He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y confundidos; serán como nada y perecerán los que contienden contigo. Buscarás a los que tienen contienda contigo, y no los hallarás; serán como nada, y como cosa que no es, aquellos que te hacen la guerra. Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo. Isaías 41:11-13
Si estás enfrentando situaciones difíciles, burlas, intimidación y falsas acusaciones, recuerda que fuerzas poderosas se oponen a tu avance. Pero, no hay nada que Dios no pueda hacer. Ninguna crisis o circunstancia lo abruma. Nunca le sorprende ni se conmueve. Él hizo todas las cosas, sostiene todas las cosas y gobierna todas las cosas, incluyendo cada detalle de nuestras vidas, incluso en los días más difíciles. Me confortó leer esta palabra del Pastor Craig Cooney tan acertada. Si estás experimentando problemas, desánimo, temor, frustración o cansancio, no te rindas, Dios está en control. «…mayor es el que está en nosotros que el que está en el mundo» (1 Juan 4: 4). Él ha vencido al mundo (Juan 16:33) y nos hará justicia (Lucas 18: 8).
Isaías 59:15-19 NTV Sí, la verdad ha desaparecido y se ataca a todo el que abandona la maldad. El Señor miró y le desagradó descubrir que no había justicia. Estaba asombrado al ver que nadie intervenía para ayudar a los oprimidos. Así que se interpuso él mismo para salvarlos con su brazo fuerte, sostenido por su propia justicia. Se puso la justicia como coraza y se colocó en la cabeza el casco de salvación. Se vistió con una túnica de venganza y se envolvió en un manto de pasión divina. Él pagará a sus enemigos por sus malas obras, y su furia caerá sobre sus adversarios; les dará su merecido hasta los confines de la tierra. En el occidente, la gente respetará el nombre del Señor; en el oriente, lo glorificará. Pues él vendrá como una tempestuosa marea, impulsado por el aliento del Señor.
El Señor dice:
“Yo, el Señor, Soy un guerrero. Lucho en nombre de Mis fieles. Cuando el enemigo viene contra ustedes, viene contra Mí. Cuando los ataca, me ataca a Mí. Yo me lo tomo muy personal. Por tanto, no se angustien ni tengan miedo. Yo estoy a su lado. No corran y no tomen represalias. Yo seré su escudo y su espada. Me interpondré entre ustedes y los que los asaltan. Me enfrentaré al enemigo y enfrentaré al acusador. Y los reivindicaré con Mi victoria. Manténganse firmes, hijos Míos. No se dejen sacudir por el ruido. No se dejen intimidar por la oscuridad. No se desanimen cuando los malvados parecen tener la ventaja. Aún no he terminado. Ni siquiera se acercarán”.
“Yo, el Señor, soy SANTO y JUSTO. Yo, el Señor, soy JUSTO y VERDADERO. La oscuridad será derrotada. El engaño quedará expuesto. Se descubrirán las mentiras. El mal no quedará impune. Ni siquiera reyes y príncipes, primeros ministros y presidentes pueden evitar Mi juicio. Yo Soy el Señor y la verdad prevalecerá. Por tanto, hijos Míos, no se desanimen. Esta batalla es Mía. No se desanimen. El retroceso es una trampa. Manténganse firmes, serán testigos de Mi poder en acción. Tengan coraje y confianza, verán Mi gloria exhibida. Yo estoy con ustedes. Yo peleo por ustedes, los rodearé con liberación, los cubriré con Mi protección, ordenaré a Mis huestes celestiales que peleen por ustedes. Sean pacientes y perseveren, no pasará mucho tiempo, Yo vendré pronto, Yo los defenderé”. (Craig Cooney)
Éxodo 15: 2-7 NVI El Señor es mi fuerza y mi cántico; El es mi salvación Él es mi Dios, y lo alabaré; es el Dios de mi padre, y lo enalteceré. El Señor es un guerrero; su nombre es el Señor. El Señor arrojó al mar los carros y el ejército del faraón. Los mejores oficiales egipcios se ahogaron en el Mar Rojo. Las aguas profundas se los tragaron; ¡como piedras se hundieron en los abismos! Tu diestra, Señor, reveló su gran poder; tu diestra, Señor, despedazó al enemigo. Fue tan grande tu victoria que derribaste a tus oponentes; diste rienda suelta a tu ardiente ira, y fueron consumidos como rastrojo.
Con amor y oraciones,