No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. Isaías 41:10
Oí al Espíritu declarar: “Mayo es el mes del «Sí, pueden». Los estoy sacando de una temporada de consternación, para llevarlos al “Sí, pueden”.
Este es un mes en el que se les ha concedido permiso y se ha liberado el acceso a áreas en las que antes era difícil entrar. Donde las personas se han sentido bloqueadas u obstaculizadas, excluidas o resistidas. Siento que el Espíritu dice que estas áreas y territorios se están abriendo a Su pueblo. No se rindan, den un paso adelante y despojen al enemigo, porque el Señor va delante de ustedes para preparar este tiempo. Hay puertas de oportunidades que se están abriendo en esta temporada. Alinéense con Él para ver qué puertas ha abierto para ustedes. Si El no está en nuestra agenda, debemos alinearnos con Él, con su línea de tiempo, con Su corazón para nuestra vida y nuestro mundo. Esto nos permitirá reconocer las «puertas de Dios» en nuestro viaje que Él ha preparado para nosotros.
Aquellos que han resistido los ataques del enemigo, los que han elegido alejarse del miedo y mirar en su lugar a Jesús, están siendo liberados. No están desanimados porque saben que su Dios los sostiene con su justa mano derecha. Están saliendo del desierto con el poder de Su Espíritu (Lucas 4:14). Como han resistido, así como Jesús, por la Palabra del Señor, serán liberados de los planes del enemigo, recibiendo un tiempo de ministerio por parte de los ángeles del cielo, así como Jesús en Mateo 4:11. Ellos encontrarán descanso y paz a medida que la atmósfera que los rodea cambia en esta temporada.
Observen a los que salen de una temporada de confinamiento; ellos llevarán la presencia y el corazón del Padre. Han sido purificados y preparados, y ahora es el momento de que su comisión se haga evidente. Han sido vaciados para permitirles llevar más del Padre de lo que jamás podrían imaginar. Hablarán una palabra, y será establecida (Job 28:22). Han aprendido a respirar el aire puro de la Sala del Trono, y están listos para liberarlo al mundo que los rodea. Mientras el Padre dice: «Sí, pueden», hay una invitación más profunda a decirle lo mismo a Él. Esta es una temporada de reciprocidad, en la que el Padre está buscando un acceso más profundo a los corazones. Él está preguntando: «¿Me darán también permiso para más de ustedes? ¿Serán como el leproso que volvió a los pies de Jesús cuando fue sanado? Yo tengo más para darles, para liberarlos para que te levanten y vayan»
Lucas 17:15-17 Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz, y se postró rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y éste era samaritano. Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?
EL PERMISO PRECEDE A LA PROVISION
En las últimas semanas, me he encontrado continuamente con fotos de camellos. Con cada imagen venía la sensación de que la provisión está en camino. Mayo es el mes en que celebramos Pentecostés, el tiempo en que Dios da a sus hijos una nueva revelación: la Ley y el Espíritu Santo (Éxodo 19 – Hechos 2). Es un tiempo marcado para la provisión y la abundancia de Dios. La palabra camello viene de la palabra hebrea “gamal” que significa «devolver». En la Biblia, los camellos representaban la riqueza (Génesis 30:43) y aportaban recursos a quienes los recibían. Hay un sentido de que esta es una temporada en la que la restitución llegará. Si ustedes están esperando provisión, comiencen a declarar lo que necesitan.
La provisión está llegando a aquellos que han estado esperando, restitución en abundancia y alegría. Esta será una temporada de cosecha donde Dios construirá en sus siervos la resistencia. Equipándolos con los recursos espirituales y físicos para el viaje hacia la nueva temporada que les espera. Esta es una temporada de Efesios 3:20 “Y ahora, que toda la gloria sea para Dios, quien puede lograr mucho más de lo que pudiéramos pedir o incluso imaginar mediante su gran poder, que actúa en nosotros”. Estén expectantes, en mayo, esperen que Dios tenga su sí. (Charissa Steffens)
Con amor y oraciones,