Estamos viviendo tiempos en los cuales la sombra de enfermedad y de muerte está sobre muchos países del mundo por causa de esta pandemia que estamos enfrentando. CANTARES 4-6
Nosotros como cristianos ¿qué debemos hacer? Por supuesto que en términos terrenales tenemos que acatar las disposiciones de los gobiernos, las cuarentenas, él distanciamiento social, la reapertura gradual de las sociedades y una nueva normalidad.
Pero espiritualmente mientras pasan las sombras, mientras huyen las sombras en el mundo, tenemos que subir junto al novio del libro de cantares, el cual es un tipo de Cristo, al monte de la mirra y al collado del incienso.
EL MONTE DE LA MIRRA es un símbolo del Calvario, pues la mirra es una de las especias aromáticas con las cuales nuestro Señor Jesucristo fue ungido antes de ser puesto en la tumba, y la mirra también era parte de lo que quisieron darle de beber a Jesús cuando fue crucificado.
En estos tiempos de sombra de muerte, poner nuestra mirada en el monte de la mirra, en el calvario donde murió nuestro Señor Jesús ¿que nos recuerda?
NOS RECUERDA SU AMOR (ROMANOS 5:8 / ROMANOS 8:32) Tenemos un Dios que nos ama tanto que entregó a su hijo para ser sacrificado por cada uno de nosotros, y por ese amor tan grande podemos tener la seguridad que aun en medio de esta pandemia, aún en medio de estas sombras de muerte él está con nosotros, él nos cuida y nos sanará.
NOS RECUERDA SU VICTORIA (1 CORINTIOS 15:55)Qué maravilloso es saber que ese Jesús que murió en la cruz, tres días después RESUCITÓ por el poder de nuestro Dios, él venció la muerte, venció la tumba y venció a satanás, y esta pandemia también está vencida por la victoria de Cristo Jesús.
NOS RECUERDA QUE EN ÉL HAY SANIDAD (ISAÍAS 53:4-5) Nuestro Señor Jesucristo en la cruz del calvario llevó nuestros pecados y fueron perdonados, para sanidad de nuestra alma, y nosotros hoy podemos tener la seguridad que aquel que quien tiene poder para sanar nuestra alma del pecado, también tiene poder para sanar nuestro cuerpo de nuestras enfermedades. Nuestro Dios no está esperando una vacuna para sanar al mundo, él tiene poder, y en él está nuestra sanidad.
EL COLLADO DEL INCIENSO, nos recuerda la oración y el clamor de nuestro Señor Jesucristo en GETSEMANÍ.
A cada uno de nosotros mientras pasan las sombras el collado del incienso nos recuerda que
NECESITAMOS ORAR INTENSAMENTE EN LOS TIEMPOS DE ANGUSTIA (LUCAS 22:44)el incienso es un símbolo de la oración, y en los tiempos de angustia nuestro Señor nos mostró la forma de enfrentarlos: Orando intensamente, clamado a nuestro Dios por su fortaleza y por su poder.
TENEMOS QUE ACEPTAR LA VOLUNTAD DE NUESTRO DIOS (LUCAS 22:41-42)Mientras pasan las sobras tenemos que aceptar la voluntad de nuestro Dios, creer y creer que sus planes son perfectos, y sus propósitos buenos, aunque no los comprendamos.
CONCLUSIÓN:Mientras todo lo que está ocurriendo hoy en el mundo por esta pandemia, mientras huyen las tinieblas vamos juntos como pueblo de Dios al Monte de la mirra y al Collado del incienso, confiando que pronto la luz de un nuevo día iluminará nuestras vidas.