Todo lo que tengo viene de Él, si soy una persona de oración, viene de Dios, si tengo dones es porque El me los dio, si rechazo algo que no le agrada es por su fuerza no la mía. Lo único que es nuestro es el pecado que es algo que no solo practico, si no es algo que yo soy.
La salvación es de Jehová, hallo en Dios todo lo que necesito. Su palabra es como maná, alimento.
¿Qué es ese maná sino Jesucristo mismo, cuyo cuerpo y sangre como y bebo? ¿Estoy continuamente recibiendo nuevas fuerzas? ¿De dónde consigo el poder? Mi fortaleza viene del cielo. Sin Jesús nada puedo hacer. Como un pámpano no puede llevar fruto si no estuviere en la vid, tampoco yo puedo hacerlo si no permanezco en él. Que lo que Jonás aprendió en las profundidades del mar lo aprendas hoy en la superficie. La salvación pertenece a Jehová. ¡Dios te bendiga!
#Jonás2:10.