El día en que temo, yo en ti confío. En Dios, cuya palabra alabo, en Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre? Salmos 56:3-4
Estamos entrando en una nueva temporada, y debemos ser fuertes y valientes, nuestra tendencia es temer a lo desconocido, pero lo que es desconocido para nosotros para Dios no lo es. El Salmo 139:16 dice: Tus ojos vieron mi embrión, y en tu libro se escribieron todos los días que me fueron dados, cuando no existía ni uno solo de ellos. Abrir tu corazón a esta palabra puede traer una transformación radical a tu corazón donde el temor al futuro, la inquietud y la duda solían ocultarse. Las cosas se están acelerando de manera significativa y el enemigo está tratando de intimidarnos para que retrocedamos. Hoy es un día para sacudirnos todas sus mentiras, porque él no impedirá que entremos en lo que ya es nuestro y lo que Dios ya ha establecido para nosotros. Estamos ante una temporada de avance y estamos a punto de ver lo que Dios nos ha prometido. Preparémonos porque estamos a punto de ver de manera tangible la VICTORIA.
El Señor dice:
¿No puedes sentir los vientos de cambio que están soplando? Es tiempo de avanzar hacia la nueva tierra que he puesto ante ti. Yo he ordenado las obras por las que caminarás, antes de ponerte en ellas en el tiempo. Ahora entra al Jordán y mira cómo se separan las aguas. ¡Sigue mirándome y avanza! Yo voy a hacer un camino; Mi camino está establecido ante ti. Yo Soy tu proveedor, múdate a Mis planes y Mi provisión vendrá, en cada lugar que pise la planta de tu pie. Deja que mi paz gobierne tu corazón. Yo estoy contigo. Yo voy delante de ti para enderezar cada lugar torcido.
Salmos 66:5-6 Venid y ved las obras de Dios, admirable en sus hechos a favor de los hijos de los hombres. Convirtió el mar en tierra seca; cruzaron el río a pie; regocijémonos allí en Él.
Mantén tus ojos, tu enfoque total, en Mí. Yo Soy el autor y consumador de tu fe. Yo Soy el autor de todos tus días. Yo Soy tu fuente, Solo en Mí y Conmigo obtendrás el resultado que deseas. Yo veo el final desde el principio y llamo a las cosas que no son como si fueran. Descansa en Mi bondad y permite que Mi paz sea tu manto. Permanece en mí. Te has alineado con los deseos que he Yo he puesto en tu corazón y has dispuesto tu corazón y tu mente para seguirme, mientras emprendes este nuevo camino. Confía en Mí y recibe la tierra que viene a ti de Mi mano. Prosperarás donde Yo te envíe; ¡AVANZA! (Alane Haynes)
Salmos 62:5-8 Alma mía, espera en silencio solamente en Dios, pues de Él viene mi esperanza. Solo Él es mi roca y mi salvación, mi refugio, nunca seré sacudido. En Dios descansan mi salvación y mi gloria; la roca de mi fortaleza, mi refugio, está en Dios. Confiad en Él en todo tiempo, oh pueblo; derramad vuestro corazón delante de Él; Dios es nuestro refugio.
Con amor y oraciones,
