Hazme andar por el camino de tus mandatos, porque allí es donde encuentro mi felicidad. Salmos 119:35 NTV
Creo que muchos están sintiendo en este tiempo una fuerte urgencia de hacer cambios en la disciplina de su vida diaria. Cambios en sus horarios, en su tiempo de oración, en sus hábitos de gasto, en sus finanzas y en su manera de ayunar, aunque no comprendan del todo por qué. Se ha sentido como un deseo repentino de dejar la rutina cómoda y conocida, para entrar en un estilo de obediencia que quita las redes de seguridad y depende totalmente de Dios.
Al acercarnos al mes de septiembre, el Señor me habló de un cambio en la forma de hacer las cosas “como siempre”, un cambio que traerá abundante rompimiento para Su pueblo.
Escuché al Señor decir:
“Así como Jericó estaba cerrada y parecía imposible de conquistar, hay herencias en la vida de mis hijos que se han sentido inalcanzables. Pero Yo les digo: así como guié a Israel a rodear los muros de la ciudad por 7 días hasta verlos caer, así ahora llamo a Mi pueblo a hacer lo que no es común ni ordinario, para abrir territorios y recibir las promesas que estoy liberando. Este mes, Rosh Hashaná marcará un punto clave en Mi línea de tiempo, porque voy a hacer TRANSICIONAR a muchos hacia lo NUEVO las cosas por las que han orado y esperado tanto. Escuchen Mi voz. Sigan mis instrucciones. Están colaborando con Mi Espíritu para traer adelante Mi plan de victoria.”
Hebreos 11:30 NVI Por la fe cayeron las murallas de Jericó, después de que los israelitas marcharon siete días a su alrededor.
Este mes no se verá igual. Tiene que ser diferente, porque hay una invitación divina a hacer lo que nunca has hecho para entrar en lo que nunca has vivido.
En Josué 6, Israel marchó alrededor de Jericó por 7 días, y así también este SEPTIEMBRE no es un mes más, sino un tiempo en el que el Señor está despertando nuevos ritmos estratégicos en las rutinas diarias, que abrirán, desatarán y revelarán cosas mucho mayores de lo que puedes pedir, pensar o imaginar. Las áreas de tu vida que han estado cerradas y bloqueadas están a punto de abrirse. Pero la OBEDIENCIA a la voz de Dios es la clave, aunque parezca locura para los que te rodean.
Josué 6:15-16 NVI El séptimo día, a la salida del sol, se levantaron y marcharon alrededor de la ciudad tal como lo habían hecho los días anteriores, solo que en ese día repitieron la marcha siete veces. A la séptima vuelta, los sacerdotes tocaron las trompetas y Josué ordenó al ejército: «¡Empiecen a gritar! ¡El Señor les ha entregado la ciudad!
Debes dejar que el compás de tu marcha apague la voz de los burladores. Debes permitir que esa sacudida interior, ese empuje repentino de salir de «lo de siempre”, te mueva hacia adelante en acción y fe, en lugar de retroceder por miedo. Cuando tu dependencia de Dios aumente, todos los obstáculos caerán. Este es el mes en que te asociarás con Dios para ejercer dominio.
Escucha Su voz, sigue Sus instrucciones y prepárate para poseer lo que Él ya declaró como tuyo. (Una palabra de Chloie Stafford)
Juan 14:21 NVI ¿Quién es el que me ama? El que hace suyos mis mandamientos y los obedece. Y al que me ama, mi Padre lo amará; y yo también lo amaré y me manifestaré a él.
Mateo 11:12 NVI Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos ha venido avanzando contra viento y marea, y los que se esfuerzan logran aferrarse a él
Con amor y oraciones,
