MATEO 16-19 Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.
Definitivamente que en el reino de los cielos hay grandes maravillas que están disponibles para nosotros los hijos de Dios, y como lo dice el texto esas bendiciones, esas maravillas del reino de los cielos pueden ser desatadas por medio de las llaves que el Señor ha dado a su iglesia.
En nuestro dia a dia definitivamente podemos reconocer que las llaves son una gran diferencia, tanto cuando las tenemos como igualmente cuando no las tenemos, es decir que tener las llaves que necesitamos en el momento que las necesitamos es algo verdaderamente importante.
Las llaves de las cuales vamos a hablar este día tienen el poder de ABRIR PUERTAS EXTRAORDINARIAS Y DESATAN LAS MARAVILLAS DE DIOS sobre nuestra vida
Veamos en la palabra de Dios cuáles son esas llaves que abren grandes puertas de bendición y que no pueden faltar en nuestra vida:
I) PRIMERA LLAVE: MI FE
(MARCOS 9:23) Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.
La llave es “LA FE” pero para que esa llave funcione tiene que ser “MI FE”, yo tengo que tener esa llave en mi vida para poder usarla.
La fe por sí misma no actúa, la fe por sí misma no hace maravillas, cada uno de nosotros tenemos que hacerla funcionar para que desate las maravillas de Dios.
La fe es una llave muy pequeña pero al usarla desata el poder del reino de Dios sobre nuestra vida y abre una puerta maravillosa que nada ni nadie puede abrir: LA PUERTA DE LO IMPOSIBLE (Mateo 17:20) Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible.
La llave de MI FE también puede desatar las maravillas de Dios en la vida de nuestros prójimos (Santiago 5:14-15) ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiendo con aceite en el nombre del Señor. 15 Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados.
II) SEGUNDA LLAVE: MI ACTITUD PARA CON DIOS
(SALMO 37:4) Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Verdaderamente nuestra actitud para con Dios es una llave que puede desatar grandes maravillas y bendiciones sobre nuestra vida, pero DELEITARSE EN DIOS, ¿QUÉ SIGNIFICA?
Servir a nuestro Dios con alegría (Salmo 100:2a) Servid a Jehová con alegría;
Congregarnos con gozo (Salmo 100:2b) Venid ante su presencia con regocijo.
Reconocer que no es Dios quien necesita de nosotros, sino que nosotros necesitamos de él todos los días de nuestra vida (Salmo 100:3) Reconoced que Jehová es Dios; Él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.
La llave de nuestra actitud para con Dios, el poder deleitarnos en el Señor, abre una puerta maravillosa: LA PUERTA DE LAS PETICIONES DEL CORAZÓN, es decir, no solamente las peticiones que hemos traído delante de él en oración sino también aquellas peticiones que quizás nunca han salido de nuestra boca en oración, pero Dios conoce nuestros anhelos del corazón.
III) TERCERA LLAVE: MI PERSEVERANCIA
(JUAN 15:7) Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.
Quién de nosotros no quisiera experimentar lo que nos dice la segunda parte del versículo: Pedid TODO lo que queréis y os será hecho, pero lastimosamente no tomamos en cuenta la condición que nos menciona la primera parte del versículo: “SI PERMANECÉIS EN MÍ Y MIS PALABRAS PERMANECEN EN VOSOTROS…”
Muchos cristianos quieren recibir todo lo que piden, PERO NO TIENEN EN SU CORAZÓN ÉL DESEO DE PERSEVERAR EN LOS CAMINOS DEL SEÑOr, ni la palabra de Dios permanece en sus corazones, es decir no tienen él anhelo de obedecerla y llevarla a la práctica.
Este versículo está directamente relacionado con otra enseñanza de nuestro Señor Jesús: (Mateo 19:29) Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna. Pues para perseverar en los caminos de Dios es necesario dejar muchas cosas, ¡Pero vale la pena! pues esa llave nos abre LA PUERTA DE AQUELLAS COSAS QUE MÁS QUEREMOS EN LA VIDA.
IV) CUARTA LLAVE: MI SALVACIÓN
(1 PEDRO 1:9) obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas.
De todas las llaves esta llave es la principal que todo ser humano debe tener en su vida, pues la salvación nos abre LA PUERTA DE LA VIDA ETERNA (1 Juan 5:11) Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo.
Y tenemos que saber que la llave de la salvación tiene un solo nombre: JESÚS (Hechos 4:12) Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
¿QUIERES TENER ESA LLAVE EN TU VIDA? INVITA HOY MISMO A JESÚS A VENIR A TU VIDA, RECIBELO COMO TU SEÑOR Y SALVADOR.
CONCLUSIÓN: Las llaves que Dios nos ha dado son esenciales para nuestra vida espiritual y para experimentar Su poder y bendiciones. La fe, nuestra actitud hacia Dios, la perseverancia y la salvación son llaves que abren puertas extraordinarias en nuestras vidas: desde hacer posible lo imposible hasta alcanzar la vida eterna. Estas llaves no solo nos conectan con Dios, sino que transforman cada aspecto de nuestra existencia. Hoy, pidamos al Señor que nos ayude a usar cada una de estas llaves para que Su voluntad y bendiciones se cumplan en nosotros.