Jesús dijo: “Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y los santos ángeles con él, entonces se sentara en su trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartara los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos”, Mateo 25:31-32.
¿Qué diferencia hay entre ovejas y Cabritos? Los cabritos comen basura. Una de las marcas de un cabrito es que come casi cualquier cosa y además de comer basura, piensan que es deliciosa.
Hay cristianos que no se alimentan bien. En lugar de ir a una buena iglesia donde hay comida espiritual, saludable, estos se alimentan con cualquier cosa. Mientras que la Biblia claramente habla de que debemos “desear como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación”, 1 Pedro 2:2.
Los cabritos se alimentan con cosas “populares”, y no lo que les nutre realmente. Les gusta los mensajes sensacionales, emotivos, sociales, psicológicos y los que estén acorde con su conveniencia. A estos cabritos les gusta comer maleza de seudos pastores y profetas con supuestas revelaciones del Espíritu, con los movimientos modernos, como por ejemplo movimientos de poder y milagros, movimientos proféticos y apostólicos, evangelio de la prosperidad, del reino ahora, entre otros.
Mientras que los ovejas, son ‘pastoreadoras”, es decir, prefieren comer pastos frescos, hierbas cortas y tréboles. Además les gusta beber agua limpia y cristalina. En lo espiritual tenemos que probar las cosas que nos comemos, es decir, todas aquellas enseñanzas falsas que existen y tenemos que discernirlas varias veces antes de aceptarla.
Tenemos que tener habilitado el discernimiento de Espíritu y probar los espíritus si son de Dios o no. Una oveja puede saber si la palabra que le están suministrando es buen pasto o no, o si es rudimento o alimento sólido.
La oveja tiene un instinto “gregario”, (mentalidad de grupo). Una oveja separada de su rebano estará muy agitada y nerviosa, padeciendo a consecuencia de esto, por lo que puede llegar morir, por lo que necesita a un pastor.
Al respecto, Jesús “pondrá las ovejas a su derecha, los cabritos a su izquierda. Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde el fin del mundo.
“Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber, fui forastero y me recogisteis; estuve desnudo y me cubristeis; enfermo y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mi”.
“Entonces los justos le responderán, diciendo: Señor; ¿Cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuando te vimos forasteros, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos. ¿O cuando te vimos enfermo, o en la cárcel y vinimos a ti?
“Y respondiendo el Rey les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hiciste a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mi lo hicisteis. Entonces dirá a los de la izquierda (los cabritos), “apartaos de mi, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.
Lo cabritos no hicieron lo mismo que las ovejas, y los sentencio diciendo: “E irán estos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna”. Mateo 25:33-41,46.
Amigo, luego de leer estas palabras de Jesús, ¿que eres tú en esta vida OVEJA O CABRITO? Si eres cabrito, Jesús, el Hijo del Dios viviente, te da la oportunidad para que te arrepientas de tus pecados, ponga tu fe y confianza en El, y comiences a vivir una vida de victoria aquí y en la eternidad.
Y los que son ovejas que vivan una vida de santidad y de amor al prójimo, ayudando a los desvalidos de sus congregaciones y a otros creyentes, que necesiten ser pastoreados, con la palabra para que disfruten del alimento físico y espiritual y tengan asegurado su lugar con Cristo, en el reino de los cielos.
Dios los bendiga mucho.