“Pondrá de nuevo risas en tu boca, y gritos de alegría en tus labios”. Job 8:21 (Nueva Versión Internacional)
Ayer hablaba con una persona que se sentía triste, al ver su estado le dije: “Sonríe, no dejes de sonreír”. Ella rápidamente me dijo: “¿Por qué voy a sonreír, si no hay razón?” en ese momento le dije lo siguiente: “Yo paso por circunstancias iguales o peores que tu, pero aun en medio de todo lo difícil que me toca vivir siempre trato de sonreír, porque que se al final todo saldrá bien”.
Se lo difícil que son algunos momentos de la vida, sé que es estar pasando por grandes problemas, se lo que se siente pasar por enfermedades fuertes o ver como un ser querido está sufriendo. Sé que es ser débil y sentirse sin ánimo, soy una persona común como cualquier otro, con mis errores y defectos, con mis pruebas y tribulaciones, pero aun y con todo eso he aprendido a sonreírle a la vida.
Si sonrió, no porque la situación la amerite, sino porque tengo comprobado que al final todo saldrá bien, porque hay alguien que cuida de mi, que tiene cuidado de mis necesidades y que jamás me dejaría hundirme.
A veces la gente puede pensar que no paso por problemas, que mi vida todo es color de rosas, pero se equivocan, yo también paso por todo lo que ustedes pueden pasar y a veces más fuerte, pero dentro de mi hay algo que me hace estar seguro y confiado que todo eso malo que en ese momento veo, se convertirá en algo precioso cuando Dios termine ese proceso.
Quizá tú hoy estas pasando por un momento de esos, en donde lo menos que quieres es sonreír, en donde las ganas de vivir se van de a poco, en donde el sentido de tu vida pareciera que se está nublando, pero aun y con todo eso SONRÍE SIEMPRE.
Si cada uno de nosotros comprendiéramos que lo que en este momento nos aflige mañana solo será un testimonio del poder de Dios, creo que viviríamos más tranquilos, creo que disfrutaríamos esta nueva vida en Cristo, nos evitaríamos muchos momentos amargos.
Está bien llorar, son reacciones normales que todos tenemos, pero que ese llanto no se convierta en tu canción eterna, al contrario, que solo sea un corto momento de desahogo y luego puedas secarte esas lagrimas y sacar la mejor y más linda sonrisa que puedas, porque de una cosa si tienes que estar seguro: DIOS NO SE HA OLVIDADO DE TI.
Hoy quiero recordarte que eres importante para Dios, que si estas pasando por eso en este momento es porque Dios sabe que tienes la capacidad en El de salir adelante, ¡Vamos! ¡Levántate!, limpia las lagrimas de tus mejillas y ten la confianza y la convicción de que TODO saldrá a tu favor, porque Dios ha sido lo ha decretado.
Nunca olvides que tú no estás solo y que de tu lado esta un Poderoso Gigante que es capaz de hacer cualquier cosa, quien no tiene límites y que tu eres parte de sus hijos, por lo tanto hará todo lo posible por cuidar de ti, por lo tanto SONRÍE.
¿Por qué no le sonríes hoy a Dios y le demuestras lo confiado que estas en El?
Regálale la mejor sonrisa que tu rostro pueda expresar como muestra de que a pesar del momento difícil, tú estás seguro o segura que TODO saldrá bien y que al final Glorificaras su Nombre.
Dios te está viendo: ¡Sonríe Siempre!