Para muchos, este nuevo año representa una oportunidad para comenzar de nuevo con la lectura bíblica. En este momento, tengo sobre mi escritorio un plan nuevo que acabo de imprimir: 1200 casillas vacías para llenar este año, con cuatro lecturas diarias durante trescientos días, lo que equivale a unos quince minutos de lectura cada día. El pastor John y yo volveremos a usar el Plan de lectura bíblica Libro-a-la-vez de los Navegantes en 2025, el mismo plan que seguimos el año pasado
Te invitamos a que leas toda la Biblia con nosotros en 2025. Para algunos, este será su primer intento. ¡Bienvenidos! Si ya lo has hecho antes, ¡bienvenido de nuevo! Puedes encontrar el Plan de Lectura Bíblica de los Navegantes en línea buscando su nombre. Descarga el PDF con el cronograma, imprímelo y únete a nosotros este año. En el podcast, hemos preparado un par de docenas de preguntas interesantes para el pastor John, que coinciden con la lectura del día. No es necesario que sigas el plan de lectura para beneficiarte de esos episodios, pero si lo haces, creo que obtendrás un beneficio adicional.
Aquí estamos, al inicio de un nuevo año, comenzando la lectura completa de la Biblia en 2025, algo que tú has hecho en varias ocasiones, Pastor John. ¿Qué desafíos nos esperan? ¿Qué bendiciones podemos anticipar? Estas son las preguntas que un oyente llamado Mike nos presenta:
Hola, Pastor John. He sido bendecido por tu ministerio durante muchos años. Este año, espero leer mi Biblia de principio a fin por primera vez, utilizando el Plan de Lectura Bíblica de los Navegantes que recomiendas. Me siento algo emocionado, pero también muy intimidado y enormemente poco preparado para lo que me espera este año. Nunca he hecho algo así antes. ¿Qué consejo me darías? ¿Y qué obstáculos debo esperar superar para lograrlo en 2025?
Amén, y alabado sea Dios por lo que Mike ha decidido hacer. Hace apenas, ¿qué?, una hora y media estaba leyendo la porción de mi plan de lectura para hoy. Llevo usando este sistema, ¿20 o 25 años? No lo sé exactamente. Me encanta este sistema. He probado otras opciones, pero generalmente termino regresando a este. Así que, Mike, es bueno que estés emocionado, y sí, también es normal que te sientas intimidado. En muchos aspectos, no estás completamente preparado. Yo tampoco lo estoy. Por eso leemos. Pablo dijo que toda la Escritura está inspirada precisamente para prepararnos: «a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado» —o podríamos decir preparado— «para toda buena obra», incluida la lectura bíblica (2 Ti 3:16-17). Así que tienes que leer para estar preparado para leer, ¿verdad? Por lo tanto, está bien sentirse intimidado al leer la Biblia.
Entonces, ¿qué puedes esperar? Permíteme presentarte tres aspectos negativos que podrían intimidarte y nueve positivos que seguramente te motivará a seguir adelante.
Tres enemigos de la lectura bíblica
Espera oposición. Satanás odia la Palabra de Dios y hará todo lo posible para desanimarte, cegarte, distraerte y aburrirte. Su meta es impedir que te sumerjas en las Escrituras. Por eso, ora, lucha y pide a Dios que todo lo que Satanás intente en tu contra se vuelva en su contra, que sus planes fracasen mientras tú te fortaleces como un guerrero en su contra: que tu corazón sea inclinado hacia Dios, que tu ceguera sea removida, que tengas enfoque en lugar de distracción y entusiasmo en lugar de aburrimiento. Así que, prepárate para enfrentar la oposición.
Espera quedar impactado. La crudeza del pecado con sus descripciones gráficas, los horrores del juicio de Dios y los fracasos de Su pueblo son perturbadores en la Biblia. Este libro sagrado presenta de manera sorprendentemente explícita tanto la vileza de nuestro pecado como el juicio impresionante de Dios sobre él. Habrá momentos en los que, si te acercas a la Biblia con un corazón receptivo, sentirás un profundo rechazo al ver lo que Dios decreta contra el pecado en este mundo. Por lo tanto, prepárate para que tus conceptos sobre el hombre y sobre Dios sean desafiados y transformados, de una manera que impactará positivamente tu fe.
Espera sentir confusión por tres razones.
Primero, Dios oculta muchas cosas que nos gustaría saber. Deuteronomio 29:29 dice: «Las cosas secretas pertenecen al Señor nuestro Dios, pero las cosas reveladas nos pertenecen a nosotros y a nuestros hijos para siempre, a fin de que guardemos todas las palabras de esta ley». Habrá cosas que desearás entender, pero Dios dice: «No, eso es asunto mío, no tuyo».
Satanás odia la Palabra de Dios y hará todo lo posible para desanimarte, cegarte, distraerte y aburrirte
La segunda razón por la que sentirás confusión es que lo que Dios ha revelado a menudo es difícil de entender. Pedro lo expresó claramente en 2 Pedro 3:16: «…tal como [Pablo] lo hace en todas sus cartas, cuando habla en ellas de estos temas. Hay algunas cosas en [las cartas de Pablo] que son difíciles de entender, que los ignorantes e inestables tuercen para su propia perdición, como también tuercen el resto de las Escrituras». Hay cosas en las cartas de Pablo que son difíciles de comprender, y no deberíamos esperar que sean fáciles. Por lo tanto, en algunos momentos nos sentiremos confundidos.
Y la tercera razón por la que sentirás confusión es que Cristo ha dado maestros a la iglesia. ¿Alguna vez has pensado en eso? En el Nuevo Testamento, Él no simplemente entregó una Biblia y dijo: «Ahora no necesitamos maestros porque ya tenemos la Biblia. Tenemos al Espíritu Santo, así que ningún ser humano necesita enseñar en la iglesia». No hizo eso. Dijo que en cada iglesia debe haber ancianos, y esos ancianos deben ser aptos para enseñar (1Ti 3:2). Esto significa que las personas necesitan explicaciones sobre lo que encuentran en la Biblia, y los maestros son llamados a estudiar y ayudar a los demás. Por lo tanto, a menos que seas uno de esos maestros, y a menos que seas Dios, te encontrarás con cosas confusas en la Biblia que necesitarás que otros te ayuden a entender.
Planta las raíces de tu mente y de tu corazón en toda la Biblia, y tu gozo se volverá indestructible
La implicación de estas tres razones es la siguiente: por iluminación. Haz todo lo que te ayude a profundizar en el estudio. Conecta lo que puedas conectar y lo que no logres comprender, déjalo pendiente para atenderlo más adelante. Sigue avanzando, porque si te quedas atascado en lo que no entiendes, nunca terminarás la lectura del día.
Nueve beneficios de la lectura bíblica
Esos son los aspectos negativos. Ahora vienen los nueve aspectos positivos. Los mencionaré de forma muy breve. Estas son las cosas que puedes esperar.
Espera que tu fe se profundice y se fortalezca, porque Romanos 10:17 dice: «Así que la fe viene del oír, y el oír, por la palabra de Cristo». También, espera que tu esperanza en Dios se haga más inquebrantable, porque Romanos 15:4 afirma que todo lo que está escrito en la Biblia fue escrito para brindarte esperanza.
Espera que Dios haga una obra seria de liberación en tu vida, porque Jesús dijo: «y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres» (Jn 8:32). Al leer Su palabra, conocerás la verdad, y esa verdad te hará libre.
Espera un nuevo poder en la guerra contra Satanás, porque así es como Jesús lo derrotó en el desierto. Él citó las Escrituras al diablo, y el diablo no pudo resistir ante ellas. Tampoco podrás resistirte a ti. Él es un mentiroso; es un engañador. No puede soportar la verdad. Tú estás llenando tu cabeza con la verdad. Vas a ser un guerrero valiente, más de lo que has soñado, contra Satanás.
Espera una profunda obra de santificación en tu vida, porque Juan 17:17 dice: «Santifícalos en la verdad; Tu palabra es verdad».
Espera convertirte en una persona más amorosa con quienes te rodean, porque Pablo dice en Filipenses 1:9 que él ora para que el «amor de ustedes abunde aún más y más en conocimiento verdadero y en todo discernimiento». Y él dijo en 1 Timoteo 1:5 que la meta de su instrucción —es decir, la meta de la Biblia— «es el amor nacido de un corazón puro». Así que vas a encontrar que el amor por las personas crece en tu corazón al sumergirte en toda la amplitud de las Escrituras.
Espera que, aunque has sido salvado de manera decisiva, seguirás siendo salvado por las Escrituras. La mayoría de las personas no piensan en esto. «Ten cuidado de ti mismo y de la enseñanza. Persevera en estas cosas, porque haciéndolo asegurar la salvación tanto para ti mismo como para los que te escuchan» (ver 1 Ti 4:16). La Biblia es el medio de Dios por el cual Él sigue salvándose.
Espera gozo —gran gozo, gozo inquebrantable que el mundo no conoce—, porque Jesús dijo: «Estas cosas les he hablado, para que Mi gozo esté en ustedes, y su gozo sea perfecto» (Jn 15:11). Así que, hunde las raíces de tu mente y de tu corazón en toda la Biblia, y tu gozo se volverá indestructible.
Espera encontrarte con Dios —encontrarte con Dios, no solo con verdades acerca de Dios—. Espera encontrarte con Dios, porque dice en 1 Samuel 3:21: «Y el Señor se volvió a aparecer en Silo. Porque el Señor se revelaba a Samuel en Silo por la palabra del Señor». Él se reveló «por la palabra». Y Él hace eso. Él hace eso. Espero encontrarte con Él.
Finalmente, espera ver la gloria de Cristo. «Pero todos nosotros [los creyentes], con el rostro descubierto, contemplando como en un espejo la gloria del Señor, estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu» (2 Co 3:18).
Ahora bien, ¿cómo sabemos que eso sucede en la Biblia? Porque si sigues el hilo del pensamiento de Pablo desde 2 Corintios 3:18 – 4:6, él se refiere a cómo vemos la gloria de Cristo. Es decir, la vemos en «el resplandor del evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios» (2 Co 4:4). El evangelio es la narrativa escrita de las historias o los eventos —y su significado— de la muerte y resurrección de Cristo.
