El skateboarding se está volviendo popular en China y ese crecimiento hizo que un británico se mudara a esta nación asiática para compartir con los millennials su pasión por la patineta y también para ayudarles a transformar sus vidas a través de Jesús.
¡Skateboarding es la última tendencia en China!
En muchas ciudades chinas, los millennials se unen los fines de semana para practicar su “baile en patineta”. Eso capturó la atención de un experto internacional.
James Tyson nació y creció en el Reino Unido. Desde joven tuvo una pasión por la patineta, la cual le dio identidad y propósito en su vida.
“Cuando era joven, no quería hacer nada más que patinar. Deseaba mejorar. Incluso no me podía concentrar en mis estudios en la escuela. Mi mente estaba llena de patinetas. Sentía libertad y apertura de expresión”, precisa James.
Nacido en una familia cristiana, James vio que la patineta le traía más satisfacción que la religión.
“Las tentaciones me rodeaban. Traté de dejarlo por un tiempo, pero al día siguiente no resistía la presión de grupo. Yo era parte del grupo y éramos geniales”, comenta James.
Aunque James experimentó algunos retos, creía que podía usar su patineta para huir de sus problemas. Sin embargo, no se dio cuenta de que necesitaba más en su vida que simplemente andar en patineta.
“Me lastimé en un accidente y el dolor de espalda era insoportable. Me sentí solo y desesperado. Pensé que mi vida era un chiste”, dice James.
En medio de su miseria, una amiga lo visitó y le dijo cómo Dios la había llamado a otro país para la labor misionera. James estuvo tan impactado que decidió dejar atrás sus malos hábitos, empacó sus cosas y decidió hacer lo mismo.
James se mudó a Nanning, donde ha vivido más de 13 años. Él y su familia iniciaron un ministerio de patinetas y junto con otros cristianos, les enseña a jóvenes chinos cómo ganar concursos deportivos. Más importante aún, atraen la juventud a Cristo.
“Amo la juventud china. Son muy talentosos. Quise entrenarlos a ser mejores y no quiero que repitan mis faltas. Solo Dios podía proveer la verdadera libertad”, precisa James.
El mejor amigo de James, Super Chou, conoció a Cristo a través del ministerio. Ahora, diseña patinetas con imágenes bíblicas.
“Al ver el comportamiento de James, sabía que Dios también me podía cambiar. Acepté a Jesús para protegerme del mal. Necesitamos vivir en pureza y verdadera libertad”, indica Super Chou.
Más personas se han unido a James y su equipo. Muchos de ellos son millennials chinos. Chou y James son líderes de su estudio bíblico. Con el pasar del tiempo han bautizado varios jóvenes chinos.
“La patineta será lo más popular entre la juventud mundial. Me gustaría invitar más personas a unirse, mi equipo y yo podríamos refinar sus habilidades. Más importante aún, ¡necesitan saber que seguir a Dios es lo más genial que se puede hacer en la vida!”, concluye James.