
Basado en Génesis 3:15, 21-24 . Inspirado en el sermón del Pastor Miguel Núñez
Desde el momento mismo en que el hombre cayó, la gracia de Dios comenzó a manifestarse.
Aun cuando Adán y Eva pecaron, Dios no los abandonó a su destino.
En lugar de destruirlos, les dio una promesa y una cobertura: la promesa de un Redentor (Génesis 3:15) y la cobertura de túnicas hechas por Él mismo (Génesis 3:21).
Allí, en el huerto donde todo parecía perdido, Dios mostró que Su gracia siempre llega primero.
Antes de que el hombre buscará reconciliarse, Dios ya había provisto el camino del perdón.
Esa es la esencia del Evangelio: un Dios que actúa a favor del culpable, no por mérito, sino por misericordia.
El Pastor Miguel Núñez nos recuerda que esta gracia no es un simple favor, sino un acto redentor que nos cubre, nos restaura y nos llama a responder con obediencia y gratitud.
Porque si la gracia de Dios nos cubrió cuando estábamos desnudos en pecado, ¿cómo no vivir ahora para honrarla?
La misma gracia que nos rescató, nos sostiene cada día, y nos invita a reflejar Su amor con humildad, fidelidad y servicio.
Hoy, esa gracia sigue extendiéndose a cada corazón que se vuelve a Dios.
No importa cuán lejos hayamos caído, Su cobertura sigue disponible.
Que nuestra respuesta no sea la huida, sino el regreso; no la culpa, sino la confianza; no el silencio, sino la adoración.
Porque la gracia que nos rescata es la misma que nos guarda hasta el fin.
Basado en el sermón “La gracia que nos rescata”, predicado por el Pastor Miguel Núñez (@PastorMNunez).
Disponible en YouTube: https://youtu.be/qY01r3Ut4R8
Publicación: Tabernáculo Prensa de Dios
Serie: Ministrando Paz, Fe,Amor y Esperanza



