1 Corintios 15:57 Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Este día comenzamos una nueva serie de Estudios Bíblicos con el tema: UNA VIDA CRISTIANA VICTORIOSA, pues la palabra de Dios nos declara que el Padre Celestial nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Por medio de estos estudios Bíblicos vamos a comprender cómo tener victoria sobre la tentación, sobre la preocupación y los afanes, sobre el desánimo, etc.
Pero para comenzar a estudiar cómo podemos vivir una vida cristiana victoriosa en las diferentes áreas de nuestra vida vamos a reflexionar primeramente en : LAS SIETE COLUMNAS DE UNA VIDA CRISTIANA VICTORIOSA. (PROVERBIOS 9:1) La sabiduría edificó su casa, Labró sus siete columnas. Ya que estas siete columnas nos ayudarán siempre a enfrentar y tener victoria sobre las diferentes dificultades y desafíos de la vida cristiana.
Primeramente tenemos que saber que el modelo de construcción de las siete columnas servía para tener EDIFICACIONES MUY SÓLIDAS Y DURADERAS, edificaciones que no cayeran fácilmente, para que se mantuvieran firmes aun ante las tormentas más fuertes y los terremotos.
ESTAS EDIFICACIONES ERAN CONSTRUIDAS CON SEIS COLUMNAS LATERALES Y UNA COLUMNA CENTRAL QUE LE DABA SOLIDEZ A TODA LA EDIFICACIÓN.
Este dia vamos a tomar ese modelo de edificación de las siete columnas para aplicarlo a nuestra vida cristiana, para que podamos tener victoria, es decir permanecer firmes y superar cualquier dificultad con la ayuda de nuestro Dios.
Vamos a reflexionar por medio de la palabra de Dios cuales son cada una de esas siete columnas que no pueden faltar en nuestra vida para que podamos ser cristianos victoriosos ante la adversidad.
I) PRIMERA COLUMNA DE UNA VIDA CRISTIANA VICTORIOSA: NUESTRO DIOS, ÉL TIENE QUE SER LA COLUMNA CENTRAL DE NUESTRA VIDA (PROVERBIOS 21:31) El caballo se alista para el día de la batalla; Mas Jehová es el que da la victoria.
Es imposible pensar que vamos a poder tener una vida estable, sólida y en victoria, SI Dios no está con nosotros. Posiblemente podamos tener prosperidad económica, pero eso no significa que seamos victoriosos en las distintas áreas de nuestra vida.
Podemos conocer personas que son muy prósperas materialmente, pero su vida está llena de fracasos, en su matrimonio, en su vida llena de vicios, en su salud, en la relación con sus hijos, la palabra de Dios nos declara que LA PROSPERIDAD DE LOS NECIOS LOS ECHA A PERDER (Proverbios 1:32) Porque el desvío de los ignorantes los matará, Y la prosperidad de los necios los echará a perder; Los necios son todas aquellas personas que no toman en cuenta a Dios en sus vidas.
Tenemos que reconocer que la columna central que sostiene nuestra vida no es el dinero, no es nuestro trabajo, no son nuestros negocios, no es nuestra inteligencia, ni nuestra preparación académica, todo eso ante las crisis de la vida son como tela de araña que no pueden sostener nuestra vida (Job 8:13-15) Tales son los caminos de todos los que olvidan a Dios; Y la esperanza del impío perecerá; 14 Porque su esperanza será cortada, Y su confianza es tela de araña. 15 Se apoyará él en su casa, mas no permanecerá ella en pie; Se asirá de ella, mas no resistirá.
Tenemos que tener claro qué enfrentar los problemas y dificultades de nuestra vida sin apoyarnos en nuestro Dios, sin depender de él y de su poder, SIGNIFICA PONER NUESTRA CONFIANZA EN EL MÁS DÉBIL: LA CARNE (Marcos 14:38) Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, PERO LA CARNE ES DÉBIL.
La columna central que sostiene nuestra vida y que nos da la victoria es nuestro Dios
(Isaías 41:10) No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
(Isaias 41:13) Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.
II) SEGUNDA COLUMNA DE UNA VIDA CRISTIANA VICTORIOSA: LA PALABRA DE DIOS (DEUTERONOMIO 12:28) Guarda y escucha todas estas palabras que yo te mando, para que haciendo lo bueno y lo recto ante los ojos de Jehová tu Dios, te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti para siempre.
Verdaderamente hay personas que pueden darnos palabras de mucho beneficio para nuestra vida, porque sus palabras son llenas de conocimiento, llenas de experiencia, llenas de buenas intenciones, etc, Pero solamente hay una persona que puede darnos PALABRAS LLENAS DE PODER para transformar nuestra vida, para darnos la victoria, y esas palabras son las palabras de nuestro Dios.
Tenemos que comprender que también hay personas que pueden darnos palabras de muerte (Proverbios 18:21) La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos. Esas palabras son palabras de desánimo, palabras de menosprecio, palabras de burla que nos llevan al fracaso.
Pero solamente nuestro Dios puede darnos PALABRAS DE VIDA, Y DE VIDA ETERNA (Juan 6;67-68) Dijo entonces Jesús a los doce: ¿Queréis acaso iros también vosotros? 68 Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Tenis que tener claro que los cristianos fracasamos cuando desechamos las palabras de nuestro Dios (1 Samuel 15:23) Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación. Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová, él también te ha desechado para que no seas rey.
Si queremos tener victoria en la dificultad, si queremos permanecer firmes ante los problemas de la vida, tenemos que saber que por sobre todo consejo, por sobre toda palabra es el consejo de nuestro Dios es el que permanece y nos hará permanecer a nosotros si lo tomamos en cuenta (Salmos 33:11) El consejo de Jehová permanecerá para siempre; Los pensamientos de su corazón por todas las generaciones.
Aun los jóvenes tienen que reconocer que en estos tiempos en los que todo es novedoso, en estos tiempos de grandes avances científicos y tecnológicos, y que pareciera que todo lo antiguo va quedando desfasado, la palabra de Dios es lo único que puede darnos firmeza y estabilidad en nuestra vida (Isaías 25:1) Jehová, tú eres mi Dios; te exaltaré, alabaré tu nombre, porque has hecho maravillas; tus consejos antiguos son verdad y firmeza.
III) TERCERA COLUMNA DE UNA VIDA CRISTIANA VICTORIOSA: TEMOR DE DIOS (PROVERBIOS 14:27) El temor de Jehová es manantial de vida Para apartarse de los lazos de la muerte.
Tenemos que ser sinceros y reconocer que muchos de los grandes fracasos de nuestra vida, muchas de las cosas que nos han traído dolor y vergüenza a nuestra vida y a nuestra familia han sido causadas por no haber tenido temor de Dios en nuestro corazón, por habernos dejado llevar por la emoción, por habernos dejado llevar por la tentación, sin pensar en las consecuencias, y sin tomar en cuenta que lo que hicimos era desagradable al Señor.
Pero ¿Qué es el temor de Dios? (Proverbios 8:13) El temor de Jehová es aborrecer el mal; La soberbia y la arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco. TEMER A DIOS ES APARTARNOS DE TODO AQUELLO QUE NO AGRADA A DIOS.
Temer a Dios es hacer lo correcto, AÚN CUANDO NO HAY NADIE VIÉNDONOS, pues sabemos que la palabra de Dios nos declara que LOS OJOS DEL SEÑOR ESTÁN SIEMPRE SOBRE NOSOTROS (Hebreos 4:13) Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
El temor de Dios nos ayuda a tener victoria ante uno de los enemigos mas dificiles de vencer en la vida de todo cristiano: LA TENTACIÓN (Génesis 39:7-9) Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y dijo: Duerme conmigo. 8 Y él no quiso, y dijo a la mujer de su amo: He aquí que mi señor no se preocupa conmigo de lo que hay en casa, y ha puesto en mi mano todo lo que tiene. 9 No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios?
Vivir con temor de Dios en nuestro corazón trae recompensas de parte de nuestro Dios (Proverbios 22:4) Riquezas, honra y vida Son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová.
