
Así dice el SEÑOR: «De ti recuerdo el cariño de tu juventud, tu amor de novia, de cuando Me seguías en el desierto, por tierra no sembrada.»
Jeremías 2: 2
Jeremías 2: 2
¿No saben ustedes que la amistad del mundo es enemistad hacia Dios? Por tanto, el que quiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.
Santiago 4: 4