HEBREOS 10:25 no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.
Estamos llegando a un nuevo mes, ya han pasado dos meses del año 2023 y este tiempo es cuando el ánimo, la emoción, las buenas intenciones y los buenos propósitos de año nuevo van poco a poco decayendo, y lastimosamente uno de estos buenos propósitos que va decayendo es el de CONGREGARNOS CONSTANTEMENTE DURANTE TODO EL AÑO.
Muchos cristianos debido a los afanes del trabajo, a los quehaceres del hogar, a las exigencias de los estudios, por desánimo o por indiferencia poco a poco van dejando vacíos sus asientos en la casa de Dios.
Lastimosamente muchos de nosotros no comprendemos la importancia que tiene en la vida de todo cristiano el no dejar de congregarse, por eso nuestro Dios nos dice claramente en su palabra: NO DEJANDO DE CONGREGARNOS COMO ALGUNOS TIENEN POR COSTUMBRE.
ES POR ESO QUE POR MEDIO DE LA PALABRA DE DIOS PODEMOS COMPRENDER PORQUÉ ES TAN IMPORTANTE CONGREGARNOS CON CONSTANCIA EN NUESTRA IGLESIA:
I) NOS CONGREGAMOS PRIMERAMENTE POR OBEDIENCIA Y AGRADECIMIENTO A NUESTRO DE DIOS (HEBREOS 10:25) no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.
Tenemos que comprender que congregarnos para adorar al Señor y escuchar su palabra, no es algo opcional en la vida de un cristiano, es algo que tenemos que hacer en obediencia a la palabra de Dios Y EN AGRADECIMIENTO A NUESTRO DIOS POR SUS MARAVILLAS EN NUESTRA VIDA.
TENEMOS QUE COMPRENDER UNA VERDAD INCÓMODA PARA MUCHOS CRISTIANOS: No querer congregarse significa ser mal agradecido con nuestro Dios, no podemos ser indiferentes con el Señor cuando él siempre nos ha ayudado y nos ha bendecido, aun sin merecerlo nosotros.
Al igual que bautizarnos o poner nuestra relación de pareja bajo la bendición matrimonial de nuestro Dios es un mandato Bíblico, que nos podemos cuestionar sino obedecer, también congregarnos es algo que no tiene opción, es decir, TENEMOS QUE CONGREGARNOS.
Podemos darnos cuenta que todos aquellos cristianos que se oponen a congregarse con constancia son cristianos que en su mayoría son cristianos carnales, resentidos con alguien de su iglesia, o simplemente cristianos cómodos que no quieren hacer el más mínimo esfuerzo para buscar al Señor, pero si no fuera tan importante en la vida de todo cristiano congregarse no veríamos a tantas familias frías espiritualmente y volviendo a los caminos del mundo cuando han abandonado sus iglesias, cuando poco a poco van dejando de congregarse. Tenemos que saber que EL PRIMER PASO EN EL CAMINO DEL ENFRIAMIENTO ESPIRITUAL ES DEJAR DE CONGREGARNOS.
II) NOS CONGREGAMOS PORQUE NECESITAMOS SER FORTALECIDOS Y EDIFICADOS POR MEDIO DE LA PALABRA DE DIOS (HECHOS 20:32) Y ahora, hermanos, os encomiendo a Dios, y a la palabra de su gracia, que tiene poder para sobreedificaros y daros herencia con todos los santificados.
El texto nos declara una verdad espiritual muy importante: LA PALABRA DE DIOS TIENE PODER PARA EDIFICARNOS, y ¿que significa edificarnos? SIGNIFICA FORTALECERNOS, levantar los muros de nuestra fe, levantar las defensas espirituales en contra de los ataques del enemigo.
Cuando nos congregamos para escuchar la palabra somos fortalecidos en el Señor y en poder de SU FUERZA para poder hacer frente a las diferentes batallas de la vida (Efesios 6:10) Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.
Podemos decir entonces que un cristiano que deja de congregarse es un critiano que poco a poco se irá debilitando, pues estará peleando las batallas de la vida EN SU FUERZA Y NO EN LA FUERZA DE DIOS.
Lastimosamente muchos cristianos solamente se congregan cuando estan en dificultades, cuando hay problemas en la vida, cuando tenemos conflictos en la familia, queremos levantar las fortalezas cuando estamos siendo atacados, cuando estamos en medio de la batalla, pero un cristiano sabio reconoce que LAS FORTALEZAS SE TIENEN QUE LEVANTAR DURANTE LA BATALLA SINO EN LOS TIEMPOS DE PAZ Y TRANQUILIDAD (2 Crónicas 14:6-7) Y edificó ciudades fortificadas en Judá, por cuanto había paz en la tierra, y no había guerra contra él en aquellos tiempos; porque Jehová le había dado paz. 7 Dijo, por tanto, a Judá: Edifiquemos estas ciudades, y cerquémoslas de muros con torres, puertas y barras, ya que la tierra es nuestra; porque hemos buscado a Jehová nuestro Dios; le hemos buscado, y él nos ha dado paz por todas partes. Edificaron, pues, y fueron prosperados.
III) NOS CONGREGAMOS POR AMOR A NUESTRAS FUTURAS GENERACIONES (JOSUÉ 2:8-13) Pero murió Josué hijo de Nun, siervo de Jehová, siendo de ciento diez años. 9 Y lo sepultaron en su heredad en Timnat-sera, en el monte de Efraín, al norte del monte de Gaas. 10 Y toda aquella generación también fue reunida a sus padres. Y se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra que él había hecho por Israel.11 Después los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y sirvieron a los baales. 12 Dejaron a Jehová el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y se fueron tras otros dioses, los dioses de los pueblos que estaban en sus alrededores, a los cuales adoraron; y provocaron a ira a Jehová. 13 Y dejaron a Jehová, y adoraron a Baal y a Astarot.
Verdaderamente son muy duras y tristes las palabras de los versículos 10 y 11: “..Y se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra que él había hecho por Israel.11 Después los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y sirvieron a los baales…”
Como padres tenemos que comprender que dejar de congregarnos significa alejar a nuestras generaciones de los caminos de Dios.
Si nuestras generaciones no conocen al Señor y su palabra ¿que van a conocer? ¿de que estará llena su mente y su corazón?
Como padres cristianos debemos anhelar que nuestros hijos e hijas sean una generación que conozcan del Señor, que caminen en sus caminos, que se aparten del mal y que vivan vidas agradables a nuestro Dios para que sean bendecidos.
IV) NOS CONGREGAMOS PORQUE NECESITAMOS VERDADERAS RESPUESTAS Y SOLUCIONES A LOS PROBLEMAS DE NUESTRA VIDA (SALMOS 119:130) La exposición de tus palabras alumbra; Hace entender a los simples.
Cuando nos sentamos a escuchar la palabra de Dios que se nos predica en la iglesia, el Señor está iluminando nuestra mente y nuestro corazón, nos está dando sabiduría para saber enfrentar las diferentes dificultades de la vida.
La sabiduría que Dios nos da por medio de sus palabras significa tener el conocimiento y la comprensión para PODER DECIDIR RECTAMENTE.
En los problemas y dificultades que se nos presentan en la vida siempre vamos a tener DIFERENTES OPCIONES Y ALTERNATIVAS PARA RESOLVERLAS Y DIFERENTES OPINIONES DE LAS PERSONAS, y como lo dice la palabra de Dios tener todo eso es bueno cuando estamos enfrentando las batallas de la vida (Proverbios 24:6) Porque con ingenio harás la guerra, Y en la multitud de consejeros está la victoria.
PERO ES LA SABIDURÍA QUE DIOS NOS DA POR MEDIO DE SU PALABRA LA QUE NOS PERMITE DECIDIR CUÁL ES LA MEJOR ESTRATEGIA Y CUÁL ES LA OPINIÓN QUE DEBEMOS TOMAR EN CUENTA.
CONCLUSIÓN: Por todos estos motivos y por muchos otros más que podemos encontrar en su palabra es que vale la pena NO DEJAR DE CONGREGARNOS, vale la pena seguir PERSEVERANDO en los caminos del Señor, vale la pena seguir haciendo lo bueno, lo que agrada a Dios sin cansarnos, porque a su tiempo vamos a cosechar preciosas bendiciones para nuestra vida (Gálatas 6:9) No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.