Con toda seguridad cada uno de nosotros conoce una o varias personas que antes eran cristianos fieles en sus iglesias, y ahora por algún motivo ya no se congregan, ya no han seguido caminando en el camino del Señor, sino que han vuelto a la vida mundana y ahora no quieren nada con la iglesia ni con los caminos de Dios.
A estas personas la palabra de Dios las llama: OVEJAS DESCARRIADAS.
La palabra «DESCARRIAR», significa SALIRSE DEL CAMINO RECTO O CORRECTO, ya sea en un sentido físico o figurado.
En su uso más literal, «descarriado» se refiere a algo o alguien que se ha desviado del camino o la ruta prevista. Por ejemplo, un animal que se ha separado de su rebaño o un tren que se ha salido de las vías puede ser descrito como descarriado.
En el sentido espiritual «descarriado» a menudo se refiere a ALGUIEN QUE SE HA APARTADO DEL CAMINO DE DIOS. En el contexto cristiano, podría referirse a alguien que ha dejado de vivir según los principios cristianos.
¿CUÁL PUEDE SER LA CAUSA O EL MOTIVO POR EL CUAL HAY TANTAS OVEJAS DESCARRIADAS? veamos la respuesta a esta pregunta por medio de la palabra de Dios
I) POR LOS PASTORES QUE NO APACIENTAN A LAS OVEJAS DEL REBAÑO
(EZEQUIEL 34:1-6) Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 2 Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños? 3 Coméis la grosura, y os vestís de la lana; la engordada degollado, mas no apacentar a las ovejas. 4 No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia. 5 Y andan errantes por falta de pastor, y son presa de todas las fieras del campo, y se han dispersado. 6 Anduvieron perdidas mis ovejas por todos los montes, y en todo collado alto; y en toda la faz de la tierra fueron esparcidas mis ovejas, y no hubo quien las buscase, ni quien preguntase por ellas.
Tenemos que comprender que la principal labor de un pastor en las congregaciones tiene que ser APACENTAR A LAS OVEJAS DEL SEÑOR (Vs 2-3) Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños? 3 Coméis la grosura, y os vestís de la lana; la engordada degollado, mas no apacentar a las ovejas.
La palabra APACENTAR significa «DAR DE COMER» O «ALIMENTAR» es decir que los pastores tienen la responsabilidad y la obligación delante de Dios de apacentar a su congregación, proporcionando enseñanza y orientación espiritual.
Lastimosamente muchas ovejas en las congregaciones NO SON APACENTARÁS pues lastimosamente sus pastores NO PREPARAN buena palabra para las ovejas que el Señor les ha encomendado para cuidar, solamente se dedican a contar anécdotas, historias, chistes, etc. y las ovejas no crecen espiritualmente, sino que se debilitan, se vuelven cristianos faltos de fe, pues la fe viene por OÍR LA PALABRA DE DIOS no por oír charlatanerias (Romanos 10:17) Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.
Nuestro Dios quiere que sus ovejas sean alimentadas con PASTOS SUCULENTOS (Ezequiel 34:14) En buenos pastos las apacentará, y en los altos montes de Israel estará su aprisco; allí dormirán en buen redil, y en pastos suculentos serán apacentadas sobre los montes de Israel.
Es decir, una palabra que alimente, que edifique, que nos confronte, que nos motive a cambiar nuestra vida para agradar a Dios y que nos enseñe para conocer más de nuestro Dios.
Pero también la palabra de Dios nos dice que muchas ovejas se vuelven descarriadas porque los pastores las han tratado con dureza (Vs 4) No fortaleciste las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia, A muchos pastores se les ha olvidado que las ovejas no son de su propiedad, sino que son del Señor, y están para cuidar del rebaño no para enseñorearse de ellas con menosprecios o con prepotencia, pues el único ha dado su vida por sus ovejas es nuestro Señor Jesucristo, por eso somos ovejas de su rebaño, pues él ha dado su vida por nosotros (Juan 10:11) Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.
II) POR LAS OVEJAS QUE LAS APARTAN DEL REBAÑO CON SUS MALAS ACTITUDES
(EZEQUIEL 34:20-21) Por tanto, así les dice Jehová el Señor: He aquí yo, yo juzgaré entre la oveja engordada y la oveja flaca, 21 por cuanto empujasteis con el costado y con el hombro, y acordasteis con vuestros cuernos a todas las débiles, hasta que las echasteis y las dispensasteis.
Es duro reconocer que muchas personas se abandonan el rebaño del Señor por causa de otros cristianos que con sus actitudes de menosprecio, con sus actitudes de rechazo, por sus críticas, las han desanimado de seguir en el camino de Dios y prácticamente las han echado de las iglesias y las han dispersado por causa de sus actitudes negativas.
A muchas ovejas del rebaño del Señor se les ha olvidado que la iglesia no solamente tiene que ser una comunidad de fe sino UNA COMUNIDAD DE AMOR como nos lo dice la palabra del Señor:
1 Pedro 1:22 Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro;
1 Juan 3:10 En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios.
III) PORQUE MUCHAS DE ELLAS SON OVEJAS QUE TIENEN UN CORAZÓN LLENO DE SOBERBIA
(1 Pedro 5:5) Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, Y da gracia a los humildes.
En el capítulo 5 de la primera carta de Pedro el apóstol está dando enseñanzas y recomendaciones para los pastores o ancianos y para las congregaciones de esos pastores, y encontramos estas palabras: “Y TODOS, SUMISOS UNOS A OTROS, REVESTÍOS DE HUMILDAD, PORQUE: DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS”
El Señor por medio del apóstol Pedro llama a todos los creyentes a someterse mutuamente, pero esta sumisión no es una señal de debilidad, sino UNA MANIFESTACIÓN DE AMOR Y RESPETO MUTUO en la comunidad cristiana, esto es necesario para mantener la unidad y fomenta la armonía y el servicio desinteresado, reflejando el ejemplo de Cristo.
En el rebaño del Señor es donde debemos aprender los valores cristianos de la obediencia, la humildad, el perdón, etc, Pero lastimosamente muchos cristianos aún mantienen un corazón lleno de soberbia, y reaccionan con ALTANERÍA Y PREPOTENCIA..
Y son estos cristianos con un corazón lleno de soberbia y altanería que se vuelven ovejas descarriadas pues PREFIEREN APARTARSE DEL REBAÑO QUE SER HUMILDES, prefieren apartarse y alejarse que ser someterse a las normas de la iglesia o a las autoridades que el Señor ha establecido en sus rebaños.
Y lastimosamente no reconocen que la soberbia lo único que traerá a sus vidas es quebrantamiento y dolor (Levítico 26:19) Y quebrantaré la soberbia de vuestro orgullo, y haré vuestro cielo como hierro, y vuestra tierra como bronce.
ENTONCES ¿QUÉ TENEMOS QUE HACER PARA YA NO SER OVEJAS DESCARRIADAS?
Cualquiera que sea la causa por la cual nos hemos alejado, cualquiera que sea la causa por las que nos hemos descarriado de los caminos del Señor, ya sea porque hemos sido lastimado por los pastores de los rebaños, o porque hemos sido lastimados por otras ovejas o porque nuestro corazón ha estado lleno de soberbia, LA RESPUESTA ES LA MISMA: TENEMOS QUE VOLVER PARA SER SANADOS Y RESTAURADOS POR NUESTRO DIOS (Ezequiel 34:14-16) En buenos pastos las apacentaré, y en los altos montes de Israel estará su aprisco; allí dormirán en buen redil, y en pastos suculentos serán apacentadas sobre los montes de Israel. 15 Yo apacentar mis ovejas, y yo les daré aprisco, dice Jehová el Señor. 16 Yo buscaré la perdida, y haré volver al redil la descarriada; vendaré la perniquebrada, y fortaleceré la débil; mas a la engordada y a la fuerte destruiré; las apacentará con justicia.
Ya no sigas siendo oveja descarriada, vuelve hoy al rebaño de nuestro Dios, y nosotros no nos convirtamos en ovejas descarriadas, seamos humildes y tengamos un corazón lleno de amor para con nuestro buen pastor que dio su vida por nosotros: NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.
