos libró del dominio de la oscuridad y nos trasladó al reino de su amado Hijo, 14 en quien tenemos redención, el perdón de pecados.» 

Así que el REINO de JESUCRISTO aquí en la tierra es sinónimo de Su Iglesia. O sea, ser parte de la Iglesia de JESUCRISTO es estar en Su Reino.

El Reino de DIOS no es de este mundo. (Juan 18:36) «Mi reino no es de este mundo —contestó Jesús. Si lo fuera, mis propios guardias pelearían para impedir que los judíos me arrestaran. Pero mi reino no es de este mundo.»

El evangelio social que ha sido promulgado pretende cambiar a la gente por medio de cambios sociales.

Pero debemos recordar que las buenas obras por sí solas no salvan a nadie.

Tampoco el buen comportamiento por sí sólo.

Solamente JESUCRISTO puede cambiar al pecador.

Lo mismo podemos decir del evangelio que pretende que el gobierno pueda hacer aquí en la tierra un tipo de Reino Cristiano.

Los gobiernos son dirigidos por seres humanos y sujetos a cambios.

Los gobiernos humanos son dirigidos por políticos más interesados en ellos mismos que en cumplir los requisitos del REINO DE DIOS.

La proclamación de la Iglesia Primitiva que el Reino de Dios había llegado en JESUCRISTO era una confrontación directa con la adoración al emperador Romano, ya que al declarar que JESÚS CRISTO ES SEÑOR era declarar que César no lo era. Así que predicar el Reino era sublevarse.vi

Esa fue una de las razones porque los Cristianos fueron perseguidos, torturados y ejecutados.

Los Cristianos eran considerados como traidores porque no consideraban al César un dios.

Eso también ocurrió bajo la Alemania Nazi la cual llegó a controlar a las iglesias, y las que enseñaban que JESUCRISTO ES SEÑOR, eran consideradas como enemigas del estado.vii

Lo mismo ha ocurrido bajo los gobiernos comunistas.

Para concluir este punto, el Reino de DIOS también es futuro, ya que esperamos el glorioso Reinado de nuestro Salvador en el Reino Milenial.

HÁGASE TU VOLUNTAD. (Mateo 6:10) «Venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.»

Después de haber pedido porque VENGA TU REINO, ahora viene la petición que se HAGA LA VOLUNTAD de DIOS en la tierra como en el Cielo.

Esta es una petición que debemos analizar bien ya que trata con entregarle a DIOS nuestra voluntad sobre todas las cosas.

Eso es porque pedirle a DIOS que se HAGA Su Voluntad en la tierra como en el Cielo, es admitir que necesitamos hacer lo que DIOS quiere que hagamos.

 

Fuente:
Pastor Daniel Brito

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