En el mensaje del profeta Isaías y en las palabras de Jesucristo, encontramos un llamado a vivir en armonía con los principios divinos de amor, paz y justicia. Isaías nos invita a aceptar el Concordato del Príncipe de Paz, que es Jesucristo, y a rechazar todo aquello que va en contra de los designios de Dios. ISAÍAS 9-6-
Así como en el nacimiento de un niño se celebra la unidad y armonía familiar, la llegada de Jesucristo trajo consigo el regalo de la gracia y la paz para toda la humanidad. En el Sermón del Monte, Jesús estableció los principios de una vida bendecida por Dios, una vida centrada en la humildad, la misericordia y la búsqueda de la justicia.
Hoy, más que nunca, necesitamos elevar la bandera de la fe en el poder de Cristo y unirnos en el Concordato del Príncipe de Paz. Debemos vivir de acuerdo con los valores del Reino de Dios, siendo instrumentos de paz, amor y reconciliación en un mundo lleno de división y conflicto.
Que nuestras vidas reflejen la luz y el amor de Cristo, que seamos portadores de esperanza y consuelo para aquellos que sufren, y que nuestra fe nos impulse a trabajar por un mundo más justo y compasivo.
Que en medio de las pruebas y dificultades, recordemos las palabras de Isaías y el ejemplo de Jesús, y encontremos en ellos la fortaleza y la inspiración para seguir adelante con confianza y esperanza. Que el Concordato del Príncipe de Paz sea nuestra guía y nuestra fuerza en medio de las tormentas de la vida.