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La Santa Cena y La Comunión con los Tres

La comunión es tener participación de lo común o hacernos comunes entre nosotros. En otras palabras es una actitud o un trato familiar entre cristianos. Es una participación o comunicación que los creyentes tenemos entre sí, donde compartimos mutuamente, bienes espirituales, materiales y de otra índole.

En resumen, comunión es estar o tener un mismo sentir.

La palabra comunión proviene del vocablo griego, koinonia que quiere decir: ayuda, compañerismo, contribución, comunicación, ofrenda, participación.

El Griego, koinonia se deriva de la raíz griega koinos, cuyo significado es, hacerse común, lo que denota, una actitud en la que se comparte la misma cualidad o pertenencia.

La Biblia nos permite ver que temenos acceso a la comunión con Dios y con nuestros hermanos, veamos.

1.- COMUNIÓN CON EL PADRE:

1 Juan. 1:3 (RV1960) Lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.

La palabra de Dios declara:

1.- Que nadie puede acercarse al Padre sino es por el Hijo                    (Juan. 14:6).

Juan 14:6 (RV1960) Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

2.- En esta dispensación de la Gracia se nos ha dado el titulo de Hijos de Dios, por medio de reconocer el sacrificio redentor de nuestro Señor Jesucristo (Juan. 1:12).

Juan 1:12 (RV1960) Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;

Esas son dos razones por las cuales tenemos comunión con el Padre.

De manera que poseemos el privilegio de acercarnos con toda confianza a su trono. Para alabarlo, adorarlo, bendecirlo, encontrar gracia, misericordia y auxilio para nuestras vidas (He. 4:16).

Hebreos 4:16 (RV1960) Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

2.- COMUNIÓN CON EL HIJO:

1 Corintios 1:9 (RV1960) Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor.

El padre nos llama a tener comunión con su Hijo. Esta es una unión o participación espiritual entre uno que ha nacido de nuevo y el Señor Jesucristo. Él es la cabeza o máxima autoridad de nosotros los creyentes (Efesios 1:22-23).

Efesios 1:22-23 (RV1960) Y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia,

23 la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.

Tenemos comunión con Él por medio de su Gracia, por lo que debemos mantenernos en obediencia y en santidad. La Biblia hace una comparación del Señor con la Vid verdadera, cuyas ramas somos nosotros, que hemos sido injertados en ella.

Ahora somos hijos de Dios, alimentados por la misma raíz y participantes de la rica savia que es su sangre (Romanos 11:16-17).

Una de las formas prácticas de manifestar que tenemos comunión con Él es por medio de:

La santa cena 1 Corintios 10:16-17.

1 Corintios 10:16-17 (RV1960) La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la comunión de la sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la comunión del cuerpo de Cristo?

17 Siendo uno solo el pan, nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan.

LA Biblia indica que la copa de bendición y el pan que partimos es la comunión de la sangre y el cuerpo del Señor. Además, cuando participamos del mismo pan simbolizamos la unidad que temenos entre nosotros como Cuerpo de Cristo. Y afirmamos que es el Pan de Vida que nos nutre a todos los creyentes.

3.- COMUNIÓN CON EL ESPÍRITU SANTO:

2 Corintios 13:14 (RV1960) La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén.

En el Antiguo Testamento, estaba tipificado el ministerio de Espíritu Santo por medio del aceite (Exodo 29:7; Is. 61:1). En esta Dispensación, él Espíritu Santo ha sido derramado en nuestras vidas (Hechos. 2.17).

Hechos 2:17 (RV1960) Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; Vuestros jóvenes verán visiones, Y vuestros ancianos soñarán sueños;

Él es Dios en nosotros, con nosotros y sobre nosotros, por lo que debemos mantenernos cuidando nuestra vida espiritual y no contristarlo, para no despreciar esa comunión (Hebreos 6:4-5).

Hebreos 6:4-5 (RV1960) Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo,

5 y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero.

El Espíritu Santo nos guía a toda verdad (Juan 16:13), nos enseña, nos recuerda todas las cosas y nos consuela (Juan 14.26).

Convence al mundo de justicia, pecado y de juicio (Juan 16:8).

Por medio de Él fuimos bautizados para formar un solo cuerpo            (1 Corintios 12:13).

Una de las maneras prácticas de manifestar nuestra comunión con el Espíritu Santo es la siguiente:

Teniendo unidad espiritual, entre hermanos, filipenses 2:1-2.

Filipenses 2:1-2 (RV1960) Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún consuelo de amor, si alguna comunión del Espíritu, si algún afecto entrañable, si alguna misericordia,

2 completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa.

La confraternidad entre los hijos de Dios es el resultado del gobierno del Espíritu Santo en cada uno de nosotros. Los creyentes somos llamados a tener amor entrañable, a mostrarnos afecto constantemente, no solamente por medio de palabras sino, con hechos.

Debemos tener un mismo amor, un mismo corazón, un mismo pensamiento.

4.- COMUNIÓN CON EL CUERPO DE CRISTO:

1 Juan 1:7 (RV1960) Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

De lo antes mencionado, resumimos, que cuando mantenemos viva la comunión con Dios. Podemos tener comunión entre nosotros; manteniéndonos en un mismo proyecto, trabajando unidos, sirviéndonos mutuamente. Veamos detalladamente de qué manera se hace latente la comunion Koinonía, analizando sus sinónimos, en diferentes partes de la Biblia.

La Participación 2 Corintios 8:1-4 siendo un mismo cuerpo, las necesidades de los demás se hacen nuestras.

Compañerismo Gálatas 2:9 Tener comunión lleva implícitas, la amistad, buena armonía, convivencia y correspondencia entre hermanos.

Comunicación Filemon 1:6 Otra forma de comunión es la comunicación de la fe.

La que designamos, como una correspondencia que existe entre dos o más personas, donde se hace notoria nuestra madurez y fidelidad.

Ofrenda Romanos 15:26 La comunión no es solamente espiritual, sino más bien un hecho práctico. Comunión también significa colecta, ofrenda. La generosidad del cristiano hacia sus hermanos, radica en el ejemplo de nuestro Señor, quien siendo rico se hizo pobre para enriquecernos a nosotros (2 Corintios 8:9).

Anhelemos tener comunión para servir, no buscando lo nuestro, sino lo de Dios (Filipenses 2: 1-8).

Dios nos llama a tener comunion con El, con su Hijo, con el Espiritu Santo y con el cuerpo de Cristo. Y todo en mismo sentir, en una participación donde nos hacemos comun uno a los otros, bajo una misma cualidad.

Pidele ayuda al Espiritu Santo para tener esa communion, y si hubiera algo que no te permite estar en communion con Dios y los hermanos de la fe, entregalo hoy al Espiritu Santo y el obrara en el nombre de Jesus y podras accesar a esa gran comunion que desea el Padre para sus hijos.

Dios les Bendiga Grandemente y Poderosamente.

 

Fuente:
Pastor Franklin Quintero, Iglesia de Cristo Ebenezer | Mobile Alabama, EEUU

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