
NÚMEROS 13:27-33 Y les contaron, diciendo: Nosotros llegamos a la tierra a la cual nos enviaste, la que ciertamente fluye leche y miel; y este es el fruto de ella. 28 Mas el pueblo que habita aquella tierra es fuerte, y las ciudades muy grandes y fortificadas; y también vimos allí a los hijos de Anac. 29 Amalec habita el Neguev, y el heteo, el jebuseo y el amorreo habitan en el monte, y el cananeo habita junto al mar, y a la ribera del Jordán.30 Entonces Caleb hizo callar al pueblo delante de Moisés, y dijo: Subamos luego, y tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos. 31 Mas los varones que subieron con él, dijeron: No podremos subir contra aquel pueblo, porque es más fuerte que nosotros. 32 Y hablaron mal entre los hijos de Israel, de la tierra que habían reconocido, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra que traga a sus moradores; y todo el pueblo que vimos en medio de ella son hombres de grande estatura. 33 También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos.
En los versículos que hemos leído se nos narra el momento en el cual los doce espías que fueron enviados por Moisés para observar la tierra prometida volvieron para dar su informe de lo que habían visto en la tierra que Dios les daba para tomar posesión de ella.
Podemos ver que de los doce espías que fueron enviados por Moisés a reconocer la tierra prometida la mayoría dijeron palabras negativas que lo único que hicieron fue CONTAGIAR AL PUEBLO DE TEMOR, DE DESÁNIMO (Números 14:1-4) Entonces toda la congregación gritó, y dio voces; y el pueblo lloró aquella noche. 2 Y se quejaron contra Moisés y contra Aarón todos los hijos de Israel; y les dijo toda la multitud: ¡Ojalá muriéramos en la tierra de Egipto; o en este desierto ojalá muriéramos! 3 ¿Y por qué nos trae Jehová a esta tierra para caer a espada, y que nuestras mujeres y nuestros niños sean por presa? ¿No nos sería mejor volvernos a Egipto? 4 Y decían el uno al otro: Designemos un capitán, y volvámonos a Egipto.
«El negativismo es como un virus: basta con una sola persona para infectar a todo un grupo.».
EN ESTOS VERSÍCULOS PODEMOS OBSERVAR ALGUNAS ACTITUDES EQUIVOCADAS QUE LASTIMOSAMENTE MUCHOS DE NOSOTROS TOMAMOS CUANDO ENFRENTAMOS LOS PROBLEMAS Y LOS RETOS DE LA VIDA:
LOS QUE SOLAMENTE LLORAN Y SE QUEJAN (vs 1) Entonces toda la congregación gritó, y dio voces; y el pueblo lloró aquella noche. Son las personas que ante cualquier situación adversa lo único que hacen es llorar y quejarse, son frágiles y siempre se decepcionan y rápidamente se quebrantan anímicamente.
LOS QUE SIEMPRE EXAGERAN LOS PROBLEMAS (vs 2) Y se quejaron contra Moisés y contra Aarón todos los hijos de Israel; y les dijo toda la multitud: ¡Ojalá muriéramos en la tierra de Egipto; o en este desierto ojalá muriéramos! Son personas que siempre ven los problemas más grandes o más graves de lo que realmente son, y por lo tanto empequeñecen a Dios, ven los problemas desde la óptica humana no la de Dios.
LOS QUE RENUNCIAN Y VUELVEN ATRAS (vs 3-4) ¿Y por qué nos trae Jehová a esta tierra para caer a espada, y que nuestras mujeres y nuestros niños sean por presa? ¿No nos sería mejor volvernos a Egipto? 4 Y decían el uno al otro: Designemos un capitán, y volvámonos a Egipto. Son los que ante la primera dificultad quieren volver atrás, quieren abandonar, los que toman la salida más fácil, pero no siempre la correcta.
Pero también podemo ver que Josué y Caleb TUVIERON UNA ACTITUD DIFERENTE FRENTE AL NEGATIVISMO DE TODOS LOS DEMÁS, ellos decidieron confiar en Dios, ellos decidieron ver el poder de Dios y no lo grande que eran sus enemigos, esa es UNA ACTITUD DE FE
COMO CRISTIANOS DEBEMOS ENFRENTAR LOS PROBLEMAS Y LOS RETOS DE LA VIDA CON UNA ACTITUD DE FE: (Números 14:5-9) Entonces Moisés y Aarón se postraron sobre sus rostros delante de toda la multitud de la congregación de los hijos de Israel. 6 Y Josué hijo de Nun y Caleb hijo de Jefone, que eran de los que habían reconocido la tierra, rompieron sus vestidos, 7 y hablaron a toda la congregación de los hijos de Israel, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra en gran manera buena. 8 Si Jehová se agradare de nosotros, él nos llevará a esta tierra, y nos la entregará; tierra que fluye leche y miel. 9 Por tanto, no seáis rebeldes contra Jehová, ni temáis al pueblo de esta tierra; porque nosotros los comeremos como pan; su amparo se ha apartado de ellos, y con nosotros está Jehová; no los temáis.
¿CÓMO PODEMOS TENER UNA ACTITUD DE FE PARA ENFRENTAR LOS PROBLEMAS Y LOS RETOS DE LA VIDA?
I) FORTALECIÉNDONOS EN DIOS Y EN EL PODER DE SU FUERZA
(EFESIOS 6:10) Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.
Una actitud de fe significa no confiar en nuestra capacidad o nuestras fuerzas, sino confiar en las fuerzas y el poder de Dios manifestado en nosotros cuando nos mantenemos en comunión con el Espíritu Santo (Zacarías 4:6) Entonces respondió y me habló diciendo: Esta es palabra de Jehová a Zorobabel, que dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos.
Tenemos que comprender que muchas veces Dios no nos librará del problema, PERO NOS DARÁ LA FUERZA PARA ENFRENTARLO (Salmos 18:39) Pues me ceñiste de fuerzas para la pelea; Has humillado a mis enemigos debajo de mí.
II) RECORDANDO NUESTRAS BATALLAS Y LAS VICTORIAS QUE DIOS NOS HA DADO
(1 SAMUEL 17:33-37) Dijo Saúl a David: No podrás ir contra aquel filisteo, para pelear con él; porque tú eres muchacho, y él un hombre de guerra desde su juventud. 34 David respondió a Saúl: Tu siervo era pastor de las ovejas de su padre; y cuando venía un león, o un oso, y tomaba algún cordero de la manada, 35 salía yo tras él, y lo hería, y lo libraba de su boca; y si se levantaba contra mí, yo le echaba mano de la quijada, y lo hería y lo mataba. 36 Fuese león, fuese oso, tu siervo lo mataba; y este filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha provocado al ejército del Dios viviente.
Cuando David iba a enfrentar a Goliat recibió de parte del rey Saúl palabras de menosprecio, palabras negativas y de desánimo, él le dijo: NO PODRÁS IR CONTRA ESE FILISTEO.
FRASE: «Si escuchas demasiado a los temerosos, terminarás huyendo de batallas que ya estaban ganadas.»
La primera victoria de David fue no dejarse vencer ni desanimar por las palabra de derrota, por las palabra de desánimo, y ¿Como lo hizo? RECORDANDO SUS VICTORIAS PASADAS. (Vs 34-36) David respondió a Saúl: Tu siervo era pastor de las ovejas de su padre; y cuando venía un león, o un oso, y tomaba algún cordero de la manada, 35 salía yo tras él, y lo hería, y lo libraba de su boca; y si se levantaba contra mí, yo le echaba mano de la quijada, y lo hería y lo mataba. 36 Fuese león, fuese oso, tu siervo lo mataba; y este filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha provocado al ejército del Dios viviente.
De la misma manera nosotros podemos tener una actitud de fe para enfrentar las dificultades de nuestra vida recordando las batallas que hemos enfrentado y las victorias que nuestro Dios nos ha dado.
Tenemos que recordar que él nunca nos ha abandonado, que siempre nos ha dado su ayuda, que aunque todo parecía en nuestra contra él nos ha dado la victoria, eso nos da confianza y seguridad para vencer el temor de nuestra vida (Hebreos 13:6) de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.
En todas las batallas y problemas de la vida Dios siempre ha sido nuestro ayudador, nuestro sanador, nuestro proveedor y nuestro defensor, por eso podemos tener una actitud de fe hoy en nuestra vida.
III) PELEANDO LA BUENA BATALLA DE LA FE
(2 Timoteo 4:7) He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe.
Una actitud de fe es reconocer que las batallas, los problemas y los retos de la vida no solamente se enfrentan a nivel humano, sino que debemos pelear LA BATALLA ESPIRITUAL.
Tenemos que comprender que muchos de los problemas y dificultades de nuestra vida vienen por la oposición del enemigo en contra de nuestra vida, para robarnos la paz, el gozo y debilitar nuestra fe. (Efesios 6:12) Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.
Esta batalla espiritual se pelea con las armas espirituales que Dios ha dejado y que son respaldadas por su poder (2 Corintios 10:4) porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,
Estas armas que son poderosas en Dios son: LA ORACIÓN. LA ADORACIÓN, LA ALABANZA, EL AYUNO.
IV) CONFIANDO QUE LA PRESENCIA DE DIOS ES LO MÁS VALIOSO QUE ALGUIEN PUEDE TENER
(Jueces 6:15-16) Entonces le respondió: Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre. 16 Jehová le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre.
Tenemos que recordar que ante cualquier problema de nuestra vida, tenemos que tener una actitud de fe, de confianza y de esperanza recordando que: DIOS ESTÁ CON NOSOTROS.
Y es por eso que podemos decir con toda confianza: (Romanos 8:31) ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
CONCLUSIÓN: Una actitud de fe es la clave para enfrentar los desafíos de la vida. Mientras el negativismo y el miedo pueden contagiar y paralizar, la confianza en Dios nos fortalece y nos impulsa a avanzar. Josué y Caleb nos enseñan que ver las dificultades desde la perspectiva divina nos lleva a la victoria. Debemos recordar las victorias pasadas, pelear con armas espirituales y confiar en la presencia de Dios. Si Él está con nosotros, no hay obstáculo que pueda detenernos.