JOB 22:2-3 Que pregunta más impactante para reflexionar: ¿traerá el hombre provecho a Dios? Y la respuesta nos revela una verdad maravillosa: al contrario, para si mismo es provechoso el hombre sabio.
Es decir que los verdaderamente beneficiados de seguir a Cristo somos nosotros los seres humanos, los que verdaderamente sacamos provecho de ser hijos de Dios somos nosotros.
Vamos a reflexionar sobre las diferentes áreas en las cuales nosotros los cristianos somos los verdaderamente beneficiados por vivir nuestra vida en Cristo.
EN LO ESPIRITUAL: RECIBIMOS SALVACION Y VIDA ETERNA (JUAN 5:24)
Recibimos salvación, es decir ya no estamos más en condenación, sino que hemos pasado de muerte a vida, nuestro nombre está inscrito en el libro de la vida, nuestro nombre ya no está en la lista de los condenados sino en el libro de los salvos.
Recibimos vida eterna: Dios no solamente nos ha librado de la condenación en el infierno, sino que también nos a dado vida eterna para que estamos con él para siempre en el cielo.
EN LO MORAL: SOMOS LIBRES DE LA CULPABILIDAD POR MEDIO DEL PERDON DE NUESTROS PECADOS (LEVITICO 7:1-2 Y 5)
Lo moral tiene que ver directamente con nuestro conocimiento del bien y del mal, la culpa viene por todos aquellos pecados que no son involuntarios, todas esas ofensas a Dios y a nuestro prójimo que hemos cometido sabiendo que lo que hicimos estaba mal, sabiendo que estábamos ofendiendo a Dios.
Es por eso por lo que en nuestro interior tenemos esa culpabilidad, pues muy bien sabemos que hemos ofendido a Dios con nuestras acciones, y en la ley que Dios le dio a Israel vemos que había un sacrificio especial para la culpa, para que la sangre del cordero quitara la culpa del ofensor.
Nuestros pecados y nuestra culpa son quitados cuando los confesamos y la sangre de Cristo los limpia (1 Juan 1:9) esta es la respuesta para todos aquellos que se preguntan, si Dios conoce mis pecados ¿Por qué los tengo que confesar? Para que reconozcamos nuestra culpabilidad, para que reconozcamos que hemos ofendido a Dios voluntariamente y podamos experimentar el gozo de su perdón y su misericordia en nuestra vida.
EN LO MATERIAL Y ECONOMICO: VIVIR PARA CRISTO TIENE GRANDES BENEFICIOS PARA NUESTRA VIDA (3 JUAN 1:2)
Tenemos que reconocer que la vida pecaminosa de vicios y placeres tiene un alto costo que lleva a la escasez y a la pobreza (Lucas 15:12-14)
Cuando dejamos ese estilo de vida y comenzamos a vivir para Cristo veremos que nuestras finanzas son más saludables pues ya no seremos necios para gastar el dinero en vicios y placeres pecaminosos.
Si somos sabios y buenos mayordomos de nuestras finanzas e invertimos en el Reino de Dios veremos como la bendición y la prosperidad de Dios se hacen realidad en nuestra vida (Proverbios 3:9-10 /Malaquías 3:10-11)
Tenemos un Padre Celestial que ha prometido que suplirá todas nuestras necesidades por medio de sus riquezas (Filipenses 4:19)
EN LA FAMILIA: VIVIR PARA CRISTO TRANSFORMA Y RESTAURA NUESTRA FAMILIA
Tenemos que reconocer que una familia sin Cristo muchas veces es una familia que está dividida, en pleitos, dañada, (Miqueas 7:6)
Pero cuando el mensaje y la salvación de Cristo llegan a esa familia, esa familia puede ser restaurada y transformada (Malaquías 4:6)
Cuando Cristo venga a tu familia podras experimentar la alegría de vivir no solamente juntos sino también en armonía y en paz (Salmo 133.1)
Ahora que conoces los grandes beneficios de vivir para Cristo ¿Por qué no lo recibes como Señor y Salvador de tu vida?