Entonces Jehová dijo a Abraham: ¿Por qué se ha reído Sara diciendo: Será cierto que he de dar a luz siendo ya vieja? ¿Hay para Dios alguna cosa difícil? Al tiempo señalado volveré a ti, y según el tiempo de la vida, Sara tendrá un hijo. Génesis 18:13
Dios realiza a Sara y Abraham la extraordinaria promesa de que tendrían un hijo. Ante la avanzada edad de ambos y Sara fiada en su prudencia se rió al creer imposible que tal cosa pasaría. Ante aquella gran muestra de desconfianza y poca fe, el Señor en su misericordia y sentido de cuidado, optó por responder con su amor incondicional diciendo: «¿Hay para Dios alguna cosa difícil?»
De esa manera, recordó a Sara que su palabra es cumplida mediante su poder. No dependía de ella, ni de su duda, sino de la grandeza del Señor y su capacidad para determinar y cambiar la naturaleza de las cosas. Al leer una promesa de nuestro Dios en su palabra, tengamos por seguro que esta será cumplida, porque Él es constante en su voluntad y perfecto en sus decisiones.
Cuando la duda haga débil tu fe recuerda que nada es imposible para Dios. Podemos contar con sus promesas y confíar en su obra; una obra de amor, una obra de gozo, una obra de paz para aquellos que le sirven y aceptan con gratitud su Voluntad, ¡Aleluyaaaa!…. Jehová te bendice en amor y gracia para este día, Amén.
