Porque me han rodeado males sin número; Me han alcanzado mis maldades, y no puedo levantar la vista. Se han aumentado más que los cabellos de mi cabeza, y mi corazón me falla. Salmo 40:12
Primeramente, definamos que es una crisis, pues una crisis no es simplemente un problema, tal como lo dice el versículo, el salmista estaba rodeado de males sin número, sentía que su corazón le fallaba por la angustia y la aflicción.
Una crisis es según el diccionario:
Una situación grave que pone en peligro la vida.
Una situación difícil.
Un cambio brusco de la condición de vida de una persona.
Tenemos que saber que nosotros los cristianos como nos lo muestra la palabra de Dios no estamos exentos de pasar por las crisis, tarde o temprano llegaran a nuestra vida momentos de aflicción, de enfermedad, de escasez, de desempleo, de amenaza, etc. ¿Qué debemos hacer en esos tiempos de crisis? Veamos lo que nos enseña la palabra del Señor:
EN LA CRISIS LO PRIMERO Y LO PRINCIPAL QUE TENEMOS QUE HACER ES BUSCAR A DIOS (SALMO 77:2)
Eso es algo que todos nosotros sabemos, se nos ha enseñado, se nos ha predicado, pero que lastimosamente NO LO HACEMOS.
La mayoría de nosotros lo que hacemos es buscar la ayuda de Dios cuando ya todo lo demás ha fallado, cuando todas las puertas se han cerrado, cuando nuestros planes han fracasado, es decir dejamos a nuestro Dios como la última opción cuando al contrario el debería de ser lo primero en nuestra vida.
EN LA CRISIS TENEMOS QUE CONFIAR QUE DIOS LO HA PERMITIDO CON UN PROPOSITO DE BENDICION PARA NUESTRA VIDA (ISAIAS 48:10)
Siempre decimos: “Nada pasa si Dios no lo permite” pero ¿lo creemos? Si no creemos que la crisis que estamos viviendo es porque Dios lo ha permitido con un propósito bueno para nuestra vida, nuestro corazón terminara resentido y amargado.
En el versículo que hemos leído la palabra purificado es la palabra hebrea “Tsaraf” que significa “Acrisolar” es decir purificar un metal por medio del fuego en el crisol, y ese crisol donde el Señor nos purifica se llama aflicción.
Los tiempos de crisis significan que Dios esta trabajando en nuestra vida (Malaquías 3:2-4) como lo dice el versículo, el Señor, así como el platero se sentara para afinarnos y para limpiarnos, para que nuestra vida sea una ofrenda agradable para nuestro Dios.
EN LA CRISIS TENEMOS QUE SER PACIENTES Y ESPERAR TENIENDO SEGURIDAD QUE DIOS NOS AYUDARA (SALMO 40:1-2)
En los momentos de crisis lo que más nos cuesta es ser pacientes y esperar, esa es una de las grandes lecciones que aprendemos en tiempos así, que las cosas no cambiaran enojándonos, ni desesperándonos, ni haciendo berrinches, en las crisis Dios nos lleva a doblegar nuestra vida ante el y decir: Que se haga tu voluntad Señor.
Como lo dice el salmista: pacientemente espere a Jehová y el me respondió, y me hizo sacar del pozo de la desesperación, puso mis pies sobre peña, y enderezo mis pasos.
Pongamos atención en esas palabras: Me hizo sacar, puso mis pies, enderezo mis pasos, ¿Qué significan esas palabras? Que si esperamos pacientemente en Dios, si no nos movemos, si no hacemos locuras, todo lo que nosotros no podemos el Señor lo hará por nosotros, el nos sacara de la crisis, el nos dará la victoria.
TENEMOS QUE CONFIAR QUE LA CRISIS DE HOY SERA UN MOTIVO DE ALABANZA PARA NUESTRO DIOS MAÑANA (SALMO 40:3-5)
Vamos a testificar y glorificar a Dios por sus maravillas manifestadas en nuestra vida, el cambiara nuestro lamento en alegría cuando cumpla sus propósitos en nuestra vida.
Dios pondrá una alabanza en nuestra boca, un cantico nuevo nacido de un corazón agradecido por las maravillas de nuestro de Dios.
