Todos andamos en constantes peligros, siempre, y cada segundo que pasa
es peor. Los delincuentes no miran a sus víctimas a la cara cuando les
van a disparar, por lo que no saben a quién le disparan.
Las amenazas nos acechan, pero siempre contamos con alguien que nos
cuida la espalda, nuestros ángeles. Ellos siempre aparecen de la nada,
nos defienden a garra y espada cuando estamos en apuros. Siempre
creemos que podemos resolver nuestros problemas cuando se nos
presentan, sin embargo, nos damos cuenta que a veces no podemos solos.
Muchos se preguntarán: y para ella ¿qué es un ángel?. La Biblia habla
de que Dios envió a sus discípulos a hacer obras de bien. Esos
discípulos o ángeles pueden ser cualquier persona tocada y enviada por
el Señor para que haga el bien a los que lo necesitan.
obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviéramos en
ellas”, Efesios 2:10.[/quote_box_center] He sido testigo de la buena obra del Señor y cuánto se ha esmerado en
seleccionar a sus ángeles para que me protejan cuando estoy en
peligro.
Esos que sin conocerte te ofrecen toda tu protección y solo atinan a
decirte, márchate tranquila, déjame eso a mí que yo resuelvo, sin
preguntarte de dónde vienes ni a dónde vas. A esos gracias por tener
la bendición de ser elegidos por Dios para que salven a su tribu.