Sabías que puedes vivir toda tu vida en santidad, y terminar en el infierno?
De inmediato , al oír la palabra santidad, la relacionamos con pureza moral, y no hay equivocación en ello. Pero, este solo sería un significado secundario a la palabra santo, que sería rectitud y pureza personal. Ahora, el significado primario de la palabra santo, significa separado. Si solo lo limitamos a este último significado, tenemos que aceptar que una persona puede vivir toda su vida, desde su nacimiento hasta su muerte, separado de todo lo que considere pecado y terminar en el infierno.
La santidad como la presenta y demanda Dios del ser humano como requisito de salvación (Hebreos 12:14), es aquella que se logra por medio del acto de la santificación, que sólo lo efectúa Dios al perdonar al pecador arrepentido que acepta a Cristo(Juan 3:16, 14:6;Hechos 4:12; 1 Timoteo 2:5). Es ahí, de inmediato que Dios santifica al ser humano arrepentido. O sea, lo separa para su servicio con su toque especial divino. Ahora, la persona puede vivir una vida separada, pero sino acepta a Cristo, al final ha de morir como un pecador más cuya alma ha de terminar en el infierno, porque a pesar de su estilo de vida; de bondad y buen comportamiento, nunca escapó de la condenación con la que había nacido (Romanos 3:23, 5:12-18).
Fuente:
Dr. Carlos Mena
