Según Naciones Unidas más de mil millones de seres humanos viven con menos de un dólar por día, y alrededor de 2. 800 millones de personas, es decir, cerca de la mitad de la población mundial, viven con menos de 2 dólares por día.
Un panorama desalentador y preocupante que presenta un desafío a las autoridades terrenales quienes están en el deber de enfrentar con firmeza la difícil y complicada situación que experimenta la humanidad.
En la Palabra de Dios el tema de la pobreza es tratado ampliamente, «A Jehová presta el que da al pobre, Y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar». Proverbios 19:17.
El crecimiento de la pobreza es producto de gobiernos que solo piensan en aumentar las riquezas de una clase que posee todo en perjuicio de una mayoría que materialmente yace en la nada.
En la Iglesia hay gente necesitada que requieren de atenciones debido a la carencia que le rodea, el ejemplo de una mujer testifica el sufrimiento de los pobres en el pueblo cristiano, «Levantando los ojos, vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca de las ofrendas. Vio también a una viuda muy pobre, que echaba allí dos blancas. {Monedas de poco valor}. Y dijo: En verdad os digo, que esta viuda pobre echó más que todos. Porque todos aquellos echaban para las ofrendas de Dios de lo que les sobra; mas ésta, de su pobreza echó todo el sustento que tenía». Lucas 21:1-4
Los ricos dan si les sobra, no esperemos nunca que van a ayudar a sacar a nadie de la pobreza, el contexto del texto lo dice todo, en cambio los pobres dan de su pobreza y obtienen la aprobación del Señor Jesucristo, como la viuda que dejó de ser pobre al recibir la bendición y multiplicación de Jesús, «Echó más que todos».
Deja todo en las manos de Dios, que ÉL obrará un milagro en tu vida que te sacará de la pobreza, como hizo con la viuda. Amén.
Pastor Antonio Regalado
