Muchos son los que se preguntan si las economías están preparadas para los empleos del futuro?. la respuesta es sí y no, dependiendo del lugar donde se ubique el país y el nivel de escalamiento que haya alcanzado tecnológicamente.
Una nación como China, que avanza en la automatización de manera vertiginosa no es de pensar que tendría mayores problemas, porque a pesar de su bien conocida mano de obra barata el alcance de su desarrollo está mostrando avances importantes. Un ejemplo de esto es el más reciente puente construido sobre el mar que la une con Hong Kong y otras ciudadades, y que tiene dos islas artificiales.
China, se ubica en el principal lugar (394) de los países con mano de obra asociada con actividades automatizables, por encima de Estados Unidos, Europa y Japón, según una investigación de Mckinsey Global Institute, brazo investigador de Mckinsey & Compañía, en temas de negocios y economía.
De acuerdo con el estudio de Mckinsey “Un futuro que funciona: automatización, empleo y productividad”, sugiere la aplicación de políticas públicas, tomando en cuenta el mercado laboral, porque el proceso de automatización no sucederá de la noche a la mañana y aunque la forma de trabajar cambiará, la productivdad se dará si las personas trabajan junto con las máquinas. Estima que el 49% de las actividades de la economía global tiene potencial de ser automatizada si se adoptan las tecnologías probadas.
Más allá de cualquier retroceso en el comercio mundial, los empleos del futuro se centrarán en la automatización y se prevé que entre 20 a 40 años más de la mitad de los trabajos que hoy se realizan se harán de forma distinta.
En términos de educación, la sugerencia de Mckinsey está centrada en pautas reales. Sugiere mejorar las habilidades en ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas.
Otras sugerencias no menos importantes surgen de la amenaza que implica la automatización para algunas áreas laborales, pero lo cierto es que la economía global ha atravesado ya por esto con el caso de la actividad agrícola y la textil cuando la entrada de la manufactura. Países como República Dominicana deberán “verse en ese espejo” ante los resultados evidenciados en el informe PISA (Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes) en materia educativa
Reportes de la prensa local indican que “la evaluación PISA 2015 arrojan que República Dominicana quedó en quinto lugar con el puntaje más bajo, entre 72 países evaluados en pruebas de ciencia, lectura y matemáticas”.
Esta semana, el Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT) también plantea las consecuencias que suponen que tendrán los gobiernos luego de la transformación digital de actividades tradicionales, tanto en la adaptación como en las nuevas altenativas.
