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No cometamos los mismos errores

Lo maravilloso de la palabra de Dios es que nos permite conocer tanto las virtudes de los hombres de Dios así como también sus errores y debilidades para nuestra enseñanza.ROMANOS 15-4-

La Biblia no nos muestra a los hombres y mujeres que Dios usó para sus propósitos como personas perfectas, que no tenían debilidades, que no cometieron errores, sino que al contrario, nos permite conocer en qué fallaron para que nosotros podamos tomar lecciones para nuestra propia vida.

Estamos por celebrar el Día del Padre y vamos a reflexionar sobre las lecciones que podemos tomar de los errores que algunos de los hombres de la Biblia cometieron en su labor de padres para con sus hijos.

Veamos cuales son esos errores para que nosotros como padres cristianos no cometamos los mismos errores con nuestros hijos:

I) PRIMER ERROR DE PADRES: NOÉ, LOS VICIOS Y LA INMORALIDAD SIEMPRE AFECTAN LA VIDA DE NUESTROS HIJOS (GÉNESIS 9:18-25)

Noé después que salió del arca plantó una viña y se embriago, y estando borracho se comportó inmoralmente y perdio todo pudor a tal grado que se quedó dormido desnudo en medio de su tienda.

Cuando Cam su hijo llegó a su tienda vio a su padre borracho y desnudo, y se lo dijo a sus hermanos los cuales para no ver también a su padre desnudo caminando de espaldas cubrieron a Noé con su ropa.

Cuando Noé despertó de su embriaguez supo que su hijo Cam lo había visto y maldijo a Canaán, el hijo de Cam por lo que había hecho su padre, pero ¿Quién fue verdaderamente el principal culpable o responsable de lo que ocurrió en esa familia?

APLIQUEMOS ESTA HISTORIA A NUESTRA FAMILIA:

¿Cuántas veces nuestros hijos e hijas han tenido que soportar ver a su padre “cristiano” llegar borracho a casa?

¿Cuántas veces nuestros hijos se han dado cuenta de nuestro estilo de vida lleno de inmoralidad? Es triste para nuestros hijos darse cuenta que su padre tiene una amante, que su padre tiene relaciones sexuales con diferentes mujeres aparte de su esposa.

Lastimosamente muchos padres a causa de sus vicios y de su inmoralidad han tenido que experimentar el rechazo de sus hijos, que al igual que Noé sus hijos le den la espalda, que el corazón de sus hijos se ha vuelto en contra de ellos.

Es triste que como padres nos pase lo mismo que a Noé, que por nuestro estilo de vida en lugar de bendición de nuestros hijos seamos maldición para ellos, por nuestro mal ejemplo, por el resentimiento que les causamos en su corazón, por la amargura que les hemos causado.

II) SEGUNDO ERROR DE PADRES: ISAAC, TENER PREFERENCIA POR UNO DE NUESTROS HIJOS SIEMPRE CAUSARÁ CONFLICTOS Y DOLOR (GÉNESIS 25:24-28)

El Señor bendijo a Isaac con dos hijos, eran gemelos, aunque podríamos decir que verdaderamente eran mellizos pues eran diferentes el uno del otro tanto en su físico como en su manera de ser.

Esaú era vigoroso, era cazador, era hombre de campo y su padre lo amaba por eso porque comía de lo que él cazaba, es decir que para Isaac Esaú era su hijo preferido, su consentido, pero Jacob era tranquilo, no salía a cazar sino que le gustaba estar en casa y era el preferido de su madre.

Pero el tener preferencias con sus hijos llevó a esta familia a tener conflictos y dolor(Génesis 27:30-36 y 41)

APLIQUEMOS ESTA HISTORIA A NUESTRA FAMILIA:

Es triste y doloroso para un hijo sentir que no es valorado ni amado de la misma manera por su padre y que hay preferencias en el trato, en la disciplina, en las muestras de cariño, etc.

Nosotros como padres tenemos que saber que todos nuestros hijos son diferentes, que tienen fortalezas y también debilidades pero que todos son una herencia y una bendición de Dios para nuestra vida (Salmo 127:3)

Pueden ser niños o niñas, puede ser que sean buenos deportistas o que no les gusten los deportes, que sean brillantes para sus estudios o que no sean estudiantes brillantes, puede ser que tengan un excelente desarrollo físico y mental o que puedan tener alguna enfermedad o discapacidad que les afecte su desarrollo, para nosotros como padres tienen que ser nuestros hijos amados, nuestra herencia, nuestra bendición, NO NECESITAN CUMPLIR UN ESTÁNDAR PARA SER ACEPTADOS Y AMADOS, son amados y aceptados porque son nuestros hijos e hijas.

III) TERCER ERROR DE PADRES: ELI, NO USAR LA AUTORIDAD QUE DIOS NOS HA DADO AFECTARÁ TARDE O TEMPRANO LA VIDA DE NUESTROS HIJOS (1 SAMUEL 3:12-13)

Eli era un sacerdote, era un servidor del Señor, pero sus hijos eran impíos, no tenían conocimiento de Dios y hacían lo malo ante los ojos del Señor aun dentro de su templo(1 Samuel 2:12 y 22)

El error de Eli fue grave, siendo un sacerdote no les había enseñado a sus hijos él camino de Dios y como padre no usaba su autoridad para frenar el mal comportamiento de sus hijos, no les estorbaba para sus pecados, sino que los dejaba que libremente vivieran una vida desagradable para Dios.

La falta de conocimiento de Dios y la falta de disciplina llevaron a los hijos de Elí a la muerte como consecuencia de sus pecados (1 Samuel 2:25)

APLIQUEMOS ESTA HISTORIA A NUESTRA FAMILIA:

Muchos padres cristianos cometemos el grave error de no preocuparnos por la vida espiritual de nuestros hijos, comenzando por asegurarnos de su salvación, lastimosamente nos preocupamos más por sus estudios, por que aprendan otro idioma, porque tengan un título universitario, etc y todo esto es importante, pero NADA ES MÁS IMPORTANTES QUE LA SALVACIÓN (Marcos 8:36)

Muchos padres cristianos cometemos el mismo error que Eli, no usamos la disciplina que Dios nos ha dado como padres, sino que permitimos que nuestros hijos vivan estilos de vida desagradables a Dios en vicios, en fornicación, y la palabra de Dios nos manda a disciplinar y castigar a nuestros hijos antes de que ya no haya esperanza terrenal para ellos (Proverbios 19:18)

Muchas veces como padres queremos que sean otros lo que corrijan a nuestros hijos, y les echamos la culpa a los maestros, a las instituciones educativas, a las autoridades, al gobierno, etc, pero tenemos que comprender que la primer autoridad instituida por Dios esta en la familia y somos nosotros los padres (Ester 1:22)

CONCLUSIÓN: No es fácil ser un buen padre, pero con la ayuda de Dios podemos ser mejores padres para nuestros hijos, y recordemos que: Nuestros hijos más que nuestros consejos ellos seguirán nuestros ejemplos.

Fuente:
Pastor Oscar Flores | El Salvador

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