Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos. Jeremías 6:16
Sin duda alguna, si que somos responsables de nuestras decisiones; Jehová nos ha hecho seres moralmente responsables, y aunque esto es así, el Señor en su misericordia nos ayuda en nuestra elección. Eso fue lo que hizo con el pueblo de Dios y en esta Palabra dada al profeta; lo mismo lo hacemos al día de hoy, Dios nos marca sobre cuál es la decisión correcta, Él nos llama a escoger el buen camino, pero elegimos no hacerlo.
En la gracia infinita del Padre, nos otorga el privilegio de escoger de nuevo. Jehová en su momento pudo haber destruido el pueblo de Judá desde antes, por siglos ha sido un pueblo desobediente y desde este punto sin retorno Jehová no tenía la más mínima obligación de darles otra oportunidad. Hoy día decimos que todo el mundo tiene el derecho de una segunda oportunidad y ¿qué de la oportunidad número 500? Aun así, Dios da el permiso para escoger. el Señor pone delante de ellos la vida y la muerte. Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antigua, cuál sea el buen camino, y andad por él…
La meta del creyente es vivir para la gloria de Dios en todas las áreas de la vida, negándose a sí mismo y tomando su cruz todos los días. Pero hoy tenemos una teología centrada en el hombre basada en una religiosidad terapéutica, charlas motivacionales, la prosperidad monetaria. Promotores de que la angustia y las dificultades no son buenas para ti. Muchos han abrasado esta teología del confort, y venden el cielo con la cruz pero con una hecha de plumas, sin calvario, sin lágrimas… Volvamos a las sendas, aquí tenemos la elección de caminar por donde Dios nos quiere mostrar la Salvación. Jehová lleno de gracia y amor te bendiga en este día, Amén.