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Un tiempo de reversiones divinas y una temporada de gloria

Escuché al Espíritu del Señor proclamar: «He aquí, esto no es una repetición de lo que has presenciado en el pasado, ni es un reflejo de lo que has buscado en temporadas anteriores. ¡Estoy inaugurando una nueva temporada de gloria, una transformación de la gloria en tu vida! Prepárate, porque los cambios que se avecinan en tu vida asombrarán a muchos. Revelaré lo que ha permanecido oculto y encenderé tus dones de maneras nunca antes encendidas. Sentirás las sacudidas de los dolores de parto dentro de ti, y a partir de eso, darás a luz el cambio necesario para que entres en la temporada de abundancia que he preparado para ti. Presta atención a las señales en tu camino, porque tu camino está experimentando una transformación. Nuevas oportunidades están en el horizonte. ¡Observa de cerca, porque estoy realineando tu camino!»

¡BUMERANG!
Este es un tiempo de «reversiones divinas». Así como en Ester 9:1, cuando habla del decreto de Aman, dice que los enemigos de los judíos esperaban tener poder sobre ellos, pero sucedió lo contrario. Los judíos tenían dominio sobre aquellos que los odiaban.

Ester 9:1 NVI El edicto y la orden del rey debían ejecutarse el día trece del mes doce, que es el mes de adar. Los enemigos de los judíos esperaban dominarlos ese día; pero ahora se habían invertido los papeles y los judíos dominaban a quienes los odiaban.

La palabra hebrea para «revertir» es «haphak», que significa «voltear», «cambiar», «derrocar», «girar», «transformar» y «ser revertido». Este es un tiempo de reversiones divinas», dice el Señor.  Oigo al Señor decir: «¡Bumerang!» Como un bumerang que se lanza y regresa a quien lo lanzó, Dios hará que cada maldición y cada asignación del infierno se devuelvan directamente a nuestro enemigo espiritual. Así como Amán construyó horcas para colgar a los judíos, y él terminó siendo colgado en ellas. No solo fue destruido Amán, sino que también se eliminaron a sus diez hijos para que no pudieran tomar represalias.

Dios está devolviendo las maldiciones del infierno al enemigo. Dios está convirtiendo la maldición en bendición para ti porque te ama. También está llevando a cabo reversiones divinas en situaciones que han experimentado un declive. Está produciendo un cambio de fortuna, un cambio de la muerte a la vida, un cambio de la enfermedad y el dolor a la sanidad y la plenitud. En esta temporada de reversiones divinas, el Señor no solo está convirtiendo maldiciones en bendiciones, sino que también está llevando restauración y redención a áreas de tu vida que han estado rotas y perdidas. Donde antes había desesperación, ahora habrá esperanza. Donde antes había oscuridad, ahora habrá luz.

Dios está convirtiendo tu luto en baile, tu llanto en gozo. Está tomando las cenizas de tu pasado y creando una hermosa historia de redención. Tus contratiempos se convertirán en escalones hacia mayores victorias. Tus fracasos se transformarán en testimonios de Su fidelidad. No subestimes el poder de las reversiones divinas. El Señor es capaz de hacer infinitamente más de lo que puedes pedir o imaginar. Puede convertir lo imposible en posible. Él es el Dios de los milagros y está trabajando detrás de escena para lograr un cambio radical en tu vida.

ALINEATE CON LAS PROMESAS DE DIOS
Este es el momento de alinear tu corazón y mente con las promesas de Dios. Acepta Su Palabra y mantente firme en la fe. Confía en que Él está obrando todas las cosas para tu bien. Incluso cuando las circunstancias parezcan sombrías, recuerda que Dios es el autor supremo de tu historia y Él tiene la última palabra.  A medida que caminas en obediencia y te rindes a Su voluntad, presenciarás la manifestación de reversiones divinas en tu vida. Puertas que antes estaban cerradas se abrirán de par en par. Relaciones que estaban rotas serán restauradas. Finanzas que carecían rebosarán con abundancia.

No te desanimes por los desafíos que puedan surgir en el camino. El viaje de las reversiones divinas puede requerir perseverancia y paciencia, pero el resultado final valdrá la pena. Mantén tus ojos puestos en Jesús, el autor y perfeccionador de tu fe, y confía en que Él te está guiando hacia una temporada de avance sin precedentes. Así que, abraza este tiempo de reversiones divinas con esperanza y expectativa. Permite que Dios cambie tus circunstancias y manifieste Sus propósitos en tu vida. Entra en la plenitud de Sus bendiciones y observa cómo transforma cada área de tu vida para Su gloria. (Una palabra de Charlie Shamp)

Deuteronomio 23:5 LBLA Mas el Señor tu Dios no quiso escuchar a Balaam, sino que el Señor tu Dios te cambió la maldición en bendición, porque el Señor tu Dios te ama.

Con amor y oraciones,

Fuente:
Magie de Cano

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