A veces, lo más sencillo es lo que más profundamente toca el alma.
Este devocional nació de una palabra breve, pero cargada de presencia y verdad. Para mi sorpresa y para gloria de Dios, muchas personas de diferentes naciones, me expresaron lo mucho que esta reflexión impactó en sus vidas. Fue un recordatorio de que no es la cantidad de palabras, sino el toque del Espíritu Santo lo que transforma los corazones.
“Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida…”
Salmo 23:6
Dios, en su infinito amor, sabe llamarnos la atención de una manera suave pero firme. A través del mensaje compartido por el Pastor Ezequiel Molina Hijo, el Señor nos recordó algo profundo y lleno de ternura:
“Mira cómo te he cuidado.
Mira cómo mi bien y mi misericordia te han sostenido, aun sin que te dieras cuenta.
Mira cómo te he apartado del mal, sin que lo supieras y sin que me dieras las gracias.”
Estas palabras llegaron a mi espíritu con un peso de gloria. A través de un breve mensaje transmitido en la plataforma TikTok, pude sentir la Presencia viva de Dios hablándonos directamente al corazón. Su ternura, Su fidelidad silenciosa, Su protección constante… ¡Todo ha estado allí, incluso cuando yo no lo veía!
¡Cuántas veces Él nos ha librado de peligros invisibles!
¡Cuántas veces ha provisto antes siquiera de que recibiéramos la necesidad!
Dios ha sido fiel, incluso en momentos en que nosotros hemos estado distraídos, ocupados, o sin darle gracias.
Hoy, toma un momento. Mira hacia atrás, reconoce Su cuidado y da gracias. No solo por lo que viste… sino también por lo que nunca supiste, por todo aquello que Él hizo en secreto, por amor a ti.
Gloria a Dios.
Este fue, sin duda, uno de los devocionales más impactantes del mes de octubre. Personalmente, fui ministrada profundamente. La gloria es de Dios.



