
Ministerio Tabernáculo Prensa de Dios
Una voz que clama desde República Dominicana
«Pero el justo vivirá por la fe; y si retrocede, no agradará a mi alma.» Hebreos 10-38
Durante 16 años, este espacio ha sido un lugar para compartir mensajes de fe y esperanza, dando siempre la bendición y espacio principal a los ministros de nuestra nación y a todas las naciones del mundo. Hoy, el Señor me ha movido a escribir desde el corazón de nuestra nación, para levantar un llamado urgente a la perseverancia en la fe.
Todo comenzó al leer el editorial del Listín Diario titulado “No cantemos victoria todavía”. Al instante, el Espíritu me hizo sentir que, aunque las palabras fueran prudentes, sabias, en el fondo había una fragilidad de fe, un temor humano que necesita ser corregido con la convicción del Espíritu Santo de Dios.
No cantemos victoria todavía
El mensaje inicial nos recuerda que no debemos cantar victoria antes de tiempo ni depender de lo que el mundo predice. La prudencia no debe nacer del miedo, sino de la confianza en Dios.
Dios nos llama a discernir los tiempos, a mantenernos vigilantes, a orar y esperar con humildad. La verdadera victoria sólo se reconoce cuando se confirma en la obra de Dios, no en la apariencia de los hechos.
Persevera en tu fe, aunque otros se cansen
En la madrugada, el Espíritu me habló con fuerza.
¿Por qué no sigues perseverando en tu fe?
Esa voz no juzga; despierta. Nos recuerda que la fe no se basa en los pronósticos ni en la reacción de los demás, sino en la certeza de que Dios cumple Su palabra.
Muchos se cansan, se distraen o se desalientan. Pero la perseverancia consiste en mantener viva la fe, en sostener la lámpara encendida, aun cuando el viento sople fuerte. La fe verdadera no se agota. se fortalece en la espera y en la oración constante.
Dios sigue gobernando los vientos
El ciclón que recientemente pasó por Jamaica fue parte del propósito divino. Aunque el ojo del ciclón entró en esa nación, no hubo destrucción mayor, y eso nos muestra el control soberano de Dios sobre la naturaleza y sobre la vida de Su pueblo.
Lo que parecía una amenaza se convirtió en una lección de fe para nuestra nación. Dios permitió la lentitud del ciclón para preparar nuestro altar, para que nos uniéramos en oración, clamando con convicción y con el corazón encendido.
Así como Él gobierna los vientos naturales, también gobierna los vientos espirituales que quieren desanimarnos o sembrar temor. Este evento fue una confirmación: la oración unida y la fe perseverante cambian el curso de las tormentas y abren camino para Su gloria.
Aplicación espiritual
- Mantén tu fe firme, incluso cuando otros se cansen o se distraigan.
- Ora con tu comunidad, recordando que Dios escucha y actúa cuando Su pueblo clama unido.
- Recuerda que Dios permite pruebas y situaciones aparentemente peligrosas para fortalecer nuestra fe y preparar Su obra.
Oración final
Señor amado, gracias porque sigues gobernando los vientos y cuidando a Tu pueblo.
Despierta nuestra fe, renueva nuestra confianza y enséñanos a perseverar aun cuando otros se desanimen.
Fortalece a quienes dudan, une a Tu pueblo en oración y haz que nuestra nación, República Dominicana, siga caminando firme bajo Tu protección y guía.
Que nuestra fe no se apague, que nuestra esperanza sea constante, y que nuestro clamor sea siempre agradable a Ti.
En el nombre de Jesús, amén.
Ministerio Tabernáculo Prensa de Dios
Ministrando Paz, Amor Esperanza y Fe.
Una voz que clama desde República Dominicana para las naciones



