Una de las expresiones más cortas y tajantes del español es esa sola letra: y. Reviste pesadez, reviste duda, pesimismo. Y este análisis que haré, justamente tendrá alguno de esos elementos .
El 27 de febrero celebramos la independencia. Normalmente el Presidente presenta sus memorias, las personas ponen banderas en sus balcones y, al menos por un día, la población se enfoca en recordar a Duarte, Sánchez, Mella y otros patricios que ofertaron su sangre, su salud y bienestar por la patria.
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Esa es la dolorosa pregunta que tenemos que hacernos. ?Somos realmente independientes?. ? Han valido los esfuerzos y la sangre de tanta gente ?. Hago estas preguntas porque este 27 de febrero nadie pensará en ninguna de las cosas antes mencionadas, ni en el carnaval, eterno animador de nuestros febreros. La población se encuentra dividida entre quienes favorecen al gobierno y a quienes no.
Muchos se sienten excluidos, y al margen de todo, y se violentan muchos derechos y se cometen diversos abusos,y eso provoca que ese sector, donde abundan jóvenes, que es el segmento mayoritario de la población dominicana, se sienta burlado. Y tiene por qué sentirse así.
Hemos construido un estado fundamentado en el privilegio y la desigualdad, donde unos tienen derecho a todo y más y otros no tienen derecho a las cosas más elementales como puede ser comida, salud y empleos. Esa es la razón por la que miles de jóvenes profesionales prefiere irse y aventurar en playas extranjeras, ya que le huyen al caos, a la miseria y a la desigualdad.
En otros países si trabajas y te esfuerzas, no serás millonario, pero tendrás seguridad social y calidad de vida, cosas que acá devienen en una quimera. Por eso, hay que volver nuestro aserto inicial: Realmente somos independientes?. Garantizamos la posibilidad de que nuestro pueblo sea cada vez más próspero?. Le damos derechos que respetamos y obligaciones que cumplen?. Las respuestas, en muchos casos, de estas preguntas y muchas otras son frustrantes.
Por eso, muchas veces me pregunto, valió la pena tanta sangre derramada?, se justifica tanto esfuerzo, tanto dinero, con estos resultados tan chocantes y deprimentes ?. Todo lo anterior sólo vale sinos abocamos a una refundación como sociedad y decidimos crear un sistema más inclusivo, que castigue al corrupto, al transgresor, quien quiera que sea, y logremos crear trabajos de calidad que permitan crear riqueza, no trabajos golondrinas.
Pero eso que expuse, no depende del gobierno en su totalidad. Ese es un compromiso que debe venir de cada dominicano, y cada uno de nosotros debe poner su granito de arena para que esa igualdad, esa prosperidad y ese desarrollo puedan construirse y mantenerse.
