En Alemania, está ocurriendo un avivamiento por parte de las iglesias locales, quienes están llevado el evangelio a todo el lugar.
24 iglesias evangélicas han dado paso al despertar de Cristo en los corazones de las personas en ese país.
Muchas personas han podido testificar que aún estando en otras religiones o creencias, sólo experimentando el amor de Jesús pudieron ser libres de espíritu.
“No estamos activos solo los domingos, sino también toda la semana. Compartimos oración, estamos los unos para los otros. Cristo me apasiona”, dice Alexandra, una ex católica.
Las iglesias se enfocan en mantener el concepto conservador de la palabra al establecer valores cristianos para no “reinventar la fe”, es el pensamiento del pastor de International Christian Fellowship, Steffen Beck.
“Nos aferramos a la Biblia, no la reescribimos”, dice Beck.
La cantidad de voluntarios que se han convertido en servidores de las diferentes congregaciones ha sido impresionante, donde resalta la capacidad de cada uno por saber administrar su tiempo para su vida personal y las actividades de la iglesia.
La implementación de nuevas actividades como campamentos para niños ha hecho que los miembros antiguos y los nuevos también puedan sentirse más integrados al cuerpo de Cristo.