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No han fallado ni desobedecido. A veces la espera es parte del propósito de Dios

Te cansaste por lo largo de tu camino, pero no dijiste: «No hay esperanza». Hallaste nuevas fuerzas, por eso no desfallecemos. Isaías 57:10

Han estado pedaleando, corriendo y pisando agua durante años tratando de llegar al lugar y la temporada en que finalmente se asentarán y recuperarán el aliento. Muchos se han sentido cansados y afligidos porque el camino ha sido tan largo y la batalla para llegar allí ha sido tan prolongada y demorada. Y en este momento, la alegría y la pasión con las que comenzaron se sienten evaporadas, pero hoy necesitan algunos recordatorios;

El camino hacia adelante NO está estancado
No se han quedado sin opciones
No perdieron su tiempo
No malinterpretaron la voz de Dios
No fallaron ni desobedecieron
No fueron abandonados o pasados por alto

Simplemente no son los que sostienen el mapa. Él sostiene el mapa. Ustedes no sostienen el reloj, Él lo hace. El sabe el momento exacto en que se establecerán y habrá perfección en ese momento. EL ES FIEL, ÉL ES FIEL.

Lo que han experimentado en los últimos dos años no es solo una batalla contra su viaje de fe sino la asignación de muerte para acabar con ustedes en todos los frentes para que se rindan y cedan. El enemigo ha tratado de golpear su billetera, su paz, su matrimonio, sus relaciones, su salud mental y su claridad, porque sabe que cuando se establezcan serán como una estaca justa en el suelo.

El enemigo ha tratado de evitar la conexión, la comunidad y el apoyo, aislándolos y acusándolos con miedos y dudas para que pierdan la fe valiente con la que salieron. Lo que han enfrentado es el intento del enemigo de evitar que entren en la gran promesa porque es más que solo mudarse a una ubicación geográfica: se trata del legado familiar y el avivamiento.

Esta es la configuración para sus hijos y el destino sobre ellos. Este es el movimiento de fe que desata los nudos que fueron impuestos en su línea familiar y activa el propósito más allá de lo que pueden ver. Pronto la temporada del carrusel de piezas en movimiento, familias, roles y asignaciones se detendrá y encontrarán DESCANSO. Pronto podrán finalmente dejar sus maletas y finalmente sentirse en CASA. Pronto entrarán por la puerta principal de los hogares físicos largamente esperados que Dios ha preparado para ustedes. Pronto encontrarán a su gente y tribu a la que renunciaron a encontrar alguna vez en su vida.

Dios abrirá caminos alrededor de los obstáculos que enfrentan y las lagunas por las que pasarán. Él anulará los informes negativos y abrirá las puertas y los puertos cerrados. Él les mostrará que EL ES FIEL y les dará señales de Su bondad y favor en las próximas semanas, de que Él sigue siendo el capitán de este esfuerzo en la tierra. ¡Él todavía es el ABRE BRECHA al frente de esta migración!

Para aquellos que han naufragado al dar un paso en la fe, ¿es ese el final de su historia? ¿Dios robó, mató y destruyó, o fue el enemigo? ¿Él tiene la última palabra en el viaje de su familia? Vuelvan a tomar su espada, enfréntalo y encomienden su futuro al Señor, no al hombre, a una institución o ideal. Su futuro es del Señor y Él que es fiel los librará. Recuperen su buque de guerra que los IMPULSA, incluso cuando la marea parece moverse en su contra. Recuperen su lucha cuando sea más fácil quedarse en la cama y aceptar el funeral de un sueño. ¡NO HA TERMINADO! SOLAMENTE ESTÁ COMENZANDO FAMILIAS PIONERAS. (Una palabra de Nate Johnston)

Hebreos 11:8-11 TPT “La fe motivó a Abraham a obedecer el llamado de Dios y dejar lo familiar para descubrir el territorio que estaba destinado a heredar de Dios. Así que se fue solo con una promesa y sin siquiera saber de antemano a dónde iba, Abraham dio un paso de fe. Vivió por fe como inmigrante en su tierra prometida como si perteneciera a otra persona. Viajó por la tierra viviendo en tiendas con Isaac y Jacob, quienes estaban convencidos de que también eran coherederos de la misma promesa. Sus ojos de fe estaban puestos en la ciudad con cimientos inconmovibles, cuyo arquitecto y constructor es Dios mismo. La fe de Sara abrazó el poder milagroso de Dios para concebir a pesar de que era estéril y había pasado la edad de tener hijos, porque la autoridad de su fe descansaba en Aquel que hizo la promesa, y ella aprovechó su fidelidad”

Con amor y oraciones,

Fuente:
Magie de Cano

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