Daniel 2:1-13 Podemos ver en esta historia que Daniel estaba en una situación muy complicada, era verdaderamente una situación de vida o muerte, pues al no poder los sabios y caldeos de Babilonia dar a conocer al rey Nabucodonosor el sueño y su interpretación el rey dio un edicto para que mataran a todos los sabios de Babilonia, y entre ellos estaba Daniel y sus compañeros judíos.
Tal como lo expresaron los caldeos en el vs 10: No había hombre sobre la tierra que pudiera darle la respuesta al rey Nabucodonosor, era un problema que ningún hombre podía resolver.
Si trasladamos esta historia a la actualidad, podemos reconocer también que hay situaciones en nuestra vida que humanamente hablando son muy difíciles o imposibles de resolver, como las enfermedades, las amenazas, las crisis financieras, las adicciones, las crisis matrimoniales, etc.
Es por eso por lo que esta noche vamos a tomar el ejemplo de Daniel para enfrentar esas situaciones tan complicadas de nuestra vida y tener victoria sobre ellas por medio del poder de nuestro Dios.
¿Qué lecciones podemos sacar para nuestra vida con la manera como Daniel enfrento esta situación tan complicada?
DANIEL REACCIONO SABIA Y PRUDENTEMENTE (VS 13-16)
Daniel prácticamente estaba condenado a muerte, pero se nos dice que, en lugar de hacer locuras, en lugar de tratar de huir, Daniel hablo con sabiduría y prudencia y se informo bien sobre el edicto que el rey había firmado.
Daniel no huyo del rey, al contrario, fue delante del rey Nabucodonosor a pedir tiempo para encontrar una respuesta.
Lastimosamente muchos de nosotros hacemos todo lo contrario de lo que hizo Daniel, nos desesperamos, hacemos locuras, tratamos de huir del problema y no lo enfrentamos.
Muchas personas no buscan resolver sus problemas, sino que buscan una salida, buscan una escapatoria, por esa razón muchos se refugian en los vicios y las adicciones, otros por medio de las fugas geográficas, abandonándolo todo.
Otras personas tratan de resolver sus problemas con dinero, haciendo préstamos, llegando al limite en sus tarjetas de crédito, y algunos llegan al colmo de pagar por pócimas, por limpias, por talismanes en centros espiritistas, lo cual es totalmente desagradable para nuestro Dios.
Dios no quiere que hagamos locuras, el quiere que aprendamos a confiar y a esperar en el (Isaías 30:15)
DANIEL Y SUS AMIGOS CLAMARON A DIOS POR MISERICORDIA (DANIEL 2:17-19)
Cuando nadie nos puede ayudar, como en el problema que tenían Daniel y sus amigos, lo único que podemos y debemos hacer es clamar por la misericordia de nuestro Dios.
La misericordia es el amor de Dios puesto en acción a favor de sus hijos, una ayuda que se recibe no porque lo merezcamos, no porque seamos buenos, sino una ayuda que se recibe porque nuestro Padre celestial nos ama, porque el es bueno, y porque nos ve con ojos de misericordia, el calla de amor cuando nos ve, y aunque tenga mucho que reprocharnos, aunque él tiene mucho que decir en nuestra contra, el calla de amor y nos ayuda (Sofonías 3:17)
Daniel estaba seguro de que el único que tiene la sabiduría y el poder para resolver los problemas y dificultades mas grandes de la vida del ser humano es nuestro Dios (Daniel 2:20) Y NOSOTROS TAMBIEN TENEMOS QUE ESTAR SEGUROS DE ESO.
DANIEL RECONOCIÓ QUE SOLAMENTE DIOS PODIA DARLE LA RESPUESTA AL REY (DANIEL 2:24-28)
Daniel se presento delante del rey Nabucodonosor, y le dijo una gran verdad espiritual que todos debemos comprender (vs 27): hay situaciones en la vida del ser humano que ni los médicos, ni los abogados, ni las riquezas, ni los poderosos pueden resolver.
Pero como lo expreso Daniel delante del Rey: ¡¡¡HAY UN DIOS EN LOS CIELOS!!! (VS 28) Aleluya!!!
Nunca debemos olvidar que, aunque en nuestra vida puede haber situaciones tan complicadas que nadie las puede resolver, ni la ciencia médica, ni el dinero, ni las leyes ni abogados, pero hay un Dios en los cielos que tiene poder, hay un Dios en los cielos que tiene misericordia, hay un Dios en los cielos al cual nosotros le podemos llamar PADRE NUESTRO.
Sigamos el ejemplo de Daniel, no nos desesperemos, no hagamos locuras, busquemos con fe en oración a nuestro Dios que esta en los cielos y esta sentado en el trono, el tiene la ultima palabra en nuestra vida, no olvidemos lo que aun Nabucodonosor reconoció, el Dios nuestro es Dios de dioses y Señor de los reyes (vs 46-47) EL DIOS DE DANIEL, TAMBIÉN ES NUESTRO DIOS.