Luego me dijo: «Hijo de hombre, anuncia un mensaje profético a los vientos. Anuncia un mensaje profético y dice: “Esto dice el Señor Soberano: ¡Ven, oh aliento, ven de los cuatro vientos y sopla en estos cuerpos muertos para que vuelvan a vivir!”». Ezequiel 37:9
Al comenzar la semana, tengo una palabra para ti. Dios está reiniciando nuestros tableros de circuitos y reestructurando áreas de nuestras vidas que no son visibles en el exterior, ni a veces aparentes. ¿Lo sientes? Ha estado sucediendo durante meses. Él está trabajando detrás de escena, haciendo una obra profunda en este momento para llevarnos de vuelta al camino y deshacernos de muchos, muchos años de conexiones sueltas y cargas pesadas en nuestras vidas.
Dios a veces necesita hacer un reinicio completo en nuestro cableado interno, en nuestros corazones y almas. Cada área de nuestras vidas necesita un reinicio para que podamos funcionar correctamente y la energía vuelva a fluir. ¿Qué representa la energía? Representa el poder de Dios y del Espíritu Santo obrando poderosamente en nuestros corazones y vidas. Este proceso requiere que nos inclinemos hacia Él y nos rindamos a esta reestructuración. Aquí hay tres áreas en las que siento que el Señor nos está pidiendo que hagamos esto en este momento:
NUESTRAS ASIGNACIONES: Dios nos está pidiendo que rindamos el trabajo que estamos haciendo para Él. Se siente como un momento santo, un nuevo capítulo, donde Él pregunta:“¿Qué tienes en tus manos? ¿Vas a seguir haciendo lo mismo de siempre, obteniendo los mismos resultados? ¿O estás dispuesto a rendírmelo, vaciar tus manos y dejar que Yo coloque en ellas lo que necesitas para esta temporada?” Este es un momento para dar un paso atrás y evaluar si lo que estamos haciendo está verdaderamente alineado con Su plan o si estamos aferrándonos a asignaciones obsoletas. Rinde tu trabajo, tu ministerio y tus esfuerzos a Él, para que pueda darte la claridad y la provisión que necesitas.
NUESTRAS RELACIONES: Dios dice: “Dame tus relaciones, tus conexiones y las personas con las que estás caminando. Vacíate y permíteme poner a las personas correctas y las alineaciones necesarias en tu vida.” Algunas relaciones ya no serán fructíferas para la temporada en la que estás entrando. Confía en que Dios reiniciará tu comunidad y sus asociaciones, colocando a las personas correctas en tu camino. Debes estar dispuesto a dejar ir los lazos o conexiones no saludables que te están frenando, y permitir que Él traiga nuevas relaciones que te impulsen hacia adelante.
NUESTROS SUEÑOS: ¿A qué sueños, deseos o expectativas te estás aferrando? ¿Estás dispuesto a entregarlos a Dios? Entra en el lugar secreto, colócalos delante de Él y permite que te dé lo que realmente es necesario para esta temporada. Algunos de los sueños que sostenemos pueden ser buenos, pero no lo mejor de Dios para nosotros o tal vez no estén en el tiempo correcto. Otros pueden necesitar ser refinados o reemplazados. Rinde tus ambiciones y planes al Señor, y deja que Él te dé una visión y un propósito renovados.
Dios también está restaurando la alegría y la aventura de un niño en esta temporada. Mientras grababa este mensaje, vi la imagen de un niño riendo con su padre. Este niño está lleno de alegría y deleite, participando con entusiasmo en la obra de su padre. Creo que Dios quiere restaurar esa fe y alegría infantil en nosotros, algo que el enemigo ha robado a muchos. En los últimos años, muchos pioneros han perdido su gozo, su fuego y su lucha. Han estado corriendo con el tanque vacío. Ahora, en 2025, Dios está comenzando a llenarse con una visión fresca. Pero incluso con una nueva visión, sin la fuente de poder para sostenerla, no se hará realidad. Dios puede darnos planes de construcción, pero sin el poder para ejecutarlos, fracasarán. En este momento, Dios nos está recalibrando, devolviéndonos a nuestra configuración original.
Esta mañana, fui guiado a la historia de Pedro, quien negó a Jesús tres veces. Después de que Jesús murió, Pedro volvió a su barco de pesca. En un poderoso momento de restauración, Pedro, aun cargando el peso de la culpa, corrió hacia la orilla cuando se dio cuenta de que era Jesús. Jesús le preguntó tres veces: «¿Me amas?» y lo instruyó a alimentar a Sus ovejas. Este momento no solo sobrescribe la negación de Pedro, sino que también trajo una profunda sanidad en su alma y corazón, restaurándolo a su misión original.
¿Puedes ver cómo esto está sucediendo ahora, tanto de manera personal como en la iglesia de forma corporativa? Es el Señor suplicando en voz alta: «¡VUELVE A TU PRIMER AMOR! ¡SIENTETE COMPLETO!» Al decir esto, siento el impulso de declarar: ¡Huesos secos, vuelvan a la vida! Tal vez te sientas como esos huesos secos en el valle, dispersos, sin vida y olvidados. Pero escucha la palabra del Señor: El aliento de Dios viene sobre ti. Está soplando vida en tu alma cansada y levantándote para que te pongas de pie como un ejército poderoso. Así como Ezequiel profetizó a los huesos secos y estos se juntaron, hueso con hueso, Dios te está tejiendo de nuevo. Te está cubriendo con tendones, carne y piel, y llenándote con Su Espíritu. Ya no vivirás en el valle de la desesperación ni te sentirás abandonado en la sombra de la muerte. El Señor te está llamando fuera de la oscuridad, fuera de la desesperanza y hacia la plenitud de la vida.
Puede que sientas que has estado acostado en una tumba, oculto, olvidado y sin vida, pero el Señor dice: «¡Sal fuera! No he terminado contigo». Él está restaurando tus fuerzas, renovando tu visión y llenándote con un viento fresco de Su Espíritu. Este es un momento de despertar. Las cosas que se sentían muertas, los sueños que parecían perdidos y los propósitos que parecían inalcanzables están siendo revividos. El Señor te está llamando a levantarte. Ya no cargarás con el peso de la vergüenza, la culpa o la derrota. Ya no te mantendrá el enemigo cautivo en el cementerio de temporadas pasadas. El Señor dice: «¡Ponte de pie! Poderoso, es tiempo de vivir nuevamente.» Él está poniendo Su Espíritu dentro de ti, capacitándote para los días venideros. (Una palabra de Nate Johnston)
PONLE ACCION A TU FE
Lee hoy Ezequiel 37, Juan 11 – Escribe específicamente qué cosas necesitas rendir a Dios. Ora sobre cada una de ellas y entregalas en fe, pidiéndote que te guíe hacia Su propósito. Pide que Su Espíritu de resurrección sople sobre aquellas áreas que parecen muertas en tu vida. La clave es obedecer de manera práctica y confiar en que Dios está guiándote paso a paso. Mientras actúes en fe, verás cómo Dios comienza a mover las piezas a tu favor. ¡Avanza con confianza!
Con amor y oraciones,
