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Los enemigos de la iglesia

Filipenses 3:17-19 Hoy comenzamos un nuevo estudio Bíblico el cual está basado en los enemigos de la iglesia, es decir todo aquello que está siendo usado por el enemigo para frenar, para dividir, para afectar, para limitar el accionar de la iglesia de Cristo en este mundo.

Tenemos que reconocer que el principal enemigo de la iglesia de Cristo es Satanás:

Es como un ladrón que viene para hurtar, matar y destruir (Juan 10:10)

Es como un león que anda alrededor buscando a quien devorar (1 Pedro 5:8)

Tenemos que cuidarnos de sus asechanzas (Efesios 6.11) Asechanza: Engaño o artificio con el fin de perjudicar a alguien.

Vamos a reconocer cuáles son esas asechanzas, cuáles son esos engaños que el diablo usa para afectar la iglesia de Cristo, vamos a reconocer por medio de la palabra de Dios cuáles son esos enemigos que son usados por el enemigo para afectar de alguna forma la iglesia de Cristo y que se vuelva una iglesia infructuosa, es decir una iglesia que no pueda cumplir su propósito de ser SAL Y LUZ en este mundo.

PRIMER ENEMIGO DE LA IGLESIA: LAS FALSAS ENSEÑANZAS (2 PEDRO 2:1)

Este versículo nos llama a estar atentos y tener cuidado con los falsos maestros, pues estos falsos maestros introducen encubiertamente HEREJIAS DESTRUCTORAS dentro de la iglesia.

Definamos primeramente que es una HEREJÍA: es una enseñanza que se desvía de la verdadera revelación bíblica; es, en otras palabras, una falsa enseñanza.

Tenemos que tener mucho cuidado con los falsos maestros que introducen encubiertamente estas herejías porque pueden tener apariencia de ser verdaderos maestros, verdaderos pastores del evangelio de Cristo, tal como satanás se viste como ángel de luz (2 Corintios 11:13-15)

La palabra de Dios nos llama a no ser cristianos fluctuantes, a no dejarnos llevar de todo viento de doctrina (Efesios 4:14) sino que debemos perseverar y ser constantes en la doctrina de Cristo y de los apóstoles (2 Tesalonicenses 2:15)

Tenemos que ser cuidadoso porque muchos de esos falsos maestros los podremos escuchar por la radio o verlos por televisión o por internet, algunos los podemos escuchar desde los pulpitos de las iglesias, pero muchos de ellos también van de casa en casa y de puerta en puerta tratando de hablar a la gente y propagando sus mentiras, y ¿que nos dice la palabra de Dios sobre ellos? (2 Juan 9:9-11) NO DEBEMOS DEJARLOS ENTRAR EN NUESTRA CASA.

Veamos algunas de esas falsas enseñanzas o falsas doctrinas que son un verdadero enemigo de la iglesia de Cristo:

LA FALSA ENSEÑANZA DE NEGAR QUE LA BIBLIA ES LA UNICA AUTORIDAD DE FE, SINO QUE TAMBIEN SE NECESITAN OTROS ESCRITOS PARA CRECER EN FE Y COMPRENDER LA VOLUNTAD DE DIOS

Veamos nuestra declaración de fe como cristianos con respecto a la palabra de nuestro Dios: Creemos que las Sagradas Escrituras del Antiguo y Nuevo Testamentos son la Palabra de Dios inspirada, infalible, y autoritaria. (Mateo 5:18; 2 Timoteo 3:16-17). Por fe, sostenemos que la Biblia es inerrante en sus escritos originales, inspirada por Dios, y es la completa y final autoridad de la fe y la práctica.

Veamos la declaración de fe de la iglesia adventista con respecto a los escritos de Elena White: Reafirmamos nuestra convicción de que sus escritos son inspirados por Dios, verdaderamente centrados en Cristo, Nos comprometemos a estudiar los escritos de Elena de White sinceramente y con corazones dispuestos a seguir los consejos y las instrucciones que encontremos allí. Ya sea individualmente, en la familia, en grupos pequeños, en el aula o en la iglesia, el estudio combinado de la Biblia y los escritos de Elena de White provee una experiencia transformadora y que aumenta la fe.

La palabra de Dios nos declara que el crecimiento de nuestra fe viene por el oír LA PALABRA DE DIOS, no los escritos de una persona (Romanos 10:17)

Veamos los artículos de fe da la iglesia de Jesucristo de los últimos días, es decir los mormones Artículo #8: Creemos que la Biblia es la palabra de Dios hasta donde esté traducida correctamente; también creemos que el Libro de Mormón es la palabra de Dios.

¿Qué es el libro del mormón? En septiembre de 1823, José Smith recibió la visita de un mensajero celestial llamado Moroni, En septiembre de 1827, José recibió un mensaje, que estaba escrito sobre planchas de oro delgadas. José tradujo el libro al inglés por inspiración de Dios. El libro se llama: El Libro de Mormón: Otro Testamento de Jesucristo.

Veamos que dice la palabra de Dios sobre otro evangelio, aunque este evangelio viniera de un ángel (Gálatas 1:8-9)

LA FALSA ENSEÑANZA DE NEGAR LA DEIDAD DE CRISTO Y LA TRINIDAD DE DIOS.

Veamos lo que los Testigos de Jehová enseñan con respecto a nuestro Señor Jesucristo y sobre la Trinidad de Dios: Seguimos las enseñanzas y el ejemplo de Jesucristo, y le damos honra porque es nuestro Salvador y el Hijo de Dios, Sin embargo, la Biblia no enseña que Jesús sea el Dios todopoderoso ni apoya la doctrina de la Trinidad.

Primeramente, tenemos que reconocer que la salvación no viene por darle honra a Jesús, sino por creer en Jesús (Juan 6:47)

La palabra de Dios nos declara que Jesús es Dios (Tito 2:13)

Aunque en la Biblia no aparece la palabra Trinidad, pero si nos demuestra que nuestro Dios es un Dios trino, es decir un solo Dios manifestado en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo (Mateo 3:16-17 / 1 Juan 5:7)

LA NUEVA MODA DE DECRETAR, DECLARAR Y ARREBATAR

Tenemos que tener con este tipo de enseñanzas que son como “Modas espirituales” dentro de la iglesia de Cristo, y nosotros tenemos que tener cuidado de no caer en el mismo error de los atenienses (Hechos 17:18-21) de querer siempre algo nuevo, nueva revelación, nueva mover, etc.

Esta enseñanza viene de la teología o doctrina de la prosperidad, de la declaración de fe, en la cual se enseña que todo lo que declaremos, todo lo que decretemos Dios lo hará realidad si lo creemos.

Aunque esto es algo que todos quisiéramos que fuera una realidad, que todo lo que yo diga, decrete, suelte, declare, se realizara, tenemos que comprender una verdad espiritual: DIOS NO ES MI SIERVO, No es Dios quien tiene que hacer mi voluntad, sino que yo tengo que hacer SU voluntad.

Decretar significa: Decidir u ordenar algo, ¿puedo yo decidir lo que Dios tiene que hacer? ¿puedo yo ordenarle a Dios lo que tiene que hacer?

Veamos lo que si decreta y declara la palabra de Dios (1 Juan 5:14-15) Nuestras peticiones tienen que ir conforme a la voluntad de Dios.

Podemos ver la forma como actuaron nuestro Señor Jesucristo y el apóstol Pablo, en momentos de aflicción y angustia, podemos ver que no decretaron, que no declararon, sino que se sujetaron con obediencia y fe a la voluntad del Padre Celestial (Mateo 26:39 / 2 Corintios 12:7-9)

Fuente:
Pastor Oscar Flores | El Salvador

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