1 Corintios 15:58 En los seres humanos el soporte principal de nuestro cuerpo, lo que nos hace estar firmes, lo que nos permite caminar y realizar una gran cantidad de movimientos es nuestra columna vertebral, la cual está formada por 33 vertebras que van desde la base de nuestro cráneo hasta la cintura.
Este día vamos a comparar nuestra columna vertebral con nuestra columna espiritual, pero ¿a que nos referimos con columna espiritual? Es lo que nos permite estar firmes, constantes y creciendo en la obra de nuestro Dios, la columna vertebral de nuestro cuerpo esta formada por 33 huesos, pero la columna espiritual de un cristiano está formada principalmente por tres elementos:
Nuestra asistencia a la iglesia
Nuestra lectura Bíblica diaria
Nuestra vida de oración y adoración.
Lastimosamente en nuestro cuerpo la columna vertebral puede sufrir daños severos que afectan grandemente nuestra vida, esos daños pueden ser causados por caídas, puñaladas, disparos, accidentes de tránsito, enfermedades degenerativas, etc.
Nuestra columna espiritual también es dañada por causas muy similares:
Las caídas: Cuando caemos en pecado nuestra vida espiritual es afectada pues muchas veces nos alejamos del Señor y de su iglesia.
Las puñaladas: satanás es astuto y muchas veces utilizara personas que apuñalen nuestro corazón con sus palabras, con sus burlas, con sus comentarios hirientes, con sus chismes, pues siempre satanás tratara de matar nuestra fe, de derribar nuestra convicción para que nos apartemos de los caminos del Señor. (Salmo 64:3)
Los accidentes: Vamos caminando por la vida y chocamos con el mal testimonio de otros cristianos, chocamos con la doble vida de personas de nuestras iglesias, con sus vicios, con sus adulterios, y eso lamentablemente a muchos cristianos los desmoraliza espiritualmente, les afecta los desanima, y también los hace caer. (Mateo 18:7)
Las Enfermedades: Hay un virus que afecta grandemente nuestra columna espiritual, que afecta nuestra comunión personal con Dios, ese virus se llama: “Afanes de este mundo” (Lucas 10:40-42)
Cuando la columna vertebral de nuestro cuerpo se daña, esto puede traer serias consecuencias a nuestra vida, como, por ejemplo: dificultad para caminar, parálisis, perdida de la sensibilidad en los miembros inferiores, etc.
Igualmente, cuando nuestra columna espiritual es afectada, cuando dejamos de congregarnos, cuando descuidamos nuestra lectura Bíblica diaria, cuando no hablamos con nuestro Dios por medio de la oración, esto también trae a nuestra vida consecuencias tales como:
LA DIFICULTAD PARA CAMINAR EN LOS CAMINOS DE DIOS (2 CRÓNICAS 34:2)
La única forma de mantenernos caminando rectamente en los caminos de nuestro Dios, la única forma de mantenernos firmes en sus caminos es por medio de nuestra columna espiritual, congregándonos con constancia, leyendo su palabra todos los días y orando en todo momento y en todo lugar.
Un cristiano que descuida su columna espiritual pronto comenzara a torcer sus caminos a la derecha o a la izquierda, a los placeres del mundo, a los afanes de la vida, a la búsqueda de las riquezas materiales, y poco a poco su corazón se alejara del Señor.
Y tenemos que comprender que todo cristiano que quiera caminar en los caminos del Señor y también en los caminos del mundo, no tendrá bendición, sino que tendrá destrucción (Proverbios 10:29)
LA PARÁLISIS ESPIRITUAL (JUAN 15:5)
Un cristiano que ha dañado su columna espiritual se vuelve paralitico espiritualmente, no avanza, no crece espiritualmente, se estanca en su vida espiritual (Hebreos 5:12)
Un cristiano paralitico espiritual se vuelve alguien dependiente de los demás y no de Dios (Juan 5:6-7/ Hechos 3:1-5)
El cristiano que tiene firme su columna espiritual, asistencia constante a su iglesia, Lectura Bíblica y vida de oración, tiene una fuerza en su vida que ningún hombre le puede dar (Efesios 6:10)
LA PERDIDA DE LA SENSIBILIDAD (EFESIOS 4:19)
Uno de los grandes peligros de descuidar nuestra relación con Dios y enredarnos en una vida de pecado es llegar a perder la sensibilidad de nuestro corazón.
Esto ocurre cuando poco a poco vamos contristando el Espíritu Santo que mora en nosotros (Efesios 4:30)
Perder la sensibilidad significa que ya no nos importa ofender a nuestro Dios, que nos da igual ofenderlo, no obedecerle, no nos importa manchar nuestro testimonio y el nombre de Cristo por nuestro estilo de vida.
El primer paso para dañar nuestra columna espiritual y llegar hasta la perdida de la sensibilidad es dejar nuestro primer amor como le ocurrió a la iglesia de Éfeso (Apocalipsis 2:4)
¿Qué podemos hacer cuando nuestra columna espiritual esta dañada? ¿Que necesitamos para no caer en la parálisis espiritual y en la falta de sensibilidad de nuestro corazón?
La respuesta la encontramos en las palabras que el Señor le dijo a la iglesia que había dejado su primer amor (Apocalipsis 2:5)
Recordemos de donde hemos caído.
Arrepintámonos de corazón.
Volvamos a hacer nuestras primeras obras.
Fuente:
