El texto que tenemos ante nosotros hoy es uno de mis textos favoritos en la Biblia. Es una historia que toma lugar en cuatro días. Es una historia de dos culturas: (romanos/gentiles y judíos). Una historia que rompe barreras culturales. Es la historia de un Dios que ama a todos los pueblos.
Este capítulo cuenta la historia de un punto de inflexión fundamental en la historia de la iglesia primitiva. Sin embargo, es una historia que se repite en todas las ciudades del mundo.
En este texto, tenemos dos historias. Una es la historia de Cornelio, un soldado romano. La segunda historia es más extensa, y es la historia, que se encuentra en los versículos 9-48. Uno de los eventos importantes en este capítulo es el hecho de que Dios penetró en la vida cada vez más cómoda de Pedro para empujarlo más allá de los límites de Israel, en la ciudad romana de Cesárea … directamente en la casa de un gentil.
Cada uno de nosotros debemos de reconocer que Dios quiere actuar poderosamente a través de nuestras vidas débiles, o como dice Pablo, «Vasos de barros.» Dios quiere toda tu vida. Reconoce hoy que somos personas simples, común, ordinarias, pero Dios quiere hacer cosas extraordinarias en nuestras vidas.
Cornelio era un líder militar que comandaba entre 300 y 600 hombres. Era un hombre de influencia que vivía en una ciudad influyente. Un soldado gentil que sirve en una ciudad predominantemente gentil. Pero realmente Cornelio era un hombre común, que debido a su obediencia a Dios; Dios usó a Cornelio de una manera extraordinaria.
Moisés era un hombre común. De hecho, Moisés mató a un hombre egipcio y luego huyó del faraón (Éxodo 2: 11-15). Mientras Moisés estaba en el desierto, Dios le dijo que le hablara a la roca prometiéndole que el agua fluiría nuevamente en el desierto. Moisés en cambio golpeó la roca, y como resultado de esto, Dios le dijo a Moisés, que no entrarías en la tierra prometida. Sin embargo, Moisés, un hombre común, fue usado por Dios de una manera extraordinaria para sacar a 600,000 personas del cautiverio.
Josué era una persona común pero debido a su compromiso con su Dios; Dios usó a Josué de una manera extraordinaria para guiar a su pueblo a la tierra prometida.
Pablo era una persona común. Le pidió cartas al sumo sacerdote para la sinagoga de Damasco, de modo que si encontraba algún hombre o mujer que siguiera a Cristo, podría tomarlos prisioneros. Pero en el camino a Damasco, la vida de Pablo fue transformada por Jesús y por su compromiso con Cristo; Pablo fue usado de una manera extraordinaria. Sabemos con certeza que escribió 13 cartas de las 27 en el Nuevo Testamento. Sabemos que comenzó muchas iglesias y fue un excelente estratega. Dios usó al hombre ordinario Pablo de una manera extraordinaria.
¿Quién eres tú? Solo tu puedes responder a esta pregunta. La vida es desordenada, problemática, a veces ¿no? Puede estar hoy muy confundido, frustrado, te has rendido en la vida, en el matrimonio, como padre, en su caminar cristiano … Dios está en el negocio de transformar vidas desordenadas. No te rindas, sino ríndete totalmente (todo) a Cristo. Dios puede tomar personas comunes y hacer cosas extraordinarias. Nunca es tarde para correr a Dios.