El Comité Ejecutivo de la Asociación de Iglesias Jesucristo Fuente de Amor, emitió una declaración con motivo de su XXXII Convención Nacional en la que expresa profunda preocupación por el giro que ha tomado la sociedad dominicana de alejamiento a los principios que fueron norte en la fundación de nuestra nación.
Los pastores evangélicos hicieron un llamado sobrio y urgente a los que gobiernan, así como a la sociedad en general para volver a los valores bíblicos sobre los cuales fue fundada nuestra nación por los padres de la patria y sus amigos.
«Regresemos a la verdad, la justicia, el respeto a la vida y a los bienes de los demás, a la honestidad, a la paz y el amor; para derrotar la mentira y la avaricia, el egoísmo y la violencia. Imitemos el ejemplo de los patricios, unámonos para levantar esta nación con esfuerzo y trabajo denodado a favor de la presente y futuras generaciones», proclamó el obispo Luis Reyes durante una rueda de prensa en el Pabellón de la Fama del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
En un documento dado a conocer a la prensa nacional los pastores demadaron:
⦁ Solución a los altos costos de los artículos de primera necesidad, cuyos precios son inalcanzables para la mayoría de la población. Llamamos al gobierno de turno a ir en auxilio de los pobres.
⦁ Que los diversos factores que incentivan la criminalidad social y la delincuencia común desbordada, sean combatidas con políticas públicas efectivas.
⦁ Afianzar la lucha contra la violencia intrafamiliar y el feminicidio, implementando políticas sociales bien enfocadas, desde el ámbito familiar, a fin de evitar tales ocurrencias de dolor para las familias y comunidades.
⦁ Articular políticas públicas en favor de envejecientes, discapacitados, enfermos, niños de las calles, madres solteras, viudas, huérfanos e internos en las cárceles del país.
⦁ Agilizar el proyecto de reforma policial a fin de tener un cuerpo del orden profesionalizado, eficiente, justo y amigo de las comunidades.
⦁ Abogamos por la inmediata aprobación del código procesal penal, sin las tres causales del aborto.
⦁ Que el Instituto de Tránsito Terrestre (INTRAN) tome control del tránsito aplicando la Ley No 6317 de tránsito de manera justa, a fin de que los conductores del parque vehicular del país, se desplacen con respeto a la ley y el orden.
⦁ Abogamos por una justa distribución de las riquezas en la población, después de más de 25 años de crecimiento económico.
⦁ Profundizar en la lucha contra el narcotráfico, consumo de drogas ilegales y abusos de fármacos, cuyas actividades generan violencia, muerte y dolor en las familias y la sociedad.
⦁ Llamamos a la revisión y modificación de la ley de hidrocarburos con el consenso de diversos sectores de la sociedad civil, a fin de que el manejo de su aplicación sea justo para la población.
⦁ Continuar con el sometimiento a la justicia de involucrados en presuntos casos de corrupción, con transparencia y sin cháchara politiquera. Que el Ministerio Público sustancie los expedientes contra los imputados para que tengan fortalezas en los tribunales.
⦁ Que la Dirección General de Migración cumpla con su responsabilidad de aplicar la Ley 285-04 sobre migración, a los extranjeros indocumentados que residen en el país.
Indicaron que Dios ama la República Dominicana y exhortaron a volver a él a través del Señor Jesucristo, quien murió y resucitó para perdón de los pecados de la humanidad y esperanza de vida eterna. Pidieron abrir los corazones y Dios dará una nueva perspectiva en la vida.
«Que Dios bendiga y sostenga la República Dominicana y tenga misericordia de nosotros», concluyeron.
Acompañaron al obispo Luis Reyes, los pastores César Féliz Ramírez, supervisor nacional; Misael de los Santos, vicepresidente; Víctor Agüero, invitado internacional, entre otros pastores y líderes de la Asociación de Iglesias Jesucristo Fuente de Amor.
