Hoy en dia es triste darnos cuenta como en la sociedad y en la iglesia hay tantos matrimonios en conflicto, tantas familias divididas, y tantos matrimonios que terminan en divorcios. COLOSENSES 3-18-19-
Pero ¿Cuál es la causa? Nuestro Señor Jesucristo nos enseña en los evangelios que la primer causa por la cual un matrimonio fracasa es: La dureza del corazón (Mateo 19:7-8)
La dureza del corazón de ambos cónyuges, o también puede ser la dureza del corazón de uno de ellos, esa dureza de corazón es primeramente hacia Dios y el modelo que él ha establecido en su palabra para él matrimonio.
Pues la dureza del corazón se manifiesta en soberbia, en no querer vivir de acuerdo a la manera de Dios, sino a nuestra manera, haciendo las cosas como nosotros consideramos que es mejor, o de la manera como otras personas nos dicen que tenemos que hacer las cosas en nuestro matrimonio y en nuestra familia.
Tenemos que saber que no vivir conforme al modelo establecido por nuestro Dios en su palabra tarde o temprano nos llevará a vivir una vida de conflictos, de insatisfacción, de resentimiento y de dolor en el corazón.
Es por eso que es tan importante que los cristianos solteros puedan conocer y comprender primeramente cual es el modelo de Dios para el matrimonio, pues casarse y tratar de vivir verdaderamente felices y bendecidos sin comprender el modelo de Dios es como tratar de fabricar un guante sin nunca antes haber visto una mano, así de complicado es no conocerlo y así de importante es conocer y vivir en el modelo de Dios.
Veamos en la palabra de Dios como es el MODELO O DISEÑO DE DIOS PARA EL MATRIMONIO (COLOSENSES 3:18-19)
I) REFLEXIONEMOS PRIMERAMENTE EN LA PRIMER PALABRA CLAVE DEL MODELO DE DIOS PARA EL MATRIMONIO: CASADAS (VS 18a)
De esta primer palabra podemos extraer varias reflexiones muy importantes que tenemos que conocer y comprender para que el matrimonio sea una relación bendecida por el Señor:
LA PALABRA CASADAS NOS HABLA SOBRE LA ELECCIÓN CORRECTA DE LA PAREJA: Es muy importante la elección de la pareja con la cual se piensa construir una relación para toda la vida.
Primeramente tiene que ser una persona que verdaderamente tenga a Cristo como Señor y salvador de su vida y que verdaderamente ha dado frutos que reflejan la presencia del Señor en su corazón, no que solamente tenga el nombre de cristiano o cristiana. (Juan 6:43-44)
La persona correcta NO puede ser una persona inconversa pues lo que hay en su mente se refleja en sus acciones (Efesios 4:17-19) un hombre que tiene el entendimiento entenebrecido no puede ser cabeza de su matrimonio y una mujer que tiene el entendimiento entenebrecido y que vive en vanidad ¿como sera ayuda idónea?
LA PALABRA CASADAS TAMBIÉN NOS HABLA DE COMPROMISO Esta palabra nos hace comprender que el primer problema que hay en muchos matrimonios es que no son verdaderamente un matrimonio formalmente establecido, conviven como pareja, pero no están verdaderamente casados y ese tipo de relación no puede ser completamente bendecida por el Señor pues a ese tipo de relación la palabra de Dios la llama fornicación (Hebreos 13:4)
Si verdaderamente tenemos en nuestro corazón él deseo de vivir bajo el diseño establecido por el Señor es necesario que nuestra relación de pareja sea formalizada ante las leyes terrenales y bajo la cobertura de Dios y podemos darnos cuenta que nuestro Señor Jesucristo le dio validez y respaldo a la celebración de los votos matrimoniales con su presencia en las bodas de Caná de Galilea (Juan 2:1-3)
Es importante comprender que el modelo de Dios para el matrimonio no puede verdaderamente cumplir su propósito y ser de bendición si primeramente no se es un verdadero matrimonio delante de Dios.
LA PALABRA CASADAS NOS HABLA DE UN CAMBIO DE ESTILO DE VIDA (1 CORINTIOS 7:32-34) Si queremos que nuestro matrimonio funcione y que el modelo de Dios se puede hacer realidad en nuestro hogar tenemos que tener claro que casarse implica un cambio en nuestro estilo de vida,
Pues lastimosamente muchos matrimonios fracasan debido a que el esposo o la esposa quiere seguir viviendo como soltero o como soltera estando ya casados, la palabra de Dios nos declara que hay diferencia entre la vida del soltero y la vida del casado y no comprender eso afectará negativamente la convivencia en el matrimonio, la esposa ya no estaba bajo la autoridad de sus padres pero sujeta a su esposo, y el esposo ya no está bajo la autoridad de sus padres sino que tiene que aprender a ser cabeza de su matrimonio, a ser cabeza de una familia.