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¿Me voy, o me quedo? El sueño Americano y la Biblia

Desde hace ya varias décadas los Estados Unidos ha sido el sueño de millones de personas de Latinoamérica que anhelan cambiar su estilo de vida, el de ellos y el de sus familias.PROVERBIOS 14-12-

En los ultimo días hemos visto como miles de personas van caminando en largas caravanas con la ilusión de poder dejar atrás los problemas de sus países y comenzar una nueva vida en los Estados Unidos de América.

El tema de la emigración es muy complejo debido a las diversas causas por las cuales las personas toman la decisión de abandonar su país y aventurarse en busca de una nueva vida y millones de personas

En el caso de mi país El Salvador actualmente en los Estados Unidos según los reportes oficiales hay una población de dos millones y medio de salvadoreños que lo han dejado todo para aventurarse legal o ilegalmente para tratar de alcanzar a como dé lugar el tan ansiado sueño americano.

Definitivamente los Estados Unidos es un sueño muy atractivo porque todos pensamos que es el país de las oportunidades, que es el lugar para alcanzar un mejor nivel de vida, ya que al comparar los ingresos diarios y mensuales de nuestros países latinoamericanos con los ingresos que se pueden ganar en los Estados Unidos vemos que hay una diferencia muy grande.

Es claro que los ingresos que se pueden alcanzar, si se encuentra un trabajo en los Estados Unidos, pueden ser muy superiores a los que la mayoría de los trabajadores reciben en nuestros países, y es por eso que miles de personas, incluyendo cristianos, ponen en ese país su esperanza de superación.

De hecho, según los datos oficiales los salvadoreños en los Estados Unidos enviaron a sus familiares más de 5 mil millones de dólares en el año 2017.
Es por eso por lo que a simple vista emigrar a los estados unidos es, como lo dice el versículo con el cual hemos comenzado, un camino que al hombre le parece derecho, le parece bueno, le parece que es la solución a todos sus problemas.

Posiblemente en este momento algunos hermanos y hermanas que escuchen o lean este mensaje tengan ya en su mente el plan de abandonar todo en su país y viajar como sea para alcanzar el sueño americano, pero veamos que nos dice el Señor en su palabra:

DIOS SI QUIERE QUE SEAMOS PROSPERADOS, PERO NO A COSTA DE TODO (3 JUAN VS 2)

Efectivamente el Señor nos dice que él quiere que nosotros seamos prosperados en todas las cosas, en este punto emigrar a los Estados Unidos parecería que es la voluntad de Dios pues económicamente seremos prosperados.

Pero la segunda parte del versículo nos habla de un punto muy importante que el famoso sueño americano no siempre puede cumplir: y que tengas salud, así como prospera tu alma…

No podemos negar que el sueño americano ha traído prosperidad a muchísimas familias en El Salvador y en otros países de América latina, pero lastimosamente también ha enfermado tremendamente nuestra sociedad, pues nuestra alma se ha llenado de materialismo, de haraganería, de abandono, de infidelidad matrimonial, de rencor contra los padres, y uno de esos síntomas de enfermedad son las pandillas.
Veamos bíblicamente algunas respuestas a la pregunta que muchos tienen esta noche: ¿me voy o no me voy?

I) PREGÚNTATE ESTA NOCHE: ¿ESTAS DISPUESTO A IRTE QUIZÁS PARA NUNCA MAS VOLVER A TU TIERRA Y A TU FAMILIA? (JEREMÍAS 22:10)

Este versículo nos expresa muy bien la realidad que viven miles de personas que han emigrado para alcanzar el sueño americano…. nunca más volvieron.

Algunos nunca volvieron porque murieron en el intento de llegar, otros porque nunca pudieron legalizar su estatus migratorio y no pueden volver, y otros porque cuando llegaron comenzaron una nueva vida, formaron una nueva familia y se olvidaron de sus padres, de los cónyuges y sus hijos que dejaron en su país, y olvidaron todas las promesas que les hicieron antes de irse.

¿Estás dispuesto a ser para tus hijos solamente una voz a través del teléfono? ¿estás dispuesto a solo darte cuenta de que tus padres fallecieron, pero no puedes venir por más que lo anheles con todo tu corazón??

¿Estás dispuesto o dispuesta que el amor de tu pareja poco a poco se vaya enfriando para solamente ser para ella o para él una persona que le envía remesas cada mes?

Cuantas personas viven lejos de su país y anhelan con todo el corazón volver, pero ya no se pueden despegar de su nuevo estilo de vida, de su nueva familia que allá han formado (Jeremías 22:27)y por mucho que anhelen con todo el corazón volver, no lo harán, tienes que saber que si te vas tu solo, difícilmente volverás.

II) COMPRENDAMOS QUE LOS BUENOS RESULTADOS NO SIEMPRE SIGNIFICA QUE ALGO SEA LA VOLUNTAD DE DIOS (NÚMEROS 20:7-12)

Dios le dio una orden a Moisés: háblale a la roca para que salga agua, pero Moisés no hizo como el Señor le dijo, sino que golpeo la roca, el resultado fue bueno pues salió mucha agua de la roca, el pueblo bebió el agua y pudo saciar su sed, pero lo que Moisés había hecho fue desagradable al señor.

Podemos ver que el Señor no evalúa la vida de una persona por los resultados de sus acciones, sino por la obediencia a su palabra, es decir que muchas personas que se fueron sin consultarle a Dios estan prosperando, estan teniendo una vida económicamente buena, pero no están agradando a Dios.

III) TENEMOS QUE COMPRENDER QUE NO ES LA VOLUNTAD DE DIOS QUE QUEBRANTEMOS LAS LEYES (MATEO 5:17-19)

Nuestro señor Jesucristo no vino a quebrantar la ley sino a cumplirla y nos dio ejemplo a cada uno de nosotros.

Tenemos que saber que tratar de entrar ilegalmente a un país es un delito, estaríamos quebrantando la ley de ese país y tenemos que preguntarnos ¿Sera la voluntad de Dios que nosotros como cristianos infrinjamos las leyes?

Por medio de este mensaje no quiero decirte no viajes, no te vayas, pues la decisión es tuya, pero sí es un llamado a reflexionar si estas tomando en cuenta la voluntad de Dios para tomar tu decisión de aventurarte a un viaje que puede ser sin retorno, de viajar solo y dejar atrás tu familia quizás para nunca más verlos.

¿No será lo mejor hacer las cosas legalmente y poner nuestro anhelo de emigrar a otro país en las manos de Dios y que el nos lleve como familia a otro lugar, a un nuevo comienzo bajo su voluntad, con su respaldo y con su bendición?

IV) COMPRENDE QUE DE NADA SIRVE UN CAMBIO GEOGRÁFICO SI NO HAY UN CAMBIO PRIMERO EN EL CORAZÓN (PROVERBIOS 15:15)

Si tenemos un corazón afligido, es decir un corazón que no pone su confianza en el Señor podemos estar en El Salvador, en los Estados Unidos, en Australia, y siempre viviremos días difíciles, no podremos ser felices.

Tenemos que reconocer que la felicidad, el gozo y la paz de nuestra vida no está en un país o en un lugar sino en una persona: ¡en Jesús! Él está contigo ahí en tu país, solo tienes que creer.

Fuente:
Pastor Oscar Flores | El Salvador

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