JUAN 11:1-6 Estaba entonces enfermo uno llamado Lázaro, de Betania, la aldea de María y de Marta su hermana. 2 (María, cuyo hermano Lázaro estaba enfermo, fue la que ungió al Señor con perfume, y le enjugó los pies con sus cabellos. 3 enviaron, pues, las hermanas para decir a Jesús: Señor, he aquí el que amas está enfermo. 4 oyéndolo Jesús, dijo: Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella. 5 y amaba Jesús a Marta, a su hermana y a Lázaro. 6 cuando oyó, pues, que estaba enfermo, se quedó dos días más en el lugar donde estaba.
Este día vamos a tomar lecciones muy importantes para nuestra vida cristiana por medio de la historia tan conocida de la muerte y resurrección de un hombre llamado Lázaro.
I) PRIMERA LECCIÓN: AUN LAS PERSONAS QUE ADORAN Y SIRVEN AL SEÑOR DE CORAZON PUEDEN SUFRIR ENFERMEDADES Y SITUACIONES CRÍTICAS EN SUS VIDAS (VS 1-4) Estaba entonces enfermo uno llamado Lázaro, de Betania, la aldea de María y de Marta su hermana. 2 (María, cuyo hermano Lázaro estaba enfermo, fue la que ungió al Señor con perfume, y le enjugó los pies con sus cabellos. 3 enviaron, pues, las hermanas para decir a Jesús: Señor, he aquí el que amas está enfermo. Podemos ver que la familia de Lázaro era amada del Señor, le servían y le adoraban, pero eso no significaba que eran exentos de enfermarse o de pasar situaciones críticas en sus vidas, tenemos que comprender que, aunque somos cristianos seguimos siendo humanos, y por eso no debemos enojarnos ni permitir que nuestro corazón se llene de resentimiento en contra del Señor.
II) SEGUNDA LECCIÓN: MUCHAS VECES DIOS PERMITE LAS ENFERMEDADES Y LOS TIEMPOS DE CRISIS EN NUESTRA VIDA PARA PODER GLORIFICARSE EN ELLOS (VS 4) Oyéndolo Jesús, dijo: Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella. El Señor iba a glorificarse por medio de la enfermedad y la muerte de Lázaro, nosotros debemos comprender que lo que hoy estamos viviendo tiene un propósito de Dios, tenemos que confiar que de una u otra manera el Señor será glorificado por medio de lo que hoy estamos enfrentando, podemos cambiar el enfoque y dejar de ver las situaciones con negativismo sino como una oportunidad para ver la gloria de Dios en nuestra vida.
III) TERCERA LECCIÓN: DIOS OBRA EN SU TIEMPO, NO EN EL NUESTRO (VS 6) Cuando oyó, pues, que estaba enfermo, se quedó dos días más en el lugar donde estaba. Seguramente Marta, María y Lázaro hubieran querido que Jesús llegara inmediatamente, pero el texto nos dice que cuando supo que Lázaro estaba enfermo, se quedó aun dos días más en el lugar donde estaba, eso nos permite comprender que el Señor no se adaptara a nuestro tiempo y a nuestro calendario, sino que él tiene un tiempo perfecto para obrar en nuestra vida, tenemos que aprender a ser pacientes, lo que si podemos estar seguros es que pase lo que pase, cuando Jesús llega, nunca es demasiado tarde, en él siempre hay esperanza, siempre hay una oportunidad.
IV) CUARTA LECCIÓN: EL CONSUELO VERDADERO SOLAMENTE ESTÁ EN JESÚS (JUAN 11:17-19) Vino, pues, Jesús, y halló que hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro. 18 Betania estaba cerca de Jerusalén, como a quince estadios; 19 y muchos de los judíos habían venido a Marta y a María, para consolarlas por su hermano. Muchos habían llegado a la casa de Marta y María para consolarlas, pero solamente Jesús pudo transformar su dolor en gozo, nosotros debemos de confiar que aun en los momentos más difíciles y tristes de nuestra vida solamente en Jesús podemos encontrar verdadero consuelo y esperanza, solamente él puede cambiar nuestro llanto en alegría.
V) QUINTA LECCIÓN: AUN LAS SITUACIONES MÁS DIFÍCILES Y TRISTES DE NUESTRA VIDA TIENEN UN PROPÓSITO DE BENDICIÓN Y SALVACIÓN PARA NUESTRO DIOS (JUAN 11:21-27) Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto. 22 Mas también sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará. 23 Jesús le dijo: Tu hermano resucitará. 24 Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero. 25 le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. 26 Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? 27 le dijo: Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo. Ese momento de dolor el Señor lo aprovechó para confrontar a Marta con su fe. Jesús le dijo: ¿Crees esto? y Marta hizo una preciosa profesión de fe: Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo. Tenemos que saber que muchas veces el Señor permite el dolor, la enfermedad y hasta la muerte en nuestra familia para que aquellos que no han creído en él crean y se salven.
VI) SEXTA LECCIÓN: AUNQUE LAS SITUACIONES PAREZCAN PERDIDAS PARA EL SEÑOR NO HAY NADA IMPOSIBLE (JUAN 11:38-40) Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta encima. 39 dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días. 40 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que, si crees, verás la gloria de Dios? Lázaro tenía cuatro días de haber muerto, la frase que dijo Marta “hiede ya” significaba que ya nada se podía hacer, que ya no había oportunidad, pero Jesús declaró una maravillosa verdad: Si creemos veremos la gloria de Dios, a pesar de lo difícil o imposibles que parezcan las circunstancias.