Los cerdos son animales muy útiles pues de ellos obtenemos alimento, pieles para usos médicos y cuero para usos industriales, pero a pesar de toda la utilidad que los cerdos tienen, siguen siendo animales que casi nadie de nosotros quisiéramos tener en nuestra casa, aunque algunos tienen pequeños cerdos como mascotas, pero normalmente no quisiéramos tener nuestra casa llena de cerdos, principalmente por razones de insalubridad, por su olor, por sus desechos, etc. MATEO 7-6-
Para los judíos los cerdos son animales impuros y son animales que representan algo desagradable y menospreciable, y degradante (Lucas 15:15)
El texto que hemos leído nos dice que no debemos darle lo santo a los perros ni echar nuestras perlas delante de los cerdos, y esto nos habla de no insistir en predicar el precioso evangelio de Cristo a personas que obstinadamente tienen su corazón cerrado para Dios y menosprecian y se burlan del evangelio.
Pero también podemos tomar este versículo y aplicarlo a nuestra vida personal y familiar, pues muchas veces queremos que el Señor bendiga nuestra familia, queremos que Dios nos de sus preciosas perlas de paz, de salud, de prosperidad, pero nosotros hemos llenado nuestra casa de cerdos, y el Señor no puede ir en contra de su palabra y no dará sus bendiciones para que sean destruidas por los cerdos que nosotros hemos metido en nuestro hogar.
Y estos cerdos tienen nombre, están bien identificados, y por medio de la palabra de Dios vamos a responder una pregunta muy importante: ¿CUÁLES SON ESOS CERDOS QUE HEMOS LLEVADO A NUESTRA CASA?
I) LA VIOLENCIA INTRA FAMILIAR (JEREMIAS 6:6)
Nuestro Dios castiga el pecado y la violencia es un pecado que no pasa desapercibido para nuestro Dios, y el Señor no promete bendiciones a las personas que usan la violencia en contra de su familia, lo que el Señor traerá es castigo.
Es triste para una esposa y para sus hijos vivir siendo oprimidos violentamente por un hombre que dice ser cristiano pero que sus acciones son las de alguien que no tiene ningún temor de Dios (Eclesiastés 4:1)
Pero Dios nos es indiferente al clamor de aquellos que sufren violencia, él les hará justicia, él llegara en su rescate (2 Samuel 22:3)
II) LOS ABUSOS SEXUALES (EZEQUIEL 22:11)
Los abusos sexuales en la familia son temas de los que nadie quiere hablar, por temor, por vergüenza, etc, son cerdos que tratamos por todos los medios que no se vean, que tratamos de que nadie se entere que habitan en nuestra casa.
Pero tenemos que saber que aunque nadie quiera decir nada, aunque son temas que quisiéramos que nadie se diera cuenta, para nuestro Dios nada está oculto.
Es muy triste y muy difícil para las personas que están siendo víctimas de abusos sexuales que en lugar de apoyo, en lugar de sentirse defendidas y protegidas, lo que encuentran muchas veces es silencio e indiferencia (2 Samuel 13:20) y muchas niñas y adolescentes viven desconsoladas, son cristianas pero no tienen gozo en su vida pues están sufriendo abusos en su hogar y no tienen quien las ayude.
Tenemos que saber que si alguien esta cometiendo abusos sexuales en nuestra familia, esa persona no solamente ha pecado contra Dios sino que también ha cometido un delito muy grave, no podemos solamente orar por esta persona, es necesario que enfrente las consecuencias de sus actos, la palabra de Dios nos muestra que toda persona que cometía un abuso sexual tenía que recibir un castigo (Deuteronomio 22:25-27) y para eso ha dejado Dios las autoridades.
III) LOS VICIOS (ISAIAS 5:11)
Verdaderamente que los vicios llenan los hogares de todo tipo de cosas desagradables(Isaías 28:7-8) una persona que está enredada en un vicio tiene que saber que le está dando un ejemplo horrible a sus hijos.
Una persona enredada en vicios está llevando escasez a su familia (Proverbios 21;17)Dios no puede bendecir y prosperar a una persona enredada en vicios pues esa bendición se desperdicia en cosas que no aprovechan y que no traen ningún beneficio para la familia (Isaías 55:2)
IV) LA FORNICACIÓN Y EL ADULTERIO (HEBREOS 13:4)
Muchas familias cristianas lastimosamente no pueden experimentar las bendiciones de Dios en su vida pues están viviendo abiertamente en rebeldía contra Dios y su palabra.
Tenemos que comprender que aunque para la sociedad sean aceptadas o para las personas sea algo normal, pero para nuestro Dios las relaciones de fornicación y de adulterio no son agradables ni tampoco son bendecidas.
Queremos ser bendecidos viviendo en un desorden moral y se nos olvida que nuestro Dios es un Dios de orden (1 Corintios 14:40)
¿QUE TENEMOS QUE HACER PARA SACAR LOS CERDOS DE NUESTRA CASA?
Primeramente tenemos que reconocerlos en nuestra propia vida y tener un verdadero arrepentimiento de corazón y una verdadera conversión con la ayuda de nuestro Dios(Hechos 3:19)
Tenemos que ser esforzados y valientes por nuestra familia para enfrentar la violencia y los abusos, sabiendo que no los vamos a enfrentar solos, sino que Dios está con nosotros (Josué 1:9)
Tenemos que levantar muros para que esos cerdos no vuelvan a entrar a nuestra vida y a nuestra familia, y el primero de esos muros es la salvación (Isaías 26:1