LUCAS 14:15-24 Oyendo esto uno de los que estaban sentados con él a la mesa, le dijo: Bienaventurado el que coma pan en el reino de Dios. 16 Entonces Jesús le dijo: Un hombre hizo una gran cena, y convidó a muchos. 17 Y a la hora de la cena envió a su siervo a decir a los convidados: Venid, que ya todo está preparado. 18 Y todos a una comenzaron a excusarse. El primero dijo: He comprado una hacienda, y necesito ir a verla; te ruego que me excuses. 19 Otro dijo: He comprado cinco yuntas de bueyes, y voy a probarlos; te ruego que me excuses. 20 Y otro dijo: Acabo de casarme, y por tanto no puedo ir. 21 Vuelto el siervo, hizo saber estas cosas a su señor. Entonces enojado el padre de familia, dijo a su siervo: Ve pronto por las plazas y las calles de la ciudad, y trae acá a los pobres, los mancos, los cojos y los ciegos. 22 Y dijo el siervo: Señor, se ha hecho como mandaste, y aún hay lugar. 23 Dijo el señor al siervo: Ve por los caminos y por los vallados, y fuérzalos a entrar, para que se llene mi casa. 24 Porque os digo que ninguno de aquellos hombres que fueron convidados, gustará mi cena.
Este día llegamos al final de esta serie de sermones en la cual hemos conocido algunos enemigos de nuestra vida cristiana que no nos permiten crecer espiritualmente ni tampoco vivir una vida agradable para nuestro Dios.
Hoy vamos a reflexionar por medio de la palabra de nuestro Dios sobre uno de los enemigos que más afecta nuestra relación con Dios: LAS EXCUSAS.
Lastimosamente muchos cirsitianos viven enfermos de una enfermedad que los lleva directo al enfriamiento espiritual, esa enfermedad es la EXCUSITIS, es decir, hacer de las excusas algo normal y aceptado en nuestra vida, cuando en realidad es algo que nos afecta, que nos lleva al alejamiento de Dios y al enfriamiento espiritual.
Pero definamos primeramente ¿QUE ES UNA EXCUSA? Son LAS MENTIRAS con que queremos convencernos a nosotros mismos para no hacer algo, o para evadir responsabilidades ante la vida.
EN EL TEXTO QUE HEMOS LEÍDO PARA COMENZAR PODEMOS ENCONTRAR TRES VERDADES ESPIRITUALES MUY IMPORTANTES:
- PRIMERA VERDAD: Como podemos ver por medio de la esta parábola de la gran cena nos damos cuenta que ese hombre mandó a llamar a sus invitados para que comieran y se deleitaran con los manjares que él tenía preparados para ellos. de la misma manera DIOS NOS LLAMA Y QUIERE QUE NOS ACERQUEMOS A ÉL PARA BENDECIRNOS. (Vs 16-17) Entonces Jesús le dijo: Un hombre hizo una gran cena, y convidó a muchos. 17 Y a la hora de la cena envió a su siervo a decir a los convidados: Venid, que ya todo está preparado.
- SEGUNDA VERDAD: Cuando todos los invitados se excusaron para no ir a la cena, podemos ver que el Padre de Familia que había organizado esa gran cena no fue indiferente ante el rechazo de sus invitados, sino que se enojó. podemos comprender que DIOS NO ES INDIFERENTE A NUESTRO RECHAZO, DIOS NO ES INDIFERENTE A NUESTRAS EXCUSAS, ÉL SE MOLESTA CON NUESTRAS EXCUSAS.
- (Vs 18-21) Y todos a una comenzaron a excusarse. El primero dijo: He comprado una hacienda, y necesito ir a verla; te ruego que me excuses. 19 Otro dijo: He comprado cinco yuntas de bueyes, y voy a probarlos; te ruego que me excuses. 20 Y otro dijo: Acabo de casarme, y por tanto no puedo ir. 21 Vuelto el siervo, hizo saber estas cosas a su señor. Entonces enojado el padre de familia, dijo a su siervo: Ve pronto por las plazas y las calles de la ciudad, y trae acá a los pobres, los mancos, los cojos y los ciegos.
- TERCERA VERDAD: Vemos que el Padre de Familia cuando todos se excusaron no dejó que sus manjares se perdieran, no permitió que esa comida fuera desperdiciada, sino que mandó a llamar a otros para que si la iban a valorar y aprovechar. Tenemos que comprender que TODA BENDICIÓN QUE MENOSPRECIAMOS CON LAS EXCUSAS NO SE PIERDE, SINO QUE OTROS LA VALORAN Y LA APROVECHAN (Vs 22-24) Y dijo el siervo: Señor, se ha hecho como mandaste, y aún hay lugar. 23 Dijo el señor al siervo: Ve por los caminos y por los vallados, y fuérzalos a entrar, para que se llene mi casa. 24 Porque os digo que ninguno de aquellos hombres que fueron convidados, gustará mi cena.
AL CONOCER ESTAS VERDADES ESPIRITUALES COMPRENDAMOS PORQUE LAS EXCUSAS SON UN ENEMIGO QUE AFECTA GRANDEMENTE NUESTRA VIDA CRISTIANA:
- I) LAS EXCUSAS MUESTRAN VERDADERAMENTE CUALES SON LAS PRIORIDADES DE NUESTRO CORAZÓN (LUCAS 9:61) Entonces también dijo otro: Te seguiré, Señor; pero déjame que me despida primero de los que están en mi casa.
En nuestra vida podemos darnos cuenta que nuestras excusas generalmente siempre están enfocadas en aquellas cosas que tienen que ver con Dios y su iglesia, ponemos excusas para no ir a la iglesia, para no servirle al Señor, para no comprometernos más con lo que tiene que ver con el Reino de Dios.
Pero no ponemos excusas para las cosas de este mundo, y eso nos demuestra que la prioridad de nuestra vida no es el Señor.
- II) LAS EXCUSAS SIGNIFICAN QUE NO TENEMOS UN CORAZÓN AGRADECIDO CON EL SEÑOR (LUCAS 17:12-17) Y al entrar en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos 13 y alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros! 14 Cuando él los vio, les dijo: Id, mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que mientras iban, fueron limpiados. 15 Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz, 16 y se postró rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y este era samaritano. 17 Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están? 18 ¿No hubo quien volviese y diese gloria a Dios sino este extranjero?,
Es increíble ver que nuestro Dios hace milagros maravillosos en la vida de muchos cristianos y en sus familias, pero en lugar de tener un corazón agradecido lo que tienen es una excusa para no buscar al Señor, una excusa para no congregarse, una excusa para no servirle, Y ESO MUESTRA LA INGRATITUD QUE HAY EN SU CORAZÓN.
III) LAS EXCUSAS SIGNIFICAN QUE ESTAMOS PONIENDO LA MIRADA EN LOS HOMBRES Y NO EN NUESTRO DIOS (SALMO 26:4-5) No me he sentado con hombres hipócritas, Ni entré con los que andan simuladamente.5 Aborrecí la reunión de los malignos, Y con los impíos nunca me senté.
Muchas personas ponen como excusa para no congregarse o para no aceptar al Señor como su salvador la vida de los demás, y aunque lo que dicen puede ser cierto y es verdad que la hipocresía no agrada a Dios, tampoco es agradable para nuestro Dios que nos volvamos jueces de la vida de las personas (Mateo 7:1-5) No juzguéis, para que no seáis juzgados. 2 Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido. 3 ¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? 4 ¿O cómo dirás a tu hermano: Déjame sacar la paja de tu ojo, y he aquí la viga en el ojo tuyo? 5 ¡Hipócrita! saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano.
Tenemos que comprender que tu NINGUNO DARÁ CUENTA DE LA VIDA DE LOS DEMÁS sino que CADA QUIEN DARÁ CUENTA DE SU PROPIA VIDA (Romanos 14:10-12) Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo. 11 Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda lengua confesará a Dios. 12 De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí.
- IV) LAS EXCUSAS SIGNIFICA QUE ESTAMOS CAYENDO EN LAS ARTIMAÑAS DEL ENEMIGO PARA ALEJARNOS A NOSOTROS Y A NUESTRA FAMILIA DE LOS CAMINOS DE DIOS (JUAN 8:44) Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.
Tenemos que reconocer que la mayoría de nuestras excusas son mentiras, y la mentira no viene de Dios sino de satanás, por lo tanto tenemos que comprender que CADA VEZ QUE PONEMOS EXCUSAS PARA NO ACERCARNOS AL SEÑOR SIGNIFICA QUE ESTAMOS HACIENDO LA VOLUNTAD DEL ENEMIGO Y NO DEL SEÑOR.
Cada vez que ponemos excusas para no hacer la voluntad de Dios, tenemos que comprender a quien estamos agradando con nuestra vida.
¿CÓMO PODEMOS VENCER A ESE ENEMIGO LLAMADO EXCUSAS? Comprendiendo una VERDAD ESPIRITUAL MUY IMPORTANTE: (Juan 15:5) Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.