Si la palabra de Dios nos da una definición exacta de lo que es la fe es porque verdaderamente muchas personas están confundidas y tienen ideas equivocadas sobre la fe. HEBREOS 11-1-
Es muy importante comprender lo que la fe verdaderamente es pues la palabra de Dios nos dice que sin fe es imposible agradar a Dios, por lo tanto nuestra fe tiene que ser verdadera, sin fingimiento.
Es por eso que ahora vamos a reflexionar sobre aquellas cosas con la que muchos de nosotros estamos confundiendo la fe.
I) NO CONFUNDAMOS LA FE CON LOS SENTIMIENTOS (VS 1)
- La fe no es un sentimiento, no se trata de sentir que tenemos fe, de sentir que confiamos en Dios, pues los sentimientos son cambiantes y dependen mucho de las circunstancias que vivimos.
- La fe no se trata de un sentimiento de positivismo, un sentimiento de que todo va a salir bien, pues muchas veces esos sentimientos de positivismo estan basados en cosas ilusorias.
- La palabra de Dios nos declara que la fe es primeramente una CERTEZA (Conocimiento seguro y claro que se tiene de algo) es decir que la fe viene de conocer a Dios y su palabra, de conocer su poder y sus promesas.
- También la palabra de Dios nos dice que la fe es una CONVICCIÓN (es el convencimiento que se tiene sobre algo) es decir que la fe viene cuando estamos convencidos de que nuestro Dios no miente y que lo que ha prometido lo cumplira.
II) NO CONFUNDAMOS LA FE CON UN ESCONDITE (EFESIOS 6:16)
- Muchos cristianos dicen estar orando y confiando pero no quieren enfrentarse al problema, no quieren dar pasos de fe, no quieren entrar en la batalla, son cristianos que doblan rodillas, que claman pero no van a la batalla, no quieren enfrentar las situaciones cara a cara, no se atreven a pararse frente a su problema y enfrentarlo.
- Tenemos que saber que la palabra de Dios nos dice que la fe no es un escondite sino un escudo, un escudo sirve para que los soldados que entran en la batalla se puedan defender ante los ataques del enemigo.
- Eso significa que si tenemos que doblar nuestra rodillas, que si tenemos que clamar, que si tenemos que pelear la batalla espiritual, pero también tenemos que ir y enfrentar los problemas, tenemos que ir y hacer lo que nos corresponde hacer a nosotros, con el escudo de la fe listo para defendernos de los dardos del maligno, esos dardos que pueden ser: el desánimo, la crítica, las amenazas, etc.
III) NO CONFUNDAMOS LA FE CON LA IMPRUDENCIA (PROVERBIOS 22:3)
- Una imprudencia es un acto irreflexivo o torpe que implica un cierto riesgo para el que lo comete o para los demás, también una persona imprudente es irresponsable, insensato, negligente o descuidado.
- Dios quiere que nosotros sus hijos seamos personas de fe, pero no personas imprudentes, que no pensamos en las consecuencias de nuestras acciones, pues muchos cristianos dicen que harán algo “Por fe” pero en realidad muchas veces esa fe es imprudencia.
- Podemos ver cristianos que toman deudas que no están dentro de la voluntad de Dios y que no tienen la capacidad de pagar pero se excusan diciendo que las pagaran “Por fe”
- Otros se aventuran a un viaje migratorio ilegal y dicen que van a llegar bien “por fe”
- La palabra de Dios nos muestra que nosotros debemos ser sabios y si vemos el mal tenemos que apartarnos, no tenemos que poner a prueba a nuestro Dios, tal como lo hizo nuestro Señor Jesucristo (Mateo 4:5-7)
- La fe no es imprudente, el cristiano de fe pide la dirección del Espíritu Santo, busca conocer la voluntad de Dios y la hace, no toma decisiones arrebatadas e insensatas bajo la excusa de hacerlo “por fe”.
