¿Qué pensarías si te deseáramos hoy un feliz año nuevo y te dijéramos que vamos a tener un nuevo comienzo? Pensarías que hemos perdido la razón, que estamos a mitad de año. Y precisamente lo que queremos es captar tu atención porque tu año sí puede comenzar hoy.
Todos, a principio de un año, hacemos resoluciones, escribimos lo que queremos lograr y alcanzar; pero van pasando los días, las semanas, los meses, y muchos olvidan las metas que tenían, u obvian lo que habían planificado cuando las cosas se complican. Lo que queremos es inspirarte porque estamos a mitad de año, así que quedan seis meses; si enfocas y reevalúas tu vida, puede que al final de este año puedas avanzar, darte cuenta que creciste, prosperaste, y que tus metas se cumplieron. Lo que tienes es que tomar responsabilidad sobre tu futuro y decir: hoy será mi comienzo de año. Toma decisiones como si fuese 1ro de enero, y termina este año de una manera poderosa, termínalo como te lo propusiste, y a pesar de todas las dificultades podrás darle gloria a Dios de que Él te dio la victoria. Haz resoluciones de mitad de año para que termines este año lleno de bendiciones.
“12 No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. 13 Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, 14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.” Filipenses 3:12-14
El contexto espiritual de este verso es sumamente poderoso; tiene que ver con la salvación, con nuestro llamado. El apóstol Pablo está diciendo: estoy sumamente enfocado a lo que Dios me llamó, no solo me llamó sino tomó posesión de mí, y yo estoy tratando de perseguir aquello que me capturó a mí. Pero de estos versos también podemos extraer ciertos principios para el día a día, para lo práctico. Por ejemplo, el no rendirnos, el saber que no lo hemos alcanzado, que tenemos algo más por alcanzar, y saber qué es lo que tenemos que hacer para alcanzarlo. Pablo decía: olvido lo que queda atrás y me extiendo hacia delante, hacia la meta del supremo llamamiento.
Parecerá loco eso de desearte feliz año nuevo porque estamos a mitad de año, pero la idea es llamar tu atención. La pregunta para ti es si todavía estás trabajando en las metas que te propusiste a principio de año. Cuando se van acercando esos últimos meses, comenzamos algunos a sentir la presión porque queremos cambios en nuestra vida; entonces, tenemos momentos de reflexión y comenzamos a anotar nuestras metas y sueños, pero hay quienes son de corta duración, no persiguen las cosas que se propusieron. Y es triste tomar un momento de reflexión a fin de año o a principio, y no hacerlo a mitad de año para saber cuál es tu estatus, tu progreso, tu avance en eso que querías alcanzar.
Aún en las escuelas, colegios, universidades, te dan notas parciales; en los trabajos, te evalúan cada cierto tiempo. En las iglesias, tenemos que reevaluar nuestras vidas y estrategias cada temporada. Si esperas hasta el final del año para saber dónde estás, no puedes hacer los ajustes necesarios. Y hoy queremos confrontarte porque estamos a mitad de año, quedan seis meses, y en seis meses muchas cosas pueden pasar. Y tú tienes que perseguir aquellas metas que te propusiste a principios de este año. Es un buen momento para detenerte a analizar, a pensar qué te falta lograr y qué cosas tienes que hacer para moverte hacia ese futuro.
4 áreas claves a evaluar para tomar nuevas decisiones a mitad de año y completar tus resoluciones, ideas, metas que te propusiste a principios de año
- Revalúa tus metas y vuelve a comprometerte.
En Filipenses 3, vimos que Pablo dice: yo prosigo a la meta del supremo llamamiento. Él está claro para dónde va. Tú hiciste metas a principio de año, y hay varias cosas que pueden haber pasado con esas metas. Puede que hoy cuando las reevalúes te des cuenta que ya las alcanzaste, las cumpliste, las completaste, las lograste. Quizás hay otras metas que ya no son necesarias; el mundo cambió, te dieron un impulso, te motivaron para algo, pero hoy esas metas son irrelevantes. También puede ser que algunas otras todavía tengas que trabajar en ellas y sean dignas de perseguir o buscar. Por lo tanto, hace falta hacer una reevaluación de tus metas. De la misma manera, pudieras proponerte nuevas metas para los próximos meses. Luego de ese análisis, tendrás un nuevo grupo de metas de mitad de año, y por lo tanto, tienes que comprometerte por los próximos seis meses para trabajar en pos de ellas. Toma las decisiones que tengas que tomar, sin importar lo que conlleve. Proponte por los próximos 180 días aproximados que nos quedan en este año que vas a avanzar al cumplimiento de todas estas metas.
- Quita todos los excesos.
Excesos de carga, excesos emocionales, financieros. Haz un análisis de qué cosas estás haciendo y qué cosas tienes que son hoy un exceso en tu vida. Todos los tenemos en diferentes dimensiones. Hay gente que sus ingresos son menores que los de otros, pero eso no quiere decir que automáticamente no tengas excesos. Los excesos son cargas pesadas y que tenemos que aprender a eliminar, sin importar el nivel en que nos encontremos, se vuelven una carga pesada. Llevarte comida preparada a tu trabajo, por ejemplo, te evita un posible exceso en el gasto de alimentos. Luego de un año, pudieras incluso haber ahorrado suficiente como para el pago de una mensualidad de un auto, por ejemplo. Todos tenemos ciertos excesos que a veces ni cuenta nos damos que van sumándose; excesos emocionales, espirituales, cosas que tenemos que eliminar. Hoy es un buen día para decir: hasta aquí.
- Revalúa en qué área te hace falta crecer.
Tal vez sea en el área profesional, o en el área de las Redes Sociales, o en el área familiar. Identifica en qué área necesitas crecer, y comienza a estudiar, a prepararte. La mejor inversión que puedes hacer para que este año termine lleno de bendición y de victoria, es una inversión en ti mismo. Comienza a aprender y a desarrollarte en esas áreas.
- Revalúa tus amistades.
Reevalúa en quién estás invirtiendo tu tiempo. Siéntate y comienza a mirar con quién deberías invertir más tiempo, quién te va a ayudar a avanzar. Reevalúa tu vida y piensa quién te está consumiendo tu tiempo, desviándote de todo lo que quieres lograr. Esto es importante. Durante el año, vamos conociendo personas y nos vamos uniendo, pero no siempre son las más correctas para nosotros poder avanzar. Puede que en los pasados seis meses hayas entrado en relaciones que lo que están es poniéndote presión, carga, y no te están ayudando en tu progreso. Quizás quieres ahorrar pero te presionan para ir a restaurantes caros. Revalúa tus amistades.